Capítulo 40. Yale.

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Edith era el remedio a todos los problemas en casa. Ella había llegado por su descanso de primavera, y tan pronto como puso un pie en la casa, todo se sentía tan armónico como siempre. Hakon había dejado de irse con Emma, estaba pasando las tardes con nosotros, y Axel y yo parecíamos nunca haber tenido un rato incomodo, los cuatro íbamos a cenar a los restaurantes que Edith extrañaba, al cine, o nos quedábamos en la casa cenando frente al televisor viendo una serie.

-¡Emi Hawks! -Escuché a Richard llamándome fuertemente cuando nosotros cuatro íbamos entrando a la casa después de haber ido a cenar. Me estremecí nerviosamente. Mis hermanos habían dejado de reír, Axel me vio con urgencia. Me encogí de hombros. No sabía que había hecho.

Me tomé de la mano de Axel, él caminó conmigo a la oficina de Richard y Samuel, pero sólo estaba Richard. Lanzó un papel a su escritorio. Lo miré confundida. No sabía que era.

-¿todo bien, tío? -Preguntó Axel porque yo no me atreví a decir nada.

-Es para Emi. -Dijo Richard. Tragué saliva nerviosa y fui soltando la mano de Axel. Noté que Hakon y Edith también habían venido y se habían parado tras de Axel y yo. Recogí el papel. Lo fui abriendo notando que estaba doblado con precisión, debía de haber venido en un alargado sobre.

-¡Oh por dios! -Exclamé sorprendida al ir leyendo y entender lo que era. Bajé la carta viendo a Richard impresionada. Él quitó su seria expresión sonriendo.

-Tú. -Me dijo señalándome con su dedo. -Me llenas de orgullo. -Dijo haciéndome reír aun emocionada. Richard se levantó y dio un grande beso sobre mi cabeza. -Tu tía te llevará de compras el fin de semana, lo mereces. -Me dijo. Asentí una y otra vez. -Bien hecho, pequeña. -Me dijo con su mano en mi hombro antes de rodearme. -Los demás podrían aprender algo de ti. -Dijo en acusación a mis hermanos cuando ya salía de la oficina.

-¿Qué quiso decir con eso? -Preguntó Edith.

-¿Qué fue todo eso? -Me preguntó Axel confundido. Me apuré a volver a ver la carta.

-¡Fui aceptada en la universidad de Yale! -Exclamé.

-¡¿Qué?! -Gritaron los tres.

-¿Yale? ¿o sea la original? ¿la universidad de Yale? -Preguntaba Hakon apurándose a mí para arrebatarme la carta de aceptación. Edith se apuró a asomar también.

-¡Sí es Yale! -Gritó ella.

-¿Espera... qué? -Me preguntó Axel desconcertado y muy serio.

-¿No es increíble?! -Exclamó Edith.

-¿Que les dieron a ustedes de comer para alcanzar tan buenas universidades? -Preguntaba Hakon impresionado.

-¿Primero Axel a Duke y ahora Emi Yale? Son imparables...

-No. -Dijo Axel firmemente haciéndonos a todos mirar. -Yo no fui a Duke, rechacé esa buena escuela para quedar cerca de Emi. -Nos recordó él tan seriamente que todos quedamos en silencio al comprender que estaba molesto. Lo miramos. Él veía a Edith, pero de inmediato me miró a mí.

-Creí que vendrías a Seattle conmigo. -Se quejó él. Y yo me fui poniéndome más seria al recordar aquello.

-Lo sé, pero había aplicado antes de que llegaras, olvidé decírtelo.

-¿puedes llamarme a medianoche para preguntarme de que color deberías pintar tus uñas pero no puedes encontrar un momento en el día para al menos mandarme un texto diciendo que arruinaste todos nuestros planes?

-¡Axel! -Lo regañó Edith.

-No he tomado mi decisión, Axel...

-Pero es obvio que no irás a Seattle, ni siquiera quieres ir...

Mi Vida de Cristal (#4 Saga Cristal FINAL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora