Capitulo 6. 🦋

1K 54 1
                                    

Iván: ¿qué pedo?

Daiana: ¿Con qué?

Iván: ¿estaban discutiendo verdad?

Daiana: no, Por supuesto que...

Iván: ¡Ey! Qué te dije anoche, qué podías contar y confiar en mí ¿fue por mi fiesta verdad?

Daiana: es que según él no fui con él porque preferí quedarme en la fiesta que estaba llena de hombres.

Iván: Qué pendejo.

Daiana: Es que yo ya le expliqué, pero no quiere creerme.

Iván: bueno entonces sí ya le explicaste déjalo, allá él si no quiere creerte, Tu ya le diste una explicación... Dai Sí ese vato no confía en ti es porque no te quiere de verdad Cómo dice y si es así, déjalo, hay muchos hombres que quisieran estar en su lugar y te tratarían como mereces, de verdad te lo digo, si él es así no vale la pena que sigas con él por mucho que lo quieras, porque recuerda que así comienzan los machistas y luego terminan en tragedia.

Daiana: Muchas gracias Iván, me hacían mucha falta tus consejos.

Iván: De nada mi morrita, sabes que cuentas conmigo para lo que necesites... date tiempo para pensarlo y dale tiempo a él... si él de verdad te quiere como dice va a regresar y te va a entender, pero si sigue en la misma postura es porque realmente no te quiere.

Doña María Jimena: ¿qué tanto se secretean ustedes?... Ivancito mi niño, qué alegría verte por aquí.

Iván: vine a visitarlos.

Doña María Jimena: qué alegría, Pero por qué no me avisaste que venías así te mandaba a preparar una comida especial.

Iván: no no se preocupe Doña Mari, Usted sabe que con un aguachile yo soy feliz.

Doña María Jimena: ¡Ay! Tú siempre tan sencillo.

Daiana: voy a avisar que pongan otro lugar en la mesa.

Doña María Jimena: Sí gracias hija... mi niño quiero hablar contigo de algo que me tiene muy preocupada.

Iván: claro Doña Mari, Usted sabe que si está en mis manos ayudarla  lo hago.

Doña María Jimena: estoy muy preocupada por Daiana, ese muchacho con el que sale no me da buena espina, siento que hay algo malo en el.

Iván: pues, ya somos dos, a mí ese vato tampoco me da buena espina.

Doña María jimena: ¿entonces cuento contigo para quitarlo de la vida de mi hija?

Iván: no Doña mari, perdóneme, pero no puedo ayudarla en eso, porque eso sería hacer sufrir a Daiana y es lo que no quiero.

Doña María jimena: pero ahí estaríamos todos nosotros para consolarla... piénsalo, además te beneficiaría a ti para poder pretender a mi hija.

Iván: ¿De qué habla?

Doña María Jimena: Yo sé que amas a mi hija, Ya hace mucho tiempo me he dado cuenta de eso, de como la cuidas, de como la tratas, de como la miras, sé que sientes amor por mi hija, todos lo sabemos, la única que no se ha dado cuenta todavía es mi hija.

Iván: Pues sí, Sí siento algo por su hija... Su hija me gusta desde hace muchos años, desde que era una plebita siento cosas por ella.
Por eso no puedo hacerle eso, porque yo la quiero y no quiero hacerla sufrir.

Doña María Jimena: piénsalo, no me respondas ahora, Piénsalo y luego me respondes sí?
¿Vamos a la mesa? Que ya nos deben de estar esperando.

Iván: vamos.

Don Samuel: Ivancito cómo estás, dijo saludandolo de abrazo.

Iván: muy bien ¿y usted?

Don Samuel: bien gracias.

Jimena y Araceli: Hola Iván.

Iván: Hola, cómo están.

Jimena y Araceli: bien ¿y tú?

Iván: bien.

Doña María Jimena: Ahora sí podemos comenzar a comer, Buen provecho para todos.

Todos: gracias.

💎💎💎💎💎💎💎💎

𝓒𝓪𝓼𝓪𝓭𝓪𝓼 𝓒𝓸𝓷 𝓛𝓸𝓼 𝓗𝓲𝓳𝓸𝓼 𝓓𝓮 𝓝𝓾𝓮𝓼𝓽𝓻𝓸 𝓟𝓪𝓭𝓻𝓲𝓷𝓸.💍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora