Shi Qing Xuan se sentía un poco inútil, siempre había sido una persona quisquillosa y sensible a los olores, pero no esperaba que eso le trajera problemas para cumplir una misión.
—¿Cómo puede alguien tener un aliento tan asqueroso? — preguntó indignada.
—Es por lo que come, hay restos de huesos humanos por todas partes, este lugar es insalubre, es normal que apeste tanto— explicó He Xuan acariciando su espalda.
—Dicen que lo hace para imitarte— La voz de Hua Cheng se hizo escuchar saliendo de aquella cueva —Aunque ni con eso ha sido capaz de subir de nivel.
Xie Lian venía tras él con una expresión seria, pero al notar lo pálida que se veía su amiga se acercó rápidamente para revisarla de cerca.
La pareja explicó lo sucedido y se disculparon por no poder ayudar, pero Xie Lian les aseguró que era mejor de esa forma, ya que el famoso demonio Qi Rong resultó ser un familiar que creía había muerto hace muchos años, y aunque era un verdadero fastidio, no se sentía cómodo con la idea de verlo morir frente a sus ojos a manos de Lang Qian Qiu, quien ahora se había enterado que el verdadero responsable de la muerte de su familia era él, aunque el príncipe heredero se apresuró en admitir que sus manos no estaban limpias, ya que también había participado en aquella masacre... En fin, el asunto era demasiado complicado.
—Lian Lian no debes asumir toda la culpa por ti mismo, si hay algo que he aprendido en este tiempo es que la verdad siempre sale a flote y las personas tienen derecho a conocerla y tomar su propia postura al respecto— le aseguró su amiga.
—Yo... Tengo muchas cosas en qué pensar, en realidad ahora solo quiero estar solo— murmuró Xie Lian bajando la cabeza.
—Entiendo... Pero cuando necesites compañía por favor dímelo— Shi Qing Xuan se puso de pie para abrazarlo, pero algo inesperado ocurrió, sintió su cuerpo debilitado, su vista se puso borrosa y en lugar de abrazar a su amigo, se desplomó sobre él perdiendo el conocimiento.
Mientras aquellas tres personas hacían un alboroto a su alrededor, la mente de la dama del viento la había llevado a otro lugar, parecía que era un bosque, pero en realidad había tanta oscuridad que apenas podía distinguir lo que estaba a su alrededor. Comenzó a caminar a tientas, sujetando ramas y casi cayendo en más de una oportunidad, a lo lejos pareció distinguir una tenue luz, y se sintió tremendamente motivado a alcanzarla, apresuró su paso y cuando se encontraba cerca sus piernas ya estaban corriendo a toda velocidad.
Vio la espalda de un apuesto hombre de túnicas negras que conocía a la perfección, lo abrazó con fuerza, cuando él se giró se besaron tiernamente, entonces He Xuan lo tomó de la mano y lo llevó hasta donde se encontraba la luz, bajo un hermoso árbol de cerezos en flor había dos brillantes linternas, cada uno tomó una de ellas, maravillándose con su luz, sosteniéndolas con sumo cuidado como si se tratara de un par de tesoros.
Entonces ya no había más obscuridad, al sostener las linternas pudieron encontrar un camino que los llevaría a casa, Shi Qing Xuan sentía tanta felicidad que no podía contener su sonrisa, y con esa misma sonrisa despertó lentamente, abriendo sus ojos para distinguir unos hermosos ojos dorados cristalinos debido a unas cuantas lágrimas que querían brotar.
—¿Qué pasa cariño? — preguntó Shi Qing Xuan levantando su mano para acariciar su mejilla —Cariño tuve un sueño muy bonito, teníamos dos linternas en la oscuridad, eran tan bonitas...
—No pasa nada...— dijo secándose las lágrimas —Que bueno que soñaste algo bonito, ahora dime ¿Te duele algo?
—No me duele nada, solo tengo sueño y me siento un poco cansada... ¿Dónde estamos?
