i wanna be yours | eddie munson x male oc

𝟏𝟑. 𝐒𝐨𝐬𝐩𝐞𝐜𝐡𝐨𝐬𝐨

El resto del día se lo había pasado recostado leyendo su libro o durmiendo, cuando se cansaba. Pero la realidad es que no podía dejar de dar vueltas a lo que había pasado ese día en tan pocas horas.

"¿Qué tengo que hacer para que te des cuenta, eh?"  Recordó de repente. Se quedó en blanco.

De verdad no veía ninguna posibilidad en que esta vez, por primera vez y por la persona más fascinante que haya conocido jamás, sea correspondido. Se sentía como un idiota, porque la noche que fue a verlo tocar él coqueteó con Kit descaradamente, y luego él...

Se paró de la cama alterado, recordando por fin todo lo que había pasado. Eddie ya lo sabía pero no le dijo nada, ¿por qué no le dijo nada? Y... es por eso que se había comportado tan dulce con él, siendo totalmente impropio de él desde su punto de vista.

Tuvo que volverse a sentar, atónito.

Pero, suponiendo que era mutuo, ¿por qué había coqueteado con Chrissy estando Kit entre ellos? ¿No había bromeado con lo de tratar a los que les parecía atractivos de la misma manera que lo trataba a él?

No quería, era consciente de que no eran nada y que probablemente no lo serían, pero el sólo hecho de pensar en Eddie tratando a cualquiera de esa forma tan dulce y única con la que lo trata a Kit... lo mataba.

Mordió su labio, enojado, y volvió a cubrirse con la cobija, no pensaba hablarle. Que se joda, pensó por última vez antes de caer dormido.

Definitivamente, la situación se le había salido de las manos.

Unos golpes en su puerta lo despertaron de golpe, su padre se asomó, de veía preocupado.

— ¿Qué sucede?

— Unos policías... vinieron a hablar contigo. ¿Pasó algo que no me contaste, Kit?

Su mirada lo desconcertó. Y lo asustó. ¿Los habían descubierto? — No, yo...

Su padre negó y señaló la puerta. — Lo que tengas que decir... que sea a la policía. Sea lo que sea, no se ve bien.

Con un nudo en la garganta y un temblor en su cuerpo, se paró de la cama y se puso sus zapatillas, bajó lentamente con su padre. Había dos policías en su sala de estar, analizando cada rincón como si fueran a hallar algo. ¿Estaban buscando drogas? Él sólo lo acompañaba...

Lo hicieron sentarse en un sillón, ambos oficiales se pararon delante suyo, luciendo terriblemente intimidantes. No quería mirar a su padre.

— Kit ¿Verdad? — él asintió lentamente — Necesitamos hacerle unas preguntas relacionadas a Eddie Munson, me dijeron que es... muy cercano a él.

Y aunque el tono incómodo en que lo dijo lo sorprendió, se preocupó al instante por Eddie. Si los hubieran descubierto, el trato y el diálogo sería distinto. — ¿Le pasó algo a Eddie?

Ambos se miraron, ignoraron su pregunta olímpicamente. El oficial retomó la palabra. — ¿Has notado algún comportamiento inusual en Munson?

Un calor subió inevitablemente a sus mejillas, pues ayer sí que lo había sido, pero no aportaría nada al caso. — No. No sé lo que haya pasado pero le aseguro que él no es capaz de hacerle daño a nadie, sé que puede ser difícil de tratar pero-

— ¿Él ha dicho o hecho algo que insinúen el homicidio a una persona?

Kit frunció el ceño. — ¿Qué? No.

Ambos se miraron de reojo otra vez. — No nos estarás mintiendo, ¿verdad?

Y el otro oficial tomó la palabra. — Las personas dicen que tiene una secta, ¿es eso verdad, niño?

Kit suspiró frustrado y se pasó una mano por la frente. — Claro que no, es un jodido club de nerds donde juegan a un juego de mesa. ¿Me dirán a qué vienen estas preguntas? ¿Le pasó algo a Eddie sí o no?

El policía se quedó un silencio un minuto, buscando rastro de mentiras en el rostro de Kit. — Eddie Munson es el sospechoso principal del asesinato de Chrissy Cunningham.

Y el mundo se derrumbó en cuanto esas palabras salieron de su boca.

Su padre se acercó a contenerlo, pues dejó de responder todas las preguntas que le hacía el oficial, las escuchaba como si estuviera debajo del agua.

Imposible. Era imposible. Ninguna de estas personas lo conoce, todos creen que es un satánico de cuarta y un friki más, pero ¿Eddie un asesino?

Y Chrissy... ¿había muerto?

Era mucho que digerir. No dieron detalles, sólo que Eddie está desaparecido. El Eddie que Kit conocía, el que nadie más conocía y tampoco les interesaba conocer, sería incapaz de matar a una persona. Sólo era un chico de la preparatoria que intentaba graduarse con todas sus fuerzas, uno que vivía por Calabozos y Dragones y era amigo de unos niños igual de fanáticos que él por ese juego, ¿cómo podría él matar a una persona?

Y está desaparecido... Kit no entendía nada.

Su padre despidió a los policías y cuando se fueron, fue directo a abrazar a su hijo, quien no soportó más y comenzó a llorar.

— Papá... papá, Eddie es incapaz de algo así. Tienes que creerme, él no... Sabes que es un buen chico, papá... dime que no les crees, es imposible, todo esto es imposible. — sollozó en el hombro de su progenitor.

Jacob acarició su espalda, sin saber bien qué decir. — No lo conocíamos bien, hijo...

Kit se separó del abrazo. — Yo sí y no es nada como lo pintan... es la persona más dulce que conozco, mierda. ¿Eddie un asesino? Es imposible. Algo tuvo que haber pasado.

Su padre lo miró con pena. — Sé que él es... especial para ti, Kit, pero no dejes que eso te nuble los pensamientos.

El menor se echó para atrás, como si esas palabras le hubieran dado una bofetada, negó con la cabeza incrédulo. — Lo que yo sienta o no, no tiene nada que ver... él es una buena persona...

Eddie fue el primero en acercarse a ofrecerle ayuda, fue quien lo defendió del profesor que lo atacó, quien lo integró rápidamente con sus amigos, lo defendió de Jason y su grupo, no le importó que fuera gay, pudo haberlo golpeado en cuanto se confesó pero en cambio lo cuidó en su estado de ebriedad. Eddie era incapaz de dañar a una persona.

— Sea lo que sea que haya pasado, quédate aquí ¿okay? Es por tu bien. Ya aparecerá, hijo, y explicará todo.

Kit asintió, pero estaba seguro de que Eddie estaba oculto en alguna parte atemorizado.

Tenía que encontrarlo.

Se que todo va muy rápido pero tengan en cuenta que es porque el tiempo pasa rápido cuando algo te gusta y ellos se la pasan pegados como chicle, tampoco quería hacerlo pesado y aburrido para nadie. Los que leyeron hasta acá la verdad se los agradezco mucho jsjs

¿qué les parece la historia?