The Boyz One Shots

Changmin 💋

—Desde el instituto estás más guapa —Te dice Juyeon, y su mano sube por tu brazo hasta el hombro, dándote un ligero apretón. Te alegras por el cumplido y tu cara se calienta un poco. Juyeon y tú salieron durante la mayor parte del instituto y decidieron amistosamente separarse para "Explorar sus opciones" para la universidad. Este reencuentro es la primera vez que lo ves en años y tienes que admitir que es agradable ponerse al día. Estás a punto de responder cuando sientes que alguien te sujeta el codo y casi te tira un poco hacia atrás.

—Oye ¿Qué pasa aquí? —Pregunta Changmin, sonriendo a los dos.

—Oh, cariño, esta es Juyeon. Juyeon, este es Changmin, mi novio —Presentas, pasando tu mano por el gancho del brazo de Changmin. Se saludan y se dan la mano cortésmente.

—Vaya, se me hace raro oírte llamar a otra persona de esa manera —Se ríe Juyeon, golpeándote juguetonamente en el hombro. Te ríes y no te das cuenta de cómo la sonrisa de Changmin se tambalea y su cuerpo se tensa. A medida que avanza la noche, Juyeon acaba estando todo el tiempo junto a ti y a Changmin. Fue un poco extraño, para ser honesto, pero trataste de convencerte de que era sólo él siendo amigable.

Cuando el evento terminó y todo el mundo se despidió, tú y Changmin estaban de camino a su auto cuando Juyeon se acercó corriendo a ustedes y te entregó un papel.

—Hola, lo siento, me he dado cuenta de que no hemos intercambiado los números de teléfono, así que aquí está el mío. Ya sabes, por si acaso, nunca se sabe lo que puede pasar —Dice, asintiendo en dirección a Changmin. Tú estás demasiado aturdida para decir algo, así que él te pone el papel en la mano, te da un fuerte abrazo y te besa en la mejilla antes de despedirse con la mano y volver a su coche. Sin saber cómo reaccionar, Changmin y tú se quedan parados durante unos instantes antes de que él se aclare la garganta y diga: "Vamos".

El camino a casa es dolorosamente silencioso, por decir lo menos, sabes que Changmin no está nada contento pero no estás segura de cómo enfocar esto. Le sigues a tu casa y cierras la puerta tras de ti, perdida en tus pensamientos, cuando te chocas con su espalda.

—¡Ay, Changmin! —Estás a punto de quejarte, pero te interrumpe Changmin, que se da la vuelta de repente y te besa por completo en los labios, empujando tu espalda contra la puerta. Tu sorpresa inicial se desvanece rápidamente, atraída por el firme agarre de tu novio a tu mandíbula y sus labios moviéndose acaloradamente contra los tuyos. Mientras se siguen besando, las manos de Changmin se deslizan por tu cuello, sobre tus hombros, a lo largo de los lados de tu cuerpo antes de aterrizar en tus muslos.

Colocando sus brazos bajo tus muslos, te levanta para que tus piernas rodeen su cintura y, sin romper el beso, te lleva hasta el dormitorio. No te habías dado cuenta de que era tan fuerte, nunca te había cargado así; no pudiste evitar excitarte aún más con esto, deseando de repente poder juntar los muslos. Abre de una patada la puerta de tu habitación y se aleja antes de dejarte caer sobre la cama. Le miras fijamente, ambos respirando con dificultad.

—Desnúdate —Te ordena Changmin con una mirada seria. Te pilla desprevenida y separas los labios en señal de sorpresa, pero algo en su tono te hace obedecer, quitándote el vestido, el sujetador y las bragas.

Mientras te sientas desnuda y le miras de nuevo, te muerdes el labio inferior cuando se baja la cremallera de los pantalones de vestir y se saca la polla, ya medio dura. La bombea en su puño hasta que está completamente dura mientras te empuja para que te recuestes con su mano libre en tu hombro. Subiendo juntos a la cama, se coloca entre tus piernas. Con su erección aún en la mano, la desliza por tu raja, recogiendo tu humedad en la punta antes de introducirse en ti. Llega al fondo inmediatamente, sin darte tiempo a adaptarte, provocando un fuerte grito tuyo, mitad dolor y mitad placer. Se retira por completo antes de penetrarte de golpe, repitiendo la operación varias veces mientras te agarras a las sábanas con fuerza, gimiendo al ritmo de los empujones.