🌑☀️-Eclipse solar

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"Y así es como se conocieron el sol y la luna..."

Existe una leyenda antigua de dos enamorados que vivieron en un pequeño pueblo a las afueras de la ciudad de Los Santos, según lo que se dice estos hombres eran bastante peculiares.

¿Alguna vez han escuchado ese dicho de "los polos opuestos se atraen"? Pues nació a partir de ellos. Uno de los dos el conocido "Horacio Pérez" era bastante animado, extravagante y sentimental, mientras que el otro "Viktor Volkov" era tranquilo, serio y muchos lo describían como alguien frío, pero eso no termina en sus personalidades, si no también en sus apariencias, el chico extravagante era moreno, sus ojos eran de dos colores distintos, uno de ellos color avellana y el otro un fuerte verde, tenía una cresta que siempre pintaba de colores diferentes y que combinaba con ropa llamativa, el otro muchacho era todo lo contrario, era de tez blanca, tan pálida como la nieve, sus ojos eran de un azul grisáceo y su cabello era de un color platinado, su vestimenta casi nunca contenía colores además del negro, blanco y gris y si es que se daba la ocasión para un color distinto este era muy oscuro.

La gente decía que no durarían mucho por sus tan notables diferencias, pero al contrario de eso ellos eran la pareja más bonita que alguna vez podrías ver.

Se apoyaban mutuamente, tenían detalles lindos con el otro y ¿recuerdan que Volkov era conocido por ser muy frío? con Horacio no era así, era atento y le demostraba su amor de cualquier forma que encontrara.

Tenían una panadería y cualquiera que entrara ahí podría ser testigo de las miradas de enamorados que se daban. Muchos aseguran que todo lo que cocinaban era absolutamente delicioso, quizá era porqué lo que hacían lo hacían con cariño.

Pero no todo fue color de rosas, en aquella época una relación entre dos personas de un mismo género era considerado una falta a la naturaleza, en contra de Dios, una aberración, algo que simplemente no podía ser, casi todos les miraban mal como si estuvieran cometiendo un delito, había pocas almas que entendían que el amor es amor y debe ser respetado. Aunque nunca les tomaron importancia, no se dejarían de amar solo por la ignorancia de otros.

Claro, podían ignorar todo el tiempo que quisieran pero siempre va a haber alguien con demasiada maldad que intentaría quitarle la felicidad a aquellos que la tuvieran.

Y ellos fueron víctimas de uno de ellos.

Una noche mientras se encargaban de cocinar lo necesario para mantener la panadería un cliente entró por la puerta a su tienda.

"—Yo atiendo Vik, tú estate pendiente del pan, no queremos que se queme—Le sonrío dándole un delicado beso en la mejilla para luego dirigirse a atender a quien acababa de entrar.

—Buenas tardes señor, ¿que se le ofrece?—Preguntó animado con su bella sonrisa característica.

—Bonita tienda—Dijo el misterioso hombre observando cada detalle del lugar y terminando en el chico de cresta.

—Muchas gracias ¿Que va a pedir?—Volvió a preguntar amablemente.

—Nada, jamás le compraría nada a alguien como usted—Contestó viéndole con asco mientras sacaba algo de su pantalón.

—A que se refie-—No pudo terminar su frase al sentir un cuchillo pasar por su garganta, el impacto lo hizo caer al instante tirando algunas cosas a su paso.

El sonido alertó a su pareja que corrió a ver qué sucedía. Cuando llego ya no había nadie más que su amado tirado en el piso con un charco de sangre rodeando su cuerpo.

—¡Horacio!—Se agachó a su lado pero ya no podía hacer nada, su cuerpo ya no tenía vida. Gritos desgarradores que harían temblar a cualquiera fue lo único que se escuchó salir de ese lugar"

Luego de haber perdido a Horacio la vida de Volkov se volvió monótona, su única razón de vivir se había ido, estaba como muerto en vida, no salía de su casa para nada, no se alimentaba o se paraba de la cama, ya no quería estar vivo, le habían arrebatado cruelmente a su compañero.

Después de semanas, una tarde los vecinos que quedaban cerca solo pudieron escuchar el sonido de un arma ser disparada proveniente de esa casa que antes podía llamarse hogar, ya no quedaba nada de esos dos enamorados.

Esa misma noche todos fueron testigos de un fenómeno extraño. El sol y la luna se habían encontrado y mientras la luna cubría al sol de la vista de los habitantes de ese planeta, todo ser viviente observó la luna cambiar su color a un rojo intenso, un fenómeno al que ahora llamamos "Eclipse solar".

Ese 14 de mayo la luna y el sol se habían conocido y a Volkov y Horacio se les había otorgado una segunda oportunidad para amarse, una oportunidad que duraría toda la eternidad. Aunque no podían verse siempre, ellos esperaban pacientemente para volver a encontrarse y poder dejar fluir su amor durante unos momentos.

Sin duda la historia del amor más sincero que pudo existir.







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Es la primera historia triste que escribo, igual tampoco tanto😔💖

"Volkacio AUs - One shots"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora