Titanium. [Justin Bieber Fanfic]

6. Lo creas o no.

Camine por la oscura carretera durante varios minutos aunque empezaba a perder la nocion del tiempo. Hacia frio y la luna escondida tras las nubes no alumbraba ni una pizca de luz.

Estaba harta de tener que aceptar siempre que otros manejaran mi vida. Claro que queria sacar a mi madre de la mafia de Vladimir, pero no introduciendome yo en ella. Crei que no lo tendria que hacer sola, pero eso a Justin le daba igual. ¿Que iba a importarle a ese engreido estupido? Por su culpa me encontraba alli, sola y muerta de frio.

Escuche como un coche se acercaba por la carretera y se iba parando. Reze porque fuera Ryan, el siempre aparecia en estos momentos en los que me encontraba perdida. Pero para mi desgracia no era Ryan.

-Hola Lucy, que de tiempo, juraria que cada dia estas mas crecidita - dijo con una sonrisa mirandome de arriba abajo desde la ventanilla bajada del coche. Era la ultima persona a la que esperaba encontrarme.

-Vete al infierno Logan - comence a andar mas deprisa pero me alcanzaba con el coche. Se bajo y me acorralo contra el vehiculo.

-Vamos Lucy, vuelve a casa conmigo - me manoseaba las piernas. Su aliento a alcohol y cigarrillos era insoportable.

-Dejame en paz o te juro que...- le intente amenazar pero la realidad era que estaba completamente sola con aquel psicopata.

No me extraña que mi madre lo dejara.

El reia y cada vez me ponia mas nerviosa. El miedo me invadia y me paralizaba. Logan me rompio la camisa y las lagrimas caian por mis mejillas sin control alguno. No podia escapar de ninguna manera.

De pronto un coche, un deportivo plateado para ser exacta, derrapo junto a nosotros. Bieber salio de el y se acerco quitandose la chaqueta y tirandola al suelo.

-¿Quien coño eres? - pregunto Logan con tono de borracho.

- Tu peor pesadilla - respondio Justin propinandole un buen puñetazo y dejando a Logan inconsciente en el suelo.

Yo seguia llorando sin darme cuenta de que lo peor ya habia pasado. Estaba congelada y embobada. Con Logan nunca me habia enfrentado porque sabia que no tenia ninguna posibilidad. Lo mismo pasara cuando este con Vladimir.

Bieber recogio la chaqueta y me la puso por encima de los hombros tapandome y sin decirme ni una sola palabra nos subimos a su lujoso coche.

- ¿Estas bien? - me pregunto sin quitar la vista de la carretera mientras conducia de vuelta a la mansion.

-No finjas que te preocupas por mi - respondi sin obtener respuesta alguna.

Llegamos y me baje del coche llendome rapido pero el me agarro del brazo y me hizo girar para quedar pegada a el.

- Lo quieras o no, me importas - susurro por ultimo acariciandome la mejilla.

Nos quedamos unos segundos manteniendo la mirada el uno en el otro y podia jurar que por un momento me senti segura. La misma sensacion que sentia con Ryan, como si Bieber se preocupase por mi y yo por el. Pero eso era una tonteria. Todos sabiamos que Bieber no sentia nada por nadie, no tenia ningun tipo de ataduras. De lo contrario seria su ruina, o eso solia decir el mismo.

Cada vez se acercaba mas a mi y no podia creeme que quisiera hacerlo, pero sus labios llamaban a los mios. No podia besarme con Bieber, odiaba su forma de ser, era un mafioso aunque me costara creerlo en aquel momento.

- No te importa nada ni nadie y mucho menos yo - respondi finalmente alejandome de el.

Me fui a mi habitacion tras entrar en la casa. Me tire en la cama, Quizas me habia pasado demasiado de la raya con el. Alomejor no era tan malo ckmo yo pensaba y detras de ese disfraz de duro y frio escondia un corazon con sentimientos. Sin darme cuenta me quede dormida.

Un rato bastante grande despues me desperte y note que tenia aun su chaqueta asi que me decidi a llevarsela a su cuarto, y de paso disculparme con el.

Su puerta estaba abierta y no habia nadie dentro. Estaria en el salon esperando a los chicos. Me asome por la escalera y ahi estaba, pero no solo. Una chica estaba con el, y se lo estaban pasando genial jugando con sus cuerpos.

No parecia que Bieber estuviese muy afectado. Yo tenia razon, no le importaba nadie, jugaba con las personas, las manejaba a su antojo...y era un experto. Casi caigo en su trampa por mi inocencia, pero nunca mas volveria a confiar en el por mucho que mi corazon me dijese que lo hiciera.