Capitulo:35
La protegidaLas palmas de mi manos comienzan a sangrar, las heridas se acaban de abrir.
—Oh, dios —dice Luna llevándose la mano a la boca.
—Alessia... —dice Zippy con un tono dramático.
Él se acerca a mi para curarme las heridas, pero doy dos pasos atrás, no quiero su ayuda.
Me ha dado un deja vu, de cuando nos conocimos, cuando a los días me vio las palmas y quiso curármelas.
—Me voy —digo abriendo la puerta intentando no mancharla.
—No vas a ir sola, yo te acompaño, es de noche y Alex vive ahí al lado —insiste Zippy.
—Me habéis mandado a la mierda así que ahora lo asumís. No hace falta que nadie me acompañe.
Estoy apunto de salir cuando la madre de Robert aparece con Sol al lado.
Yo te llevaré en coche, cielo.
—No hace falta, de verdad. No quisiera molestar.
—Más me molestaría a mi si te pasara algo. Este sitio no es seguro, venga vamos -dice agarrando las llaves del coche.
Luna se comienza a poner los zapatos y Sol le sigue el paso.
Su madre no le ha hecho falta decirles nada, es como si ellas ya supieran que vienen con nosotras.—Primero ve al baño y ponte papel en las palmas. Perdóname pero es que no tenemos vendas.
Camino hacia ello y Luna me acompaña, la verdad es muy agradable su compañía después de todo lo que está pasando.
Entramos las dos y ella cierra la puerta.
—Nunca vayas a hacerte esto —digo limpiándome las heridas con el agua.
—No creo que te lo hayas hecho sólo porque has querido.
¿Cómo una niña tan pequeña puede entenderme mejor que la gente adulta?
—¿Cuántos años tienes? —le pregunto sin desviar mi vista del grifo.
—Nueve.
Me sorprendo y mi gesto parece llamarle la atención.
—¿Qué pasa? —pregunta con un tono fresco.
—Pensaba que tenías ocho —le digo burlona.
—No soy tan pequeñaaaaa —dice actuando como si estuviera molesta.
Aunque ambas sabemos que no lo está. Por su sonrisa tan dulce.
—Listo, ya podemos irnos —digo secándome.
Estoy justo por salir cuando se me viene a la cabeza una pregunta que debo de hacer o exploto.
—Oye... ¿Qué hay tras la puerta que hay al lado de la entrada?
Me he fijado al entrar, mientras que se ha liado todo esto. Es una puerta parecida a la que hay en casa de Zippy, en el mismo sitio y tiene un candado
—Esa puerta va hacia el sótano —contesta Luna.
Me lo suponía, la de Zippy también daba entrada al sótano, la misma puerta que no me dejó pasar.
—Mi hermano nunca nos deja entrar ni a mi, ni a mi hermana. A veces ni a mi madre... —dice sin darle importancia.
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Wild Things [ Español ]
Teen FictionAlessia Rodríguez es una chica ejemplar. Tiene su estabilidad emocional perfectamente pulida hasta que su vida da un giro inesperado y sus padres deciden divorciarse. Todo lo que era su vida perfecta se derrumba. Su padre se va de casa y a partir de...