45- Heaven's Night.

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La noche por fin llegó, y en las calles no quedaba ni un alma a la vista, todos estaban de vuelta en sus hogares listos para pasar la navidad junto a su familia y amigos.
Qué agradable ambiente se respiraba, aún más después de los recientes acontecimientos, con Wesker muerto las personas se sentían seguras otra vez, era un motivo más que válido para festejar.

Sherry conducía a toda prisa hacia su casa, la cabina de la camioneta se había impregnado con el aroma del pavo y los postres, tenia cuidado de no pasar por baches o reductores de velocidad para no dañar los regalos que había comprado para Jake.
Estaba muy emocionada, era la primera vez en mucho tiempo que pasaría navidad en compañía, casi nunca tenia la oportunidad de celebrar fecha alguna junto a sus amigos, su trabajo la había obligado a moverse constantemente, por ejemplo, la nochebuena del año pasado la pasó metida en un viejo bunker de la segunda guerra mundial que la DSO había acondicionado como base de operaciones, estaban persiguiendo al líder de una célula bioterrorista menor, y si ellos no podrían celebrar navidad, tampoco dejarían qué ese desgraciado lo hiciera.
Cuando dieron las doce de la noche se preparó un poco de café y se sentó a un lado de una ventana metálica, mirando a las estrellas, preguntándose si su mercenario favorito también estaría solo en ese día...

No se lo había preguntado, pero ya no importaba, esta navidad la celebrarian juntos.

Las llantas de la camioneta derraparon en su entrada debido a la nieve, tomó lo que pudo y salió al exterior, sus mejillas y su nariz se pusieron rojas al instante por el frío. Tomó sus llaves y entró en su hogar, donde todas las luces estaban encendidas, tal como las había dejado, eso era extraño, a Jake siempre le gustaba andar por la casa con las luces apagadas, ¿acaso no había llegado aún?

-¡Jake, ya llegué!

Anunció casi eufórica, escondiendo los regalos bajo las escaleras, los dejaría para después.
Volvió a salir, esta vez por la cena, y se apresuró a dejarla en la isla de la cocina, pero Jake aún no bajaba...

-¡Jake! ¿Hola? ¿Hay alguien en casa?

Se asomó nuevamente al segundo piso, pero ni siquiera escuchó la música que el mercenario ponía cuando estaba solo en casa, solo había silencio.
Se dispuso a subir a buscarlo cuando se percató de que había algo en la mesa de su comedor, un sobre blanco, y tenia escrito "Sherry" en el exterior.
Lo tomó, llena de curiosidad, esa era la letra de Jake, ¿por qué le había dejado una carta?

La abrió con cuidado, y al principio no vio nada, la hoja estaba en blanco, solo tenia una pequeña frase escrita en la esquina de esta, "mira detrás de ti".

-¡Sorpresa!

Sherry se sobresaltó, su corazón casi salió corriendo de su pecho, pero antes de que pudiera molestarse, se encontró con que Jake cargando un ramo de rosas gigante, adornado con globos en forma de Santa Claus y un par de regalos más envueltos.

-¡Jake, me asustaste!
-Jah debiste ver tu cara, lo lamento, en mi defensa diré que esa era mi intención.

A Sherry se le enterneció el corazón al ver los presentes del mercenario, ¿por eso se había negado a ir con ella a escoger la cena? ¿Ese era el asunto tan importante que debía atender?
Vaya, serio lo amaba...

Tomó el arreglo floral y los regalos con brillo en los ojos, se lo formó un nudo en la garganta, era un detalle hermoso que le había llegado al alma.

-¿En serio son para mi?
-No, son para Redfield... ¡Por supuesto que son para ti super chica! ¡Ven aquí, feliz navidad!

Jake la tomó de la cintura y la levantó, dando un par de vueltas.

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