16: Carambuco

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Capitulo:16
Carambuco

Después de vestirme y pasarme toda la mañana estudiando, Chantel sube acompañada de Zippy.

-¿Alessia, te vienes? -pregunta Chantel.

-¿Vais a salir?

-Si, vamos a dar una vuelta antes de comer.

Una parte de mi no quiere ir pero la otra parte piensa que debo tener un descanso y despejarme un poco, asi que asiento y bajamos las escaleras.
Hago intentos de voluntad para no mirar a Zippy a la cara, después del incómodo momento en el pasillo me muero de vergüenza.

Al bajar me despido de mi padre, él cuál se alegra de que por fin salga con... gente de mi edad.
Me da un beso deseandome que lo pase genial.

Al salir por la puerta me encuentro a la persona que menos quería ver; Olivia.

-Ni de coña -dice cuando me ve.

Hace voluntad para irse pero Robert la agarra de inmediato y la vuelve a situar donde estaba.

-Vaya, veo que te has animado a venirte, Alessia -dice Robert con un tono de voz cálido.

Vuelvo a asentir pero sin dejar de mirar a Olivia, ya que me esta incomodando muchísimo.

-Si viene ella, paso de ir -dice mientras me mira con una mirada penetrante.

Zippy pasa por su lado junto a Chantel sin hacer caso de lo que acaba de decir.

-Vamos Alessia -dice Zippy.

Es cuando Olivia camina hacia él y lo frena con un agarrón en el brazo.

-¿En serio, Zippy? ¿Prefieres que vaya ella antes que tu hermana?

Zippy se queda mirándola fijamente, siendo un duelo de miradas amenazantes.

Él sigue sin contestar, es más agarra una caja de cigarrillos, saca uno, lo enciende y comienza a fumar.

Chantel y Robert se miran entre sí pudiendo palpitar la incomodidad que hay en el ambiente.

De repente Olivia comienza a elevar más de la cuenta la voz.

-¿PODRIAS DEJAR DE PENSAR CON LA POLLA POR UNA VEZ EN TU VIDA? -grita mientras le golpea la mano cayéndose el cigarro al suelo.

Y aquí es cuando no tengo ni idea de lo que puede ocurrir.
Zippy es tan... raro y tan espontáneo que nunca sabes por dónde te puede salir.

Pasan pocos segundos cuando salgo de dudas.

Zippy agarra del cuello de la sudadera a su hermana y la levanta acercandola a su cara.

-Deja de ser tan infantil. Ella tampoco te aguanta y sin embargo no dice nada.

La suelta y Olivia se acomoda la sudadera. Veo como se toca el cuello, intentando que se alivien las molestias que le ha hecho su hermano en el agarre. Pero es tan orgullosa que sigue mirando desafiante sin mostrar síntomas de dolor o debilidad.

-Y para sacarte de dudas, Alessia no me pone nada. Es más dice mi polla que te diga que ella es todo lo contrario a lo que le gusta. Nunca estaría con una niña así.

Y sin más comienza a caminar. Chantel y Robert lo siguen mientras que Olivia también sólo que un poco más atras, enfufruñada con expresión amargada, se gira y me mira como si estuviera deseando simplemenre que desapareciera.
Yo la sigo a ella pero con algo de distancia... conociéndola seguro que me morderia solo por invadir su perímetro.

Mientras que camino me paro a pensar a lo que Zippy se referiria... ¿Por qué no puedo gustarle? ¿ que tengo de raro? Me debería de dar igual pero necesito saber la razón de el porqué se niega tan rotundamente, ni si quiera me conoce...

Aunque también está en todo su derecho de opinar. A lo mejor es por mi físico, simplemente no soy su tipo y es comprensible. No se le puede obligar a las personas a cambiar de opinión solo para satisfacerte a ti... Supongo.

Nos pasamos todo el camino sin decir ni una palabra. Yo me distraigo observando los sitios, ya que hemos tirado calle abajo. Esta vez un camino diferente.

Comienzo a acostumbrarme a este olor a jazmín y al aire tan peculiar que hay por aquí. Los pinos le dan la bienvenida a mis ojos todos los los fines de semanas mientras que las golondrinas cantan todas las mañanas... Estoy empezando a pensar que este lugar no está tan mal.

Me vuelvo a concentrar y me fijo en los chicos, Robert frena el ritmo hasta llegar a mi.

-Me alegro mucho de que hayas venido - dice con una sonrisa dulce.

-Gracias, Robert.

Robert es con la única persona que me siento cómoda, por lo menos de los que he conocido en este pueblo.
Desde el primer momento supo escucharme y siento que es la única persona que se ha molestado en conocerme de verdad.

-¿Estás bien? Te noto seria.

Lleva razón. Desde que los hermanos se pelearon no he podido dejar de pensar en lo mismo. Siento que soy la fuente de la pelea.
Robert parece leerme la mente porque si antes lo pienso más pronto saca el tema.

-Si es por Olivia y Zippy... no te preocupes, siempre están igual. Pero luego, ahí donde los ves, se quieren muchísimo. Están muy unidos.

Yo le sonrio un poco más aliviada.

-¿A dónde vamos? -le desvío el tema.

-A la finca de Carambuco.

Frunzo el ceño algo sorprendida, no sabía que alguno de ellos tenia una finca.

-¿De quién es?

Robert me mira confundido

-¿El qué?

-La finca.

Deja caer una risa burlona

-No se de quién es esa finca, nosotros siempre nos colamos.

Tras escuchar esto, doy media vuelta y camino de vuelta a casa pero lamentablemente Robert me agarra del hombro y me hace volver.

-Tranquila, está todo controlado.

Asiento con cara de asustada y sigo andando.

Todos llegamos hasta un gran muro gris bastante alto. A unos pocos metros se ve una gran puerta con vallas negras, pero por las caras que ponen esta gente me da a pensar que no vamos a entrar por ahí.

Zippy se pone de rodillas y prepara sus manos para que las chicas se apoyen y subir al muro.

Primero Chantel

Luego Olivia

-Vamos -avisa Zippy con su tono cortante.

Yo niego con la cabeza con un gesto casi involuntario.

-Tranquila Alessia, yo me pongo al lado de Zippy para que asi estes más tranquila.

Me decido y apoyo el pie en la rodilla de Zippy y con mis manos agarro el bordillo de arriba. Zippy me impulsa y consigo subir.

Luego Robert me sigue y Zippy consigue subir detrás.

Todos estamos arriba del muro hasta que Olivia comienza a bajar unas escaleras de madera que hay en una de las esquinas.

Cuando todos bajamos me paro a observar lo gigantesco y precioso que es todo esto.

Me parece sorprendente que sea una finca ya que a lo que se parece es a un inmenso bosque. Apenas se aprecia el sol de los tantos árboles que hay haciéndonos sombra. Las flores y las plantas nos llegan a las rodillas y el aire puro que se respira es de lo más agrable.

Dejo mis pensamientos atrás cuando una mano toca mi hombro...

Wild Things [ Español ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora