➠❲💐❳❝ Después del desastre de la boda de Juan y Karchez, hay tensión entre ambos pueblos. La única solución que se les ocurre para acabar con eso, es comprometer a dos habitantes importantes de cada pueblo❞
[💐Empezada: 18 de febrero 2022]
[💐Term...
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Contuvo un jadeo con su mano, bajo la mirada estático sintiendo como de su entrada empezaba a salir lubricante natural y se deslizaba por sus piernas. Entrecerro los ojos avergonzado de estar en ese momento tan vergonzoso estando frente a alguien como Génesis.
Inhalaba y exhalaba aire, tratando de calmarse o recomponerse para poder salir de ahí. Miro de reojo como Génesis estaba en un debate mental, notando como sus manos picaban por querer tomarlo.
Paso saliva, sus labios se empezaban a sentir resecos, intento moverse, pero solo provocó que más líquido salida de su entrada. Se quedó estático, era demasiado incómodo esa sensación.
Sus ojos miraron alrededor de su hogar, buscando algo que le pudiera servir. No podía irse a encerrarse a su habitación por más que quisiera. Tendría que subir las escaleras y en su condición solo sería inútil.
- ¡Ah! -. Jadeo del dolor al sentir como era tomado del antebrazo.
Sin poder recomponerse, su espalda choco contra la pared bruscamente, provocando un impacto en su nuca que lo desoriento.
- ¿A dónde ibas? - soltó con voz grave.
Auron cerro los ojos del dolor, los abrió un poco mirando al alfa frente a él. Sus ojos oscuros mirándolo fijamente y con deseo, la respiración del más alto era agitada, sudaba demasiado. Al parecer estaba en una batalla interna.
- No me toques -. Murmuró teniéndolo cerca, Génesis se acercaba a él rozando sus narices -. Alfa de mierda.
- ¿No puedo tocarte yo, que soy tu prometido? - soltó una risa nasal sin gracia -. Mientras sea otro alfa está bien, ¿Verdad? Disfrutad de tu posición como Omega líder para revolcarte con...
Mientras decía eso, sus manos se dirigían a los brazos de Auron tratando de apresarlo, colocando una de sus rodillas en medio de las piernas del Omega. Enterrando su nariz en la glándula de olor del castaño, intentando inhalar ese aroma a vainilla pero lo único que percibía era aquel olor a café amargó.
Esto lo hizo gruñir.
- ¡Dije que me sueltes! - lo interrumpió safandose de su agarre, siendo esta vez él el que lo apresar por los brazos. Sus uñas crecieron, enterrandose sin quererlo en la piel del de cabellos azabache.
Escucho como Génesis se quejaba, ambos se miraron a los ojos. El alfa se quedó completamente mudo al ver cómo los ojos avellanas del más bajo se tornaba de un color dorado.
Duraron así pocos segundos, hasta que algo dentro de la mente del alfa estalló. ¿Por qué cojones estaba siendo apresado por un Omega? Ésto lo hizo sentir una furia inexplicable creciendo desde su pecho.
