25. Bicho malo nunca muere.

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[Justin PV]

Pisé el freno una y otra vez pero éste no respondía. El coche se había quedado sin frenos. Ya no había vuelta a tras, o seguía sin perder el control...o la segunda opción..y opte por ella. Giré el volante y choque contra el arcén de la carretera destrozandolo.

Horas antes.

-Muy buen golpe, aunque si tratas así al que antes llamabas hermano...- se quejó.

-¿Y que? Tu misma lo has dicho, antes, ahora todo es una mierda.- le contesté de mala gana.

-Anda tómate algo, te relajará.- me aconsejó mientras abría el frigorífico en busca de alguna botella de vodka.

-Creo que tomo demasiado...- reconocí mirando el frigorífico lleno de botellas vacías.

-Es normal, aquí es lo unico bueno que hay, a parte de los compañeros.- dijo acercándose a mi con la botella en la mano.

-Ya...- murmure.

-Algunos más que otros...- me susurró cerca del odio, tanto que su aliento me hizo cosquillas y sonreí brevemente.

-Dame eso.- le ordene con tono autoritario dándole una palmada en el trasero.

-¿Me darás un poquito?.- puso cara de niña triste.

-Si te portas bien conmigo si.- le dije agarrando la botella.

-Soy buena como compañera de gimnasio...y en muchas otras cosas...- volvió a susurrar a mi oído.

-Joder...no hagas eso.- le replique. Ese cosquilleo en la oreja me ponía demasiado caliente como para aguantarlo a cada dos minutos.

-¿El que? ¿Esto?.- preguntó mientras su mano se posaba en mis pantalones.

-Eso tampoco.- me quejé aunque la mano seguía ahí puesta.

-No me dirás que no te gusta ¿no?.- sonrió ella de forma pícara.

-Prefiero la botella.- al fin la soltó y pude desenroscar el tapón y beber un trago.

La garganta me ardía al principio como siempre, pero luego ese calorcito en el pecho no me lo quitaba nadie...

-Ahora que ya tienes tu botella...¿que te falta?.- subió su mano por mis pantalones hasta llegar a una zona bastante complicada.

-Para.- le advertí.

-¿Y si no quiero?.- susurro de nuevo.

La agarré de la cintura haciéndole creer que le seguiría el juego, pero lo que hice fue tirarla en el sofá e irme con la botella a otra parte.

-¡Oh venga ya Justin! ¿Vas a dejarme asi?.- me reprochó levantándose del sofá.

-Yo no te he pedido que empezarás.- le repliqué medio enfadado.

-Claro, es que el señorito tiene que sea la orden...- dijo con desprecio mirándome de frente.

-Te repito que yo no te lo he pedido, no quiero nada contigo.- le deje claro.

-Por supuesto, su majestad.- siguió en tono irónico.

-Anna, para ya, me estás poniendo de muy mala leche.- le advertí. Entre el alcohol y la pelea con Ryan...esto no iba a acabar bien.

-¡Joder! Mierda Justin... olvídate de tu pasado, ya no eres el narco más importante y más joven de los Estados Unidos.- decía Anna.

-Tengo memoria propia ¿sabes?.- le recordé, yo sabía perfectamente cual era mi historia y como había llegado hasta aquí.

- Ahora eres un pobretón sin familia y sin amigos, incluso tu novia te ha dejado por un viejo millonario...- siguió.

-¡YA!.- grité.

Lance la botella hacia la pared y Anna se sobresalto cuando ésta estalló en mil pedazos en el impacto.

-¿Que carajo pasa aqui?.- llegó Mike.

-Se ha vuelto loco.- dijo Anna cruzandose de brazos y negando con la cabeza.

-Este es mi gimnasio, y yo pongo las normas. Nada de pleitos ¿entendido?.- puso orden.

Aún sentía la rabia en mi pecho incrementada por el alcohol, intenté controlar la respiración y calamarme.

-¿Entendido?.- volvió a repetir más alto.

-Que si joder...- murmure sin ganas.

-Toma, ocupate de tus asuntos.- Mike me ofreció una rosa negra.

-¿De donde la has sacado?.- le pregunté sorprendido.

-Me la ha dado un viejo amigo tuyo, o eso decía él que era.- me explico.

-¿Ahora mismo?.- pregunté nervioso.

-Si, esta en la puerta montado en un Lamborgini negro.- me dijo.

Solté la rosa que cayó al suelo en menos de un segundo. Salí corriendo hacia la puerta y vi como el coche negro arrancaba para desaparecer. Sin pensárselo dos veces me monté en un coche que había abierto y con las llaves puestas. Más bien lo robé, pero lo mío era más importante que pensar en eso. Había tenido suerte de tener un taller al lado del gimnasio.

-¡Justin baja tu puto culo de ese auto!.- gritó Mike.

Le hice caso omiso. Pise el acelerador y fui a toda la velocidad que el coche me permitía tras el coche negro. Por fin iba a saber quien estaba tras las rosas negras y lo que quería de mi.

Salimos de la ciudad a una carretera más alejada, obvio que su Lamborgini corría más veloz que la chatarra en la que yo iba, pero aún así logré acercarme bastante. El problema vino cuando vi que el coche se paró en seco en medio de la autopista.

Pisé el freno una y otra vez pero éste no respondía. Tenía a ese Lamborgini negro justo delante de mis ojos y mi coche se había quedado sin frenos.

El paisaje se veía difuminado desde las ventanas a causa de la velocidad. Lo unico que veía claro era aquel coche delante mía.
Ya no había vuelta a tras, o seguía sin perder el control...o la segunda opción...y opte por ella. Pegué un volantazo y choqué contra el arcén de la carretera destrozandolo.

Al menos aquel golpe era menor que colisionar contra un coche de tal calibre que seguro ni se le haría un rasguño.

Tras chocar contra el arcén, que se rompió en el impacto, mi coche volcó y quedó boca abajo en la ladera. Suerte que no siguió cayendo cuesta abajo. El airbag de seguridad se habia activado y la nariz me sangraba por el golpe de éste en mi cara. Me estaba asfixiando, aquel puto airbag no me dejaba respirar.

Alargue debilmente los brazos y cogí las llaves a ciegas para después clavarlas con fuerza en el airbag. Este explotó con delicadeza y pude tomar aire de nuevo, aunque seguía boca abajo y la sangre me estaba llegando a la cabeza demasiado rápido.

Me quité el cinturón tirando con fuerza ya que estaba atascado. Puse las manos en el techo, que ahora era el suelo del coche e hice fuerza hasta lograr salir del asiento y caer de lado. Con dificultad salí del coche arrastrándome y vi unos zapatos frente a mi cabeza.

-Bicho malo nunca muere.- dijo mirándome fijamente.

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¡Muy buenas chic@s titaniums! Espero como siempre que os haya gustado el capítulo, y recomendaros que os paseis por la nueva novela de mi compi @swagbizzle99: Campamento de verano. No os la podéis perder porque el protagonista es nuestro cañonazo Justin Bieber!
También os recuerdo que he empezado otra novela llamada Best Mistake llena de misterio y magia! Muchos besazos!!!

Titanium. [Justin Bieber Fanfic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora