Enoch
Ahora podía ver porque se le había dado el nombre del asesino de reyes al rey actual. Justo ahora, viéndolo en la ventana lateral observar hacía el exterior, me daba la sensación de ver a su antecesor.
Me recosté en la silla del escritorio analizando sus pasos, aunque él, por su parte solo se limitaba a observar el paisaje, muy en contacto con sus pensamientos. Este lugar donde le había traído, era el estudio real donde normalmente revisaba los asuntos de mi pueblo, pero anteriormente le había pertenecido a Caliope durante su reinado y siempre que entraba estando presente el rey de los vampiros, estaba exactamente en la misma ventana. En ese tiempo, inclusive había un sofá acondicionado para él. Había quemado ese mueble en cuanto tomé el trono.
Sacudí la cabeza recordándome a mi mismo que a pesar de pertenecer a la misma familia, el hombre frente a mi no era Maxwell, ese rey había muerto hacía mucho tiempo y los vampiros no reencarnaban.
La reina de los vampiros, Ivyridiana estaba frente a mi, pero de vez en cuando lanzaba miradas hacía su esposo con extrañeza. Me pregunté si su estado de animo estaría directamente relacionado con el momento de tensión que tuvo con Arista Schevert, pero ambos se mantuvieron firmes en negar cualquier tipo de discusión, a pesar de que la pequeña hada no podía mentir, supo usar sus palabras de manera apropiada para evitar mis preguntas más directas.
- Pareces distraído.- Procedí a tutearlo, después de todo, habíamos accedido a llamarnos por nuestros nombres directamente, no tenía caso continuar con las formalidades.- ¿Mi concubina te ha ofendido de alguna manera?
Lucius miró en mi dirección y negó con la cabeza.
- En absoluto.- Murmuró acercándose al escritorio y sentándose al lado de Ivyridiana. Le pasé los diarios del príncipe Malek. Se encontraban gastados, pero aún se mantenían todas sus paginas.
Ivyridiana miró a su esposo aún más interesada que cuando lo veía en la ventana. El rey de los vampiros procedió a a explicarle rápidamente.
- Mi padre borró de los registros familiares al príncipe Malek, quien tiene el apellido Arscorth. Lo incorporaré al árbol familiar y le entregaré los libros a Maxell para que los guarde con el resto de diarios de los antecesores.
La reina sonrió al observar el nombre completo en la portada de los libros.
- ¿Y de quién era hijo? - Levantó las manos al verme fruncir el ceño.- Oh, no quería ser grosera, solo tenía curiosidad por los padres para saber en que posición del árbol genealógico estaría.
- No estaba siendo grosera.- Le dije antes de empujar las siguientes palabras por mis labios, después de tanto tiempo, la sola idea de decirlo me hacía enojar.- Es el hijo ilegitimo entre la reina Caliope y el rey Maxwell.
Lucius permaneció en silencio, sin reaccionar y la reina se llevó las manos hacía los labios, sorprendida y a la vez sin poder contener una sonrisa, como si esta nueva información fuera oro para ella. Trató de alcanzar los diarios en las manos del rey pero este los mantuvo alejados de sus pequeñas manos.
- ¿Por qué no puedo leerlos? Podría haber algo importante ahí.- Ivyridiana dijo antes de girarse y preguntarme.- ¿Ya los ha leído?
- Por favor, llámame Enoch.- Le dije, animándola a mantener un ambiente más tranquilo.- Y no, considero que es algo muy personal del príncipe.
- El mundo puede ser diferente dependiendo de los ojos que lo vean.- Reflexionó.-¿No sería interesante ver el pasado desde otra perspectiva?
Sacudí la cabeza.
- El pasado no me interesa.- Contesté.
- ¿No será que le tiene miedo al pasado y a sus demonios que se esconden ahí? - Preguntó colocando las manos sobre la superficie del escritorio, inclinándose hacía mi.
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Villanos (La guerra eterna parte III)
FantasyCulpables. La historia siempre buscará culpables. Maxwell lucius Arscorth se convirtió en el rey de los vampiros, sentándose en un trono construido en sangre e iniciando una cadena de muertes sin sentido, tiranía y traiciones. Caliope Montefher Vari...