-¿Ya te dije que eres hermosa? -preguntó Verónica y suspiré tirandome en mi silla-
-Basta -dije mientras ellas se besaban- ¡Oigan!
Katty rió y tapó mi boca volviendo a juntar sus labios.
-Juggie hoy va a almorzar con nosotros-dije con la boca tapada-
-No -dijo Riff- ni lo pienses -rió ironicamente-
-Bien -crucé los brazos alejando la mano de la pelinegra- yo almorazaré con él.
-Adelante -asintió él rodando los ojos-
-Calma, grandote -dijo Katy mirandolo seriamente- cálmate.
-Oye,Juggie es bueno.
-Pero sus amigos se-
-A mi no me importan sus amigos.
-A él no le importan los tuyos -dijo de brazos cruzados-
-Oye -dije bajando la mirada- eso es grosero. Y feo. Y ya quiero llorar.
-No, tranquila -negó Verónica acariciando mi cabello- él esta molesto, porque los del equipo hicieron algo feo hace un rato. Pero ya se le va a pasar.
-¿Qué hicieron?
-Nada, tú no te preocupes.
-Riff -dije volteando a verlo- ¿Qué hicieron?
Él suspiró.
-Acosaron a mi hermanita en el pasillo y la encontré llorando de miedo en un salón.
-¿Tienes hermana?
-Es de parte de mi papá.
-¿Y por qué lloraba?
-Porque ella les respondio y se pusieron agresivos, y le dio miedo.
Me tallé un ojo y suspiré.
-Jughead no hace esas cosas, él no debe haber estado ahi.
-Yo lo ví, Betty.
-¿Q-Qué? ¿Él le dijo algo?
-Ese es el problema, rubia. Él no dijo nada. Estaba ahí, y no los detuvo.
-Juggie no es malo -dije mirándolo- él no es malo. Él jamás le haría eso a alguien.
-Si no les dice nada, es parte de eso, Betty -dijo Sam jugando con su teléfono-
-Jughead no puede, él no-
-Dios, que sí.
-¡No!
-Tranquila -dijo Katy- no peleen. Ustedes se quieren, no peleen por esto.
-Es que el dice que Juggie es malo -dije cansada- y el es bueno, y además, no tendría sentido que acose a una chica, él...
Mi cerebro me dijo que no siga hablando, y me detuve.
-¿Qué? ¿Él qué? -dijo Sam-
-Jughead no acosaría a nadie porque él no hace eso y ya -dije enojada- y tú estás muy malo hoy.
-Y tú muy caprichosa -respondió Riff-
Mis ojos se cristalizaron pero sabía que era una estupidez, así que me tragué el llanto.
-No me digas eso.
La campana sonó y varias personas entraron al salón.
-Ven, vamos a saltarnos una clase.
Tome su mano y me llevó a la sala de música, donde se sentó en el suelo y me senté a su lado.
-Lo siento, me enojan mucho esas cosas -dijo acariciando mi cabello- además... yo no quiero que él ni ninguno de ellos te haga sentir como a Sidney.
Asentí y él besó mi frente.
-No deberíamos estar solos aquí -dije alejándome levemente de él-
-¿Por qué?
-Yo...Jughead está muy inseguro últimamente y-
-¿Ves? Intenté soportarlo pero él está todo el tiempo en todos lados y no hay un momento en el que no arruine algo.
-No hables así de mi novio, Riff, o no volveré a hablarte a tí.
-Betty -suspiró- yo no soy un niño, siempre soy sincero, porque así actúa un maldito hombre, y esto me está haciendo enojar mucho.
-¿Qué cosa? ¿Qué te enoja? Yo estoy enojada porque siempre eres bueno y de repente te agarran ataques de enojo y eres malo.
-Porque me gustas, Betty, y no quiero que estés con él, quiero que estés conmigo.
Mis ojos se abrieron y desperté de repente, vi a Jughead a mi lado y respiré profundo.
¿Qué mierda fue ese sueño?
Me acosté de nuevo, abrazando la espalda descubierta de Jughead mientras él respiraba con tranquilidad en mi cuello, abrazandome a mi.
Si Dios realmente existe, le pido que los sueños no se hagan realidad.
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Little Betts
RomanceBetty se escapó de su casa a los doce años debido a su padre abusivo, y desde entonces, vive en una habitación de hotel con el dinero de su tía y su madre, quienes viven al otro lado del país. En ningun momento pensó que todo eso estaba a punto de c...