Cuando observó a su alrededor las paredes le parecían familiares, pero no fue hasta que vio a su médico de cabecera que entendió que había sido llevada de vuelta a la capital celestial. Ella se encontraba un poco desorientada, así que fue su esposo quien explicó la situación, posteriormente procedió a examinarla y explicó.
—El desmayo es debido al vómito, tu cuerpo necesita nutrientes para poder trabajar, pero si no los tienes es normal que te deshidrates y debilites, con un poco de descanso estarás bien, esta vez la única razón por la cual despertaste fue gracias a que te transmitieron energía espiritual pero necesita también energía física así que aliméntate bien— le explicó con una sonrisa.
—¿Entonces qué medicina puede tomar para evitar que esto vuelva a pasar? — preguntó He Xuan que había estado demasiado conmocionado al verla inconsciente por tanto tiempo.
—No puede tomar otras medicinas, verás, aunque la diferencia en el pulso es leve, ya puede notarse, y la sensibilidad a ciertos olores es algo que lo confirma, se trata de un embarazo, felicidades— el médico hizo una ligera reverencia.
He Xuan y Shi Qing Xuan se miraron con una expresión de sorpresa, los ojos de ambos se llenaron de lágrimas y se abrazaron con fuerza al mismo tiempo que sonreían inmensamente felices.
—Pero es tan pronto, no creí que lo lograríamos tan rápido— murmuraba la dama del viento con la voz quebrada de emoción.
—Eso es porque eres maravillosa— He Xuan besó su frente con dulzura.
—En efecto es una mujer muy sana y diligente, pero sigue siendo un ser humano, así que les recomiendo que guarden prudencia y eviten las misiones peligrosas por un tiempo, quédense unos días en la capital para hacer un control más regular, y no duden en consultarme ante cualquier duda.
—Lo haremos, de verdad muchas gracias— contestó He Xuan con una reverencia formal.
Cuando salieron de la consulta Xie Lian los estaba esperando afuera, su expresión parecía todavía más preocupada al ver que su amiga todavía estaba siendo cargada en los brazos de He Xuan, mostrando pocos signos de mejoría en comparación a cuando se desmayó ante sus ojos.
—¿Qué dijo el doctor? ¿Es muy grave? — preguntó inquieto.
—No es nada malo— explicó He Xuan con una sonrisa.
—Lian Lian vas a ser tío~
—¡EHHHH! — Xie Lian se llevó las manos a la boca para no gritar de la emoción —¡Eso es una noticia maravillosa! ¡Felicidades chicos estoy tan feliz por ustedes! — Aunque no podía abrazarlos, tomó las manos de su amiga y miró su barriga como si allí hubiera un tesoro inigualable.
A sabiendas de su propia mala suerte Xie Lian los escoltó varios pasos más delante de He Xuan, apartando los obstáculos, aunque eso significara quitar del camino a más de algún oficial celestial, de esa forma llegaron al templo del viento sanos, salvos y muy divertidos por aquella escena.
Mientras He Xuan preparaba comida, Xie Lian se puso a limpiar y Shi Qing Xuan se recostó un rato acariciando su vientre tratando de percibir lo que allí se encontraba. Más tarde recibieron una visita infiltrada, Hua Cheng también estaba preocupado por ella, se había mantenido al tanto de todo gracias a Xie Lian quien le transmitió cada detalle por su línea de comunicación directa, por lo tanto, cuando una de las puertas se abrió, Hua Cheng apareció con el primer regalo para el bebé por nacer.
Shi Qing Xuan volvió a llorar al recibir una pequeña canasta con ropa de bebé, He Xuan apenas contuvo su emoción y los otros dos sonreían conmovidos, sintiéndose afortunados de ser los primeros en enterarse de tan alegre noticia.
-----------
Comentario de la autora~
¿Alguien lo vio venir en el capitulo anterior?
ESTÁS LEYENDO
Días luminosos
FanfictionContinuación de "La segunda oportunidad del maestro del viento" He Xuan y Shi Qing Xuan se encaminan en la aventura de intentar formar una familia, enfrentándose a dudas, temores y eventos emocionantes y divertidos que aunque resultan todo un desaf...