💍🕋-Regalo de las estrellas

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"Porque algo tan bonito sólo podía provenir del cielo. Y cada quien recibe las cosas de forma diferente"




Era normal ver a las parejas pasear tomadas de las manos compartiendo anillos con un mismo diseño en común, un diseño que fue hecho exclusivamente para ellos y reflejaba el enlace y conexión de sus almas.

Al cumplir 16, todos, sin excepción, recibían una pequeña caja que debía contener un pequeño anillo especial a medida. Una cajita que aparecía como acto de magia bajo las almohadas de sus dueños en la primera hora de su día de cumpleaños.

Y por más normal que esto fuera, la gente siempre sacaba diferentes teorías de estos sucesos que eran parte de su humanidad. Eran conocedores de la finalidad de estas sortijas, pues en cada cajita venía una nota de color dorado con letras plateadas y un mismo mensaje: "El futuro suele ser un misterio, pero hay cosas que deberían saberse.
La persona con la que estás destinado a estar, un anillo igual a este ha de portar."
Y a raíz de esto, las personas han ido dejando historias para sus menores que explicaban esto de una manera sencilla.

Algunas de ellas decían que las estrellas eran apasionadas amantes del romance y por eso les mandaban un anillo de conexión con sus almas gemelas, haciendo que apareciera en las noches tal y como ellas hacían en el cielo. Otras afirmaban que existía un ser místico que era tan generoso y amable que les dejaba esas cajitas en las noches para que pudieran encontrar a su alguien que les haría felices.

Y eran historias que nadie cuestionaba, pues, ¿Qué sentido tenía intentar buscarle sentido a algo que la ciencia no podía explicar? Ninguno, lo mejor era simplemente disfrutar de eso que les era entregado, o al menos eso era lo que Viktor y Horacio pensaban.

Aunque no todo es color de rosa. Pues aunque las estrellas fueran tan apasionadas y aquel ser místico tan amable, al fin y al cabo eligieron a los humanos como los recibidores de sus atenciones. Y los humanos no son seres perfectos y mucho menos iguales.

Así como habían personas que simplemente querían disfrutar de lo que les deparara la vida, había otras que tenían tal maldad en su interior que solo buscaban hacer daño a los demás para su diversión o para aliviar sus propios daños vividos, y también quienes causaban daño sin realmente ser conscientes de ello.

Y los humanos le temen a lo desconocido y les disgusta lo que es diferente. Por más pequeño que parezca.

Y a veces no miden el daño que pueden provocar en los demás. No se dan cuenta que con un par de comentarios pueden provocar que la felicidad de alguien se transforme en inseguridad. Así como a Viktor le pasó.

Esa noche de cumpleaños había recibido su tan esperada cajita.

Al despertar no esperó si quiera a desperezarse pues su emoción fue mayor a su adormilado cuerpo. Tan rápido como su mente fue consciente de en dónde estaba, se levantó de sus sábanas para buscar su pequeño regalo de las estrellas entre las almohadas.

Y su ilusión creció aún más cuando encontró esa elegante caja negra envuelta delicadamente en un listoncito dorado. La tomó entre sus manos con cuidado y la elevó a la altura de sus ojos dándole un par de vueltas hasta encontrar su nombre grabado en cursiva en una esquina.

Sin soltarla en ningún momento se sentó sobre las desparramadas sábanas de su cama y se dispuso a jalar uno de los extremos del listón hasta deshacer el pequeño nudo en forma de moño.

Cerró los ojos conteniendo una ilusionada sonrisa mientras tomaba algunas respiraciones para tranquilizarse.

Aún con los ojos cerrados abrió la pequeña cajita de un material parecido al cuero, rozando ligeramente con el pulgar el anillo que había dentro, sintiendo un escalofrío recorrerle entero ante ese diminuto contacto.

"Volkacio AUs - One shots"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora