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Saliendo Maia de las primeras clases fue al Lago Negro a leer un rato. Después de un par de horas escucho un ruido levanto la vista y se encontró con Potter.
- Pero si aquí esta la preciosa Black.- dijo James riendo
- Eres un idiota Potter.- le respondió Maia soltando una risita.
-Un idiota seria cualquiera que no se detuviera a admirar tu belleza.- dijo acercándose.
- ¿No se supone que tu sales con Lily o sigue rechazándote?- le pregunto en burla.
- ¿Porque? ¿Acaso estas celosa? Hay suficiente James para las dos.
-Ya quisieras Potter.- dijo mientras se levantaba.
-Se nota que estas loca por mi.- dijo caminando del lado contrario que Maia.
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Maia iba rumbo hacia la sala común.- Salazar.- la puerta se abrió dándole paso hacia la sala común. Estaba por subir las escaleras cuando la voz de Tom hablo.
- No sabia que ahora te follabas con los idiotas de Gryffindor.- sonrió cínicamente.
-¿Disculpa?- lo miro- ¿Qué estas insinuando?
-Lo que escuchaste.- comenzó acercarse.- Primero yo y ahora Potter ¿Quién sigue después? ¿Snape? ¿Malfoy?
Antes de que volviera hablar la mano izquierda de Maia se estampo contra la mejilla de Tom.
- Escúchame bien Riddle, no tienes un puto derecho a hablarme así, estas sacando todo fuera de contexto.- lo tomo de la barbilla.- Vuelve a dirigirte de esa manera y juro que no volverás a ver la luz del día.- lo soltó y se dirigió a su habitación.
Le dolía que Tom haya hablado mas que desconfiara de ella, a Potter no lo miraba mas que una simple amistad y el también la miraba de ese modo.
Llego la hora de la cena salió y se dirigió al Gran Comedor rápidamente se sentó en la mesa y comenzó a comer.
- Parece que alguien esta de mal humor.- hablo Regulus
-Solo cállate Regulus.- lo fulmino con la mirada.
- Lo lamento hermanita.- se disculpo.
Al finalizar la cena se dirigió a su habitación nuevamente fue a tomarse un baño después de cambiarse, fue a la sala común a leer sobre maleficios imperdonables.
-¿Que haces aquí a estas horas?- la voz de Malfoy la saco de su lectura.
-Solo quería un poco de paz.- se encogió de hombros.
-¿Puedo acompañarte?- sonrió.
-Claro Lu.- se hizo a un lado para que pudiera sentarse
Estuvieron un momento en silencio hasta que la pelinegra decidió hablar.
- Riddle me dijo que soy una cualquiera, en pocas palabras puta.- miro al suelo.
-¿Que hizo que?- la voz de Malfoy cambio a una de sorpresa.
-Dijo que primero folle con el y ahora con Potter, solo porque estuve hablando con el.-se encogió de hombros.
- A ver espera ¿tu y Riddle follaron?- pregunto
- No, solo nos besamos.
-¿Ustedes son novios?
-No lo creo, y aunque fuera así no tendría porque llamarme así.- respondió la pelinegra.
-Y tienes razón.
-Lo abofeteé.- le comento y comenzó a reírse.
- ¿Abofeteaste al mismísimo Tom Riddle?- la chica asintió.- Si que tienes valor para hacerlo, el no es lo que tu crees Maia.
- Me hago una idea, no le tengo miedo Lu.- se recostó en el hombre del rubio.
Lo que ambos jóvenes no sabían era que alguien se encontraba observándolos a ambos desde la oscuridad, aquel chico pelinegro se encontraba lamentándose haber llamado aquella chica puta, y a su vez con ganas de asesinar a su seguidor pero no podía dañarlo, era uno de sus mas importantes seguidores de su plan. Se retiro con la sangre hirviendo dejándolos solos.
- Me entere del juramento que hicieron con Cissy.- hablo la pelinegra.- Que valor el tuyo de querer pasar el resto de tu vida con ella.- se rio.
- Que te puedo decir.- contesto el rubio.
-¿La amas?
-Claro que la amo Maia si no, no me casaría con ella.
-Mas te vale Lucius Malfoy que la cuides.- lo amenazo.- Bueno yo paso a retirarme, buenas noches.
- Buenas noches Maia.- se despidió.
- Ah rubio pido ser la madrina del bebe.- los dos rieron ante las palabras de la pelinegra.
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LIMERENCIA [1]
Fanfiction"Estado mental obsesivo propio de la atracción romántica por parte de una persona hacia otra." Eran tan diferentes y similares a la vez... Tom Riddle sabe que no puede sentir cariño ni menos sabía lo que era el amor. Pero inesperadamente, a su vida...