Capitulo: 21
Suicidio¿Habéis pensado alguna vez en el suicidio?
Si es así, dejadme deciros que aunque sigáis vivos físicamente, ya os habéis muerto.Pensándolo estas cumpliendo una parte del hecho de matarte.
Estas matando a tu salud mental y te digo que eso es mucho peor que morirte.La muerte llega y ya está no hay nada más.
Pero si mueres mentalmente, tú cerebro, tus emociones, tus sentimientos, si todo eso muere, ya solo existe tú cuerpo, el que los demás quieren ver. Tu envoltorio.
Asi que nunca te lo plantees, porque no podrás salir ya de ello a no ser que algún salvavidas te ayude y vivimos rodeados de gente de mierda así que existe un uno por cierto de que eso te pase.
Yo es algo que pienso cada día, cada minuto, en cada momento. Y se que aumentará en cuanto le responda a mi padre.
-Papa, lo siento, pero quiero volver con mama -digo en un hilo de voz.
Su mirada se llena de tristeza y circunstancia, como si pensara en lo que hizo mal.
-No es por ti, es por este sitio. ¿Podemos buscar otra forma de vernos, no?
Él asiente y se levanta sin decir ni una palabra. Se monta en el coche y yo hago lo mismo.
Vamos camino a casa.
A mi casa, donde nací.Miro a través de la ventanilla, y veo todas las casas blancas, los jazmines invadiendome las fosas nasales, los pinos que te regalan sombra cuando paseas. Todas las cosas que sobrecargan este pueblo. Cosas que no volveré a ver más.
Después de quince minutos llegamos a casa de mi madre y bajo del coche. Agarro la mochila y ella me recibe sorprendida.
Paso por su lado y entro a la casa, no tengo ganas de hablar.
Supongo que luego me regañará por ello, como por todo.
Mi padre ni si quiera se baja del coche solo se asegura de que entro bien.
Y de repente quitándome los zapatos en la entrada escucho un grito proveniente de mi madre.
-Que poquito te ha durado el estar con tu hija. ¡NO vales para nada!
Yo me giro quedándome sorprendida. Lo ojos están que se me salen de la cara.
Mi padre se va sin decir nada, arranca y se marcha.
Tengo una mezcla de emociones ahora mismo que siento que voy a explotar.
Subo a mi habitacion y me tiro en la cama. Le he dejado claro a mi madre que voy a descansar para que así el interrogatorio me lo haga luego y me deje despejarme.
Me giro y me tumbo mirando hacia el techo, pensando en miles de cosas a la vez, mientras que una lagrima cae por mi rostro, otra vez.
Siempre me ha dado mucha vergüenza llorar delante de nadie. Y eso que soy muy sensible, me duele la mayoría de las cosas pero siempre intento ocultarlo o tragarmelo yo sola.
Pero a mi abuela nunca la logro engañar, a la mínima cosa que me pase, ella lo nota.Diría que es la única que sabe cuando algo me pasa.
Por eso cada vez que lloro me acuerdo de ella, porque siempre me dice que la lluvia cae porque la nube ya no puede soportar su peso y que las lágrimas caen porque el corazón ya no puede soportar el dolor.
Y ahí es cuando hace que me desahogue en sus brazos, haciéndome sentir acompañada.
Alguien que me escucha y me entiende.
A veces pienso que si no me suicido es por ella.
Porque es la única persona que depende de mí, al igual que yo de ella. Es muy bonito depender de las personas mayores y que te den estabilidad emocional. Tener una conexión con tus abuelos es genial pero... también malo, muy malo.Las reglas de la vida hacen que ellos tengan más años que nosotros por lo tanto, si no te pasa nada, por desgracia... ellos te faltarán antes que tú a ellos.
Y ahí es cuando te rompen la conexión y puedes caer.
Mejor dicho, puedo caer.
No quiero ser dramática ni mucho menos. Ni pensar en el suicidio como algo normal o algo poco importante.
Pero no quiero negar que no lo he pensado más de una vez.
Lo he hecho pues no, por eso sigo viva.
Pero lo he pensado.A pesar de tener un futuro brillante a la vuelta de la esquina, no me importa ni si quiera un poco.
No tengo amigos.
Mis padres se han separado.
A mi madre le importa solo obtener una buena imagen ante los demás, sin importar lo que yo pueda sentir.
Mi abuela tiene Alzheimer y cáncer de huesos insalvable, tiene los años contados, o quizás, meses.
Con mi padre acabo de romper una relación que muchas hijas querrían tener.
Las niñas de mi instituto, bueno... no es que me traten muy bien precisamente.
Y cuando por fin sentía que encajaba en un sitio me traicionan de esta manera.Pero luego pienso que las personas que piensan en el suicidio es porque quieren matar el dolor, no la vida.
Y siempre intento buscar otra manera... que no sea... morirme.
Pero lo de la pandilla ha sido la gota que colmaba el vaso, lo único que hacía falta como para volver a decidirme por ello.
Será culpa mía, como siempre. Por desilusionarme, por crear expectativas tan altas con personas tan básicas.
Suena duro y frío lo se.
Pero más fría fue Olivia cuando me dejó encerrada a propósito para eliminarme de su entorno.
Más duro fue cuando nadie volvió a por mi.
O bueno... Quizás ni se acordarian que iba con ellos.
Total soy un cero a la izquierda.
Siempre lo soy.Miro de nuevo mis manos, llena de cicatrices por clavarme las uñas en las palmas. Esta semana han aumentado y sobre todo cuando huía de la policía.
Ahora pienso que ojalá se hicieran más grandes.
Y acabara toda esta historia...
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Wild Things [ Español ]
Teen FictionAlessia Rodríguez es una chica ejemplar. Tiene su estabilidad emocional perfectamente pulida hasta que su vida da un giro inesperado y sus padres deciden divorciarse. Todo lo que era su vida perfecta se derrumba. Su padre se va de casa y a partir de...