Capítulo 26 "Miles"

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- ¿Qué eres? – se limita a decir Dipper mientras lo ve hacia los ojos azules.

- Oh, pero que tierno – dice Mabel para luego sacarlo del arbusto mientras lo abraza.

- Hey, Wow. – comienza a hablar el zorro al sentir como lo jalan del arbusto. Esto hace que ambos se sorprendan.

- ¿Habla? – se pregunta Dipper.

- ¡Habla! – dice Mabel emocionada mientras lo suelta para verlo bien.

En eso el resto se acerca para contemplar curiosos al zorro con dos colas. Nunca habían visto algo así, y eso era mucho decir para los que vivieron en el pueblo. El zorro los mira confundido sin entender la situación aún.

- Pues claro que hablo. – dice el zorro confundido. – ¿De qué otra forma podría comunicarme?

- Lo siento – se disculpa Dipper – es solo que no había visto nunca a un zorro de dos colas y que encima hablara. ¿Quién eres?

- Me llamo Miles Prower, pero mis amigos me llaman Tails. – dice el zorrito con una sonrisa.

- Gusto en conocerte Miles – le dice Matías. – Ellos son Dipper, Mabel, Stan, Soos, Joel, Pacífica, Wendy y Alicia – los señala a cada uno – y yo me llamo Matías.

- Gusto en conocerlos a todos, me pueden llamar Tails. – saluda haciendo un gesto con la mano. – Apropósito, ¿saben en donde estamos?

En eso ven como varios portales comienzan a abrirse a sus alrededores. Varios traían criaturas nuevas, otros más murcieojos y zombis. Todos ven esto y comienzan a planear la mejor ruta para salir de allí lo antes posible.

- Luego, primero debemos irnos de aquí – dice Wendy sacando su hacha en mano.

Joel les dispara a unos cuantos zombis que amenazaban con acercarse, así liberando un camino. Todos lo comienzan a seguir así logrando alejarse de aquel desastre. Sin pensarlo dos veces, todos deciden que es mejor regresar a la cabaña lo más rápido posible. Por suerte no se encontraban muy lejos. Al llegar, utilizan la entrada de enfrente, la cual estaba despejada de la tabla. Todos se dirigen hacia la sala para así poder descansar.

- Uf, eso estuvo cerca – dice Alicia tratando de recuperar el aliento.

- ¿Qué eran esas cosas? – pregunta Tails sin entender que sucedía.

- Pues veras... - comienza a decir Dipper.

Todos les explican lo que ha estado sucediendo hace seis días en todo el mundo. Como comenzaron a abrirse portales, los murcieojos y zombis, monstruos en todos lados, y como la culpa de todo esto fue debido al triángulo y la de ahora su acompañante. El zorro seguía sin poder creérselo, aunque aún no entendía como había llegado allí.

- Todo esto es muy raro – dice Tails procesando todo.

- Por esa razón le llamamos Raromagedón – dice Pacífica.

- Raromagedón 2 para ser exactos – corrige Wendy.

- Así que esto ya había pasado antes. – los voltea a ver Tails.

- Sí, pero solo ocurrió en Gravity Falls. Esta vez se expandió a todo el mundo – le dice Stan recordando el Raromagedón pasado.

- Y al parecer a otras ¿dimensiones? – dice Dipper aún confundido debido a lo que había escuchado de los triángulos momentos antes.

- Dimensiones... - se limita a imitar Tails tratando de pensar cómo fue posible que parara allí. Recordaba haberse metido al portal en Mobius luego de Sonic, pero de la nada una luz resplandeciente lo envolvió y al abrir los ojos se encontraba atorado en el arbusto.

- Como sea, cada vez todo esto comienza a ponerse más raro – dice Matías mientras ve hacia afuera. – Debemos descansar ahora. Podemos ponernos al día mañana y pensar que hacer.

Todos asienten y se acomodan en la cabaña para descansar. Tails al principio duda si en quedarse con ellos, debido a que no quería ocasionar molestias, pero termina accediendo al darse cuenta de que no tiene otra alternativa. Todos descansan para recuperar energías para el siguiente día.

La noche pasó rápida y ya amanecía un nuevo día en toda esta locura. Todos despiertan y se juntan de nuevo para poder organizar que harían. Todos discutían que podían hacer, excepto el zorro de dos colas que se recordaba del por qué había saltado al portal. Debía de encontrar a Amy y a Sonic, podían estar en peligro y solos en este nuevo lugar.

- Debo irme – dice de la nada Tails, interrumpiendo la discusión entre todos. Lo voltean a ver sin entender el porqué de su decisión.

- ¿Por qué debes irte? – le pregunta Wendy.

- Debo ir a buscar a mis amigos. Deben de haber parado aquí al igual que yo. Deben de estar perdidos sin saber que está pasando. – responde Tails. – Además, me preocupa uno en especial. – dice para referirse a Sonic. Él sabía que su amigo podía arriesgarse para intentar detener lo que sea que estuviera pasando, pero era muy peligroso. No era su típico enfrentamiento con Eggman. Todo esto le superaba de las manos.

- Pero no puedes ir a buscarlos solo. No conoces el lugar, además es muy arriesgado salir solo. – le dice Matías. El zorro limita a agachar la mirada.

- Hey, no te preocupes. – le dice Alicia acercándose a él. – Juntos los encontraremos. También buscamos a alguien que puede que sepa como detener todo esto.

- Gracias, chicos.

Tails los voltea a ver agradecidos, levantando así su ánimo. Comienza a girar sus colas emocionado para luego comenzar a volar mientras levanta un puño en el aire. Todos al ver esto se quedan impactados. No sabían que podía hacer eso.

- ¿Puedes volar? – le pregunta Dipper impactado por lo que acaba de ver. Él los voltea a ver y de inmediato baja de nuevo al suelo mientras se rasca la nuca.

- Sí, puedo volar con mis colas. Perdón por no mencionárselos antes. – contesta Tails.

- Wow, debes ser popular de dónde vienes – le dice Mabel.

- Algo así, aunque no tanto como mi amigo Sonic. Verán, en Mobius, que es de donde venimos, somos un tipo de héroes.

- Eso es asombroso – dice Soos sin poder creerlo.

- Ok, volviendo al tema – dice Stan para que todos vuelvan a la realidad. Todos lo voltean a ver mientras ven un mapa de Gravity Falls. - ¿Dónde vieron a los pueblerinos esconderse? – les pregunta a Matías y Alicia.

- Ehh... la verdad es muy difícil de decirlo – dice Matías rascándose la nuca apenado.

- No conocemos aún el pueblo entero, recuerdan... - dice Alicia apenada.

- Podríamos ir hacia donde nos dirigíamos – sugiere Wendy – Podríamos partir mañana y dedicar todo el día en buscar la escotilla. No debe de ser complicado.

- Eso esperemos – dice Joel viendo al mapa. – También podríamos ir a revisar al mall. No hemos visto allí aún.

- Sí. Organicémonos y mañana partimos allá. Debemos estar preparados ahora que sabemos que Bill nos anda buscando – dice Dipper, a lo que los demás asienten.

El día transcurrió con "normalidad" ya que utilizaron el día para descansar y buscar rutas para encontrar aquel bunker para poder ver si se encontraba allí Ford. De lo contrario irían en búsqueda al mall para buscar pistas y suministros ya que estos comenzaban a agotarse al pasar de los días. También debían conseguir algunas armas para poder defenderse, ya que los únicos que tenían algo con que defenderse eran Joel y Wendy. 

Raromagedón 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora