𝟕𝟐. 𝐍𝐨 𝐦𝐞 𝐝𝐞𝐣𝐞𝐬 𝐬𝐨𝐥𝐨

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Hola, perdón por no subir nada, aún estoy en proceso de escribir más caps pero por ahora subo estos 3 que me parecieron el cierre del anterior capítulo. Y, también pasaba a advertir, que tanto este como el siguiente tienen escenas cortas un poco subidas de tono. Disfruten la lectura, y en serio perdón por no haber actualizado nada, mi vida se volvió un quilombo.

Gracias por leer y los comentarios tan hermosos que me dejan que me animan a seguir con todo, disfruten<333











— Mierda, son reales. — dijo Gareth con asombro, viendo las entradas del concierto en las manos de Eddie que se las mostraba con orgullo. Lanzó un quejido cuando el de rulos le golpeó la frente, un poco más fuerte de lo que hubiera querido.

— Pues claro que son reales, idiota, fue mi chico quien las compró.

Estaban en la sala de estar, Eddie se había sentado en el sillón individual con Kit en sus piernas y mirando la escena casi escondido en su cuello, pues luego de darle la noticia a su pareja todos festejaron bebiendo todo el alcohol a su paso y él no quería quedarse atrás, por lo que el mayor lo cuidaba y brindaba caricias en su cintura mientras Kit (un poco ebrio, pues es sabido que no es demasiado tolerante al alcohol) miraba todo con ojos entrecerrados, riendo de vez en cuando por las peleas tontas que tenían, abrazando al mayor por los hombros y un poco mareado. Los amigos de Eddie estaban todos agachados al frente de ambos, ansiando tocar las entradas pero sin tener mucho éxito, el de rulos temía que las arruinaran. Estaban muy ebrios, si algo le pasaba a las entradas el daño más pequeño que les haría sería atropellarlos una y otra vez con su camioneta.

— Lo siento — dijo su amigo arrastrando las palabras, luego hizo un mohín con sus labios con frustración —. Diablos, yo también quiero alguien que haga eso por mi, ¿dónde lo conseguiste?

Eddie, quien luego de un par de cervezas había comenzado a beber con moderación, lo observó lloriquear con diversión y besó la cabeza de su chico para fastidiarlo aún más. — Kit Damons hay uno solo, jódete.

Kit sonrió y depositó un beso en su cuello, afirmando el abrazo y cerrando los ojos, disfrutando de las caricias de Eddie, su voz retumbar en sus oídos y el leve mareo que estaba sufriendo, ignorando una vez más la infantil pelea que se había alzado.

Sólo habló cuando se acordó que habían adoptado un gatito. Salió de su escondite, lo miró a los ojos con pánico y preguntó con voz alarmada. — ¿Dónde está Salem?

Eddie sonrió y besó su mejilla. — Tu papá se lo llevó, tranquilo, Taz no derrumbará la casa.

Kit sonrió y volvió a apoyarse en su hombro, escondió su rostro en su cuello y cerró los ojos. Estar así, recostado sobre él mientras recibía caricias en su piel, un poco mareado por el alcohol y adormilado, era algo que le resultaba placentero, porque podía oír con claridad los latidos del corazón de Eddie y su voz retumbaba en sus oídos sin ser molesto. Era tan relajante que comenzaba a dormirse lentamente, y su chico lo sabía, porque lo abrazaba contra sí y hablaba con sus amigos con la voz un poco más baja de lo normal, regañándolos cuando soltaban una risa demasiado fuerte que perturbaría el sueño de su pequeño.

Dustin se había encargado de tomarles fotos a todos en su peor estado de ebriedad, diciendo entre risas que pediría dinero a cambio de quemarlas, Steve sólo rodaba los ojos y lo dejó ser mientras volvía a hablar con Dante, quien le comenzaba a parecer una persona más interesante de lo que hubiera pensado, se veía como él era en su momento de popularidad y había creído que sería un idiota, pero veía que no.

Eddie bufó y le dio una botella de cerveza a su amigo. — Toma, idiota, bebe y calla, agradece que estás ebrio porque si me hubieras pedido prestado a mi chico estando sobrio te habría partido la nariz.

i wanna be yours | eddie munson x male ocDonde viven las historias. Descúbrelo ahora