Lyssa tenía una cosa clara, odiaba a la propietaria del edifico en el que vivía. ¿Tanto le costaba darle un apartamento en el que poder vivir durante los próximos dos meses? A Lyssa le había quedado claro que la dueña era una urraca, así que para no...
Le dejé el pijama más largo que tenía a Arashi, y aun así le iba un poco corto de los pantalones. Una vez las dos vestidas, salimos al salón, donde Luc y Viktor se encontraban sentados en el sofá.
—Ahora os toca a vosotras sentaros en el suelo —dijo Luc señalando los cojines que había en el suelo—. Hasta os he preparado cojines para que no os duela el culo y no se os quede como una carpeta.
—Que considerado —Arashi viró los ojos, pero se sentó delante de Luc—. Si me das una patada, eres hombre muerto, y no te gustará averiguar cómo te mataré.
—¿Por quién me tomas?
—Por un incordio.
Me senté a un lado de Arashi, es decir, delante de Viktor y giré mi cuello.
—¿Qué vamos a hacer?
—Que no sea ver series coreanas —mustió Viktor.
—Como soy una buena persona, no como otros —comenzó diciendo Luc mirando a Arashi—. No veremos kdramas. Haremos maratón de Marvel, que a todos nos gusta.
—¿Acaso alguien de aquí tiene Disney plus? —preguntó Arashi.
—Yo no tengo —dije mirando a Luc.
—Yo tampoco —contestó Viktor—. Y vosotros dos tampoco tenéis.
—Para eso existen las páginas piratas —respondió Luc cogiendo el mando de la televisión para buscar alguna página—. Para esas personas pobres como yo. ¿Qué vemos?
—WandaVision —dije rápidamente. Adoraba esa serie y amaba el personaje de Wanda. Tenía un flechazo con ella.
—¿Alguien tiene algo en contra con ver WandaVision? —preguntó Luc hacía el resto. Ellos negaron—. Perfecto, pues esa veremos.
★★★
Cuando llevábamos gran parte de la serie vista, yo empecé a dormitar. Era bastante tarde y yo ya tenía sueño.
Apoyé mi cabeza en el sofá y cerré los ojos, pero los abrí cuando sentí unas caricias en mi pelo. Abrí los ojos y observé a Viktor que me estaba acariciando mientras veía la serie. El sentimiento de calidez junto al de paz inundó mi pecho con esos simples gestos que me estaban relajando hasta el punto de hacerme dormir ahí mismo.
Miré por última vez el atractivo rostro de Viktor y cerré los ojos.
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este es el cap más cortito de todos. lo siento por eso, hehe.
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