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Pasaron exactamente 10 días, antes de que vuelva a hablarle a Jaehyun

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Pasaron exactamente 10 días, antes de que vuelva a hablarle a Jaehyun.

Más de una semana que no lo vi ni por reojo, y aunque al principio me sentía tranquila, su ausencia empezó a molestarme, y me molestó aún más, el hecho de que me moleste que no esté conmigo.

Pero no pude evitarlo, la única respuesta semi coherente que encontré, fue que me había acostumbrado demasiado a tenerlo como única compañía eterna.

Así que, dejando mi orgullo de lado, le pregunté a Cecilia dónde se encontraba el dueño de la casa, la sorpresa en la mujer no se hizo de esperar, y me sentí avergonzada.

—¿El amo? — volvió a repetir.

—Sí— asentí a la par que las palabras salían de mi boca. No quise darle explicaciones, porque ni yo misma lo entendía, así que después de mi silencio, me lo dijo.

—En su oficina, señorita Kang. — su tono era un poco tenso, aunque lo haya intentado disimular.

—Gracias— fue lo único que respondí, antes de levantarme de la cama y tomar mis muletas, para caminar en dirección de su oficina.

Mi corazón latía con fuerza, y sabía que solo eso era suficiente para que Jaehyun ya me haya sentido acercarme.

Evité tocar la puerta, y solo giré el pomo, encontrándolo sentado detrás del escritorio, con sus lentes redondos que no le servían más que de adorno, una sudadera gris, y su cabello revuelto. Cuando sus ojos se encontraron con los míos, pasó lo que más temí que pasaría; no hubo arrepentimiento en mi corazón por haber venido.

Me acerqué con lentitud por las muletas, y me senté en el asiento en frente suyo. El silencio fue asfixiante porque no sabía cómo empezar.

—Vine a verte— dije, solo resaltando lo obvio. Él asintió lentamente, examinándome. Por sus facciones, Jaehyun no esperaba nada más, pero, aun así, sentí la necesidad de seguir hablando —Nunca te culpé por lo que pasó, Jaehyun.

Cualquiera pensaría que estoy demente. “Leia, ¿No lo culpas después de haber matado a tu amiga en frente tuyo y volverte a secuestrar? ¿Acaso ya te volviste loca?”

Pues no. No lo culpaba.

Cuando le dije eso la última vez que nos vimos, no mentía, porque era mi culpa desde un principio haber hecho algo tan idiota. Él fue sincero conmigo desde un principio, me dijo desde el primer día que nos hablamos, que habría consecuencias si desobedecía. Y no solo desobedecí una vez.

Fueron tres.

Y desde el principio, que intenté escapar por el jardín a plena luz del día, debí haberlo entendido. Dios, incluso desde antes, no podía tomarme a juego sus palabras, pero lo tomé de esa manera, e indirectamente, fui yo quien mató a toda esa gente.

Básicamente, yo le dije que haga eso.

Sería una total sinvergüenza si me atrevo a tirarle la culpa, cuando fui yo la que actuó inmaduramente y pensó que habría un milagro como en las películas.

FAVORITE | Jung Jaehyun Donde viven las historias. Descúbrelo ahora