HABITACIÓN 001 [+21] [2 PARTE DE CELDA 001] [TERMINADO]

CAPÍTULO 16

VAREK

Siempre termino cagándola. Tenía que habérselo contado desde un primer momento y haberme ahorrado todo esto.

Entiendo su enfado, si hubiese sido al revés como ella ha dicho poniendo de ejemplo al camarero, estaría actuando igual. No podría soportar que nadie besara a Barbara nada mas que yo.

Siento que le he vuelto a fallar y ya no puedo hacer nada. A partir de ahora procuraré contarle las cosas a su debido tiempo. Cojo la llamada entrante que aparece en mi móvil.

– Dime – contesto.

– Varek – habla Drake – Babi está aquí, ¿está todo bien?

– No – soy sincero.

– ¿Quieres que vaya?

– Si – suspiro. No me vendrá mal estar con él.

– En quince minutos estoy.

Me doy una ducha rápida para calmar mis nervios y en cuanto termino Drake toca a la puerta.

– Hermano – me palmea la espalda - ¿Qué ha pasado?

Le ofrezco una cerveza y cojo otra para mi. Nos sentamos en el jardín y le cuento toda la historia detalladamente.

– Que cojones – musita – esa persona está loca.

– Yo creo que no está bien de la cabeza – digo serio – no es normal que aparezca aquí de la nada.

– Y más sabiendo todo lo que le dijiste junto a Babi.

– Tengo un lío en la cabeza.

Me paso las manos por ella y suspiro. Hay algo que no me cuadra. Muy bien que se obsesionara conmigo en el barco, ¿pero ahora?

Ayer dijo la muy gilipollas que iba persiguiendo los sueños, pero no entiendo como ha podido encontrarme, estoy seguro de que antes no vivía aquí. Y el haberse mudado a la casa de al lado me lo confirma.

– Dale tiempo a Babi – llama mi atención – mañana estará bien.

– ¿Has podido hablar con ella?

– No, se ha metido en la habitación de Sarah junto a Shana. Estaba llorando.

– ¡Joder! - maldigo y estampo el puño en la mesa.

– Intenta llamarla – dice.

– No me lo va a coger. Me lo ha dejado claro.

– Tendrás que esperar a mañana, pero en serio tío no te preocupes – pone una mano en mi hombro – tendrá el mismo lío que tu en la cabeza. Es cuestión de tiempo para aclararse.

– No quiero que pase como la última vez y que me deje – digo con miedo.

– No te va a dejar – niega rápido – ni de coña.

– Le he mentido – le recuerdo.

– Por su bien.

– Igualmente sigue estando mal, da igual el motivo.

– Lo entenderá – asegura.

Escucho ruido en la parte de fuera y pongo atención. El timbre suena cinco segundos después y me levanto junto a Drake hasta llegar al interfono. Nunca tengo visitas, es raro.

Activo la cámara que me permite ver quien hay fuera y me toco las sienes. No sé de donde se ha escapado esta loca.

– ¿Es ella? - pregunta Drake mirando la imagen.

– Si – suspiro.

– Déjame a mi.

– No, no salgas. Ya se cansará.