Decisiones repentinas

8 -Situaciones imprevistas

Can

Veo que Sanem se acerca a mi despacho con paso firme y una expresión seria que no presagia nada bueno. Entra por la puerta sin llamar mientras me mira casi con hostilidad y en ese momento, antes de que Fabri y Deren puedan percatarse de ella y de sus andares beligerantes, me levanto y voy hacia ella, interponiéndome entre ella y los demás.
Pongo mis manos en sus brazos y finjo besarla en la mejilla mientras en realidad le estoy susurrando al oído "Juega a nuestro juego o nos arriesgamos a perder la campaña del señor Fabri, luego te lo explicamos".
No le doy tiempo a reaccionar, sino que le cojo la mano con ternura para volver juntos a Deren y Fabri.
"Ashkım, amor ven, sólo estaba tranquilizando al señor Fabri que ayer tuvimos una pequeña pelea de enamorados, por eso nos fuimos de la fiesta, pero ahora todo está aclarado ¿verdad querida?".Aprieto su mano un poco más fuerte en la mía para hacerla ca
Aprieto su mano un poco más fuerte entre las mías para que entienda que tiene que acompañarme, ella se vuelve hacia mí con los ojos muy abiertos, claramente confundida. Afortunadamente Deren me ayuda a hacerle entender la situación, riendo dice.
"Por supuesto, el Sr. Fabri entendió perfectamente por qué abandonó la fiesta de esa manera. Le explicamos que estáis comprometidos y que habéis tenido un pequeño desacuerdo que debéis aclarar".
Mientras dice esto, camina alrededor del escritorio colocándose a espaldas de Fabri para empezar a hacer de nuevo extrañas muecas y gestos, a la dirección de Sanem esta vez, para hacerle entender que tiene que llamar a nuestro farol.
El Sr. Fabri interviene, sonriendo.
"Pero, por supuesto, entiendo muy bien la situación. Ah l'aumour l'aumour qu'est-ce que l'amour".
Sanem parece realmente interdicta, desplaza su mirada de Deren a mí y luego a Fabri aún sin entender lo que está pasando. Le paso el brazo por los hombros y sonriendo la estrecho susurrando suavemente "Ya te lo explicaremos luego".
En ese momento mi hermano entra en mi despacho y parece entender la situación de inmediato. "Sr. Fabri, buenos días, es bueno que haya venido. ¿Podría seguirme a mi oficina un momento? Me gustaría mostrarle algunos documentos de financiación de la campaña que necesitarían su aprobación".
Fabri asiente y se levanta para seguirle, y en cuanto atraviesan la puerta de conexión entre mi despacho y el de Emre, Deren se apresura hacia Sanem con demasiada agresividad para mi gusto.
"Sanem, ten mucho cuidado de no estropearlo todo, por favor. Cállate, sonríe y trata de parecer la mujer más cariñosa de la tierra. Ayer, después de que te fueras repentinamente, para salvar la situación tuvimos que decirle al Sr. Fabri que tú y Can sois novios y que tuvieron una discusión".
De repente, Sanem vuelve su mirada hacia mí con tanta incredulidad como yo, que me doy cuenta de que hoy es la segunda vez que me encuentro comprometido con ella por mi descuidada decisión de arrastrarla fuera de esa maldita fiesta. Decisiones repentinas que pueden tener consecuencias totalmente inesperadas, al parecer.
Pero poco a poco veo que su mirada asombrada se transforma en una expresión tensa, casi furiosa, mientras la oigo preguntar en tono cortante.
"¿Puede la bahía, podría tener una palabra con usted por favor?"
Es Deren quien responde bruscamente "No hay nada que hablar Sanem, simplemente no te hagas más problemas.... "Me molesta su forma abrupta de dirigirse a mi... quiero decir de dirigirse a Sanem, realmente necesito tener una charla con Deren sobre esto. Estoy a punto de responder a su petición para decirle que no hay ningún problema cuando Fabri entra en mi despacho escoltado por Emre.
"Así que Sr. Divit, ya que no tuvimos oportunidad de hablar mucho ayer, me gustaría que fueran mis invitados esta noche para cenar en Rakofoli".
Eso es todo lo que necesitábamos, pienso mientras me veo obligado a rechazar la invitación.
"Lo siento Sr. Fabri, lamentablemente esta noche no es posible".
Oigo a Sanem, que apenas ha abierto la boca desde que llegó, replicar en tono sarcástico.
"Por supuesto, esta noche no es posible, ¡Can está ocupado!"
Me vuelvo para mirarla sorprendido e intrigado por el extraño tono de su respuesta, pero es Fabri quien vuelve a hablar.
Entonces, ¿el jueves por la noche?"
¡Maldita sea! Me veo obligado a rechazar su invitación de nuevo.
"El jueves por la noche lamentablemente Sanem y yo tenemos un compromiso previo, lo siento. ¿Qué tal si lo cambiamos al sábado? ¿Te parece bien?"
Una vez más oigo a Sanem murmurar casi para sí mismo.
"Sí, un compromiso... correcto".
Me vuelvo para mirarla intrigado por su expresión de enfado y todo ese murmullo entre dientes, pero Fabri vuelve a reclamar mi atención.
"Tamam, no hay ningún problema".
Se acerca a mí y me ofrece su mano.
"Nos vemos el sábado entonces, te estaré esperando, cuídate".
Me da la mano y tras un rápido saludo a Sanem sale de mi despacho escoltado por Deren y Emre.

Sanem está de pie, con los brazos cruzados, casi como si estuviera a punto de explotar. Inclino la cabeza y la miro, no me explico muy bien por qué se enfadaría conmigo.

"¿Sanem? ¿Qué está pasando?"

Me lanza una mirada que yo llamaría furiosa en este momento.

"¿Me preguntas qué pasa en la bahía de Can? Te diré lo que pasa..."

Una voz estridente procedente del pasillo interrumpe lo que estaba a punto de decirme.

"¿Caaaan?"

Me vuelvo incrédula hacia la puerta.

¿Qué diablos hace ella aquí?

"¿Huma?"