Capitulo 23 "Encuentros inesperados"

13 1 0
                                    


El sol comenzaba a salir en lo que solía ser un pueblo tranquilo. Se encontraba todo más desastroso por todos los lugares, casas destruidas, cuerpos de personas petrificadas en piedra y cuerpos tirados en la calle. Todos continuaban durmiendo, deseando que todo hubiera sido una pesadilla, pero al abrir los ojos se percataron que no era así. De la nada escuchan pisadas del otro lado del escondite en el que se encontraban. Rápidamente todos se levantan y comienzan a buscar un arma para poder defenderse, en cualquier caso. Aún no sabían que monstruosidades se encontrarían afuera merodeando. La puerta se abre lentamente sin revelar a la persona que se encontraba aún en las sombras.

- ¡Qué suerte que esto sigue aquí! Lástima que no llegue antes ayer. Estúpido monstruo que me tope en la entrada – dice una voz femenina.

Dipper al escuchar aquella voz deja caer su palo de golf que había agarrado para defenderse. Estaba sorprendido que la primera persona que habían encontrado sea ella. Se acerca lentamente a la entrada para poder hablarle.

- ¿Wendy? – dice medio susurrando aún sorprendido.

- ¡Dipper! – exclama ella sorprendida saliendo de las sombras para por fin revelarse ante los demás. Era una chica pelirroja de unos 16 años. Tenía puesto su típica camisa verde de cuadros, con un jeans y botas. Aparte tenía un gorro azul con blanco, la cual tenía una forma de un pino. – Mabel – se percata de ella y esboza una sonrisa - ¿Qué hacen aquí? – pregunta para luego darle un fuerte abraso a ambos.

- Veníamos a visitarlos cuando toda esta locura comenzó. Queríamos saber que estaba sucediendo. - le contesta Dipper a la pregunta sin dejar de abrazarla. Al terminar su abrazo, Wendy se percata de los otros dos chicos que ella no conocía.

- ¿Quiénes son ellos? – los señala confundida.

- Oh, lo siento. Mi error. – responde Dipper mientras se rasca la nuca apenado. – Ellos son Matías y Alicia. – los señala a cada uno con su respectivo nombre. – Los conocimos ayer cuando veníamos. Alicia y Matías, ella es Wendy.

- Hola, gusto en conocerlos. Lamentable la situación no es favorable – dice Wendy a la vez que saluda haciendo un gesto con la mano.

- Parece que aún conservas mi gorro – le dice Dipper al ver su gorro que habían intercambiado el verano pasado.

- Y tú el mío. – le contesta Wendy para luego volverlos a intercambiar. – listo, justo tu look del verano pasado – le dice a la vez que le guiña el ojo.

- ¿Sabes que está ocurriendo y por qué se originó de aquí? – pregunta Mabel sin entender como de la nada comenzó a ocurrir todo esto.

- Sí, me trae varios recuerdos también. – comenta Dipper mientras se acerca a la puerta de la zapatería para poder ver el mall.

- No creo que les vaya a gustar la respuesta, pero... - comienza a decir Wendy.

Dipper se queda viendo por las ventanas que estaban en la entrada, las cuales seguían intactas, excepto por la que ellos rompieron y por la puerta sellada por escombros. Ve como aún hay varios murcieojos volando por la zona buscando más víctimas para poder convertirlos en piedra. No evitaba pensar en su verano pasado, en el cual Bill fue responsable por provocar el Raromagedón. Aquella vez también habían estado los murcieojos llevándose a la gente para un trono humano para Bill en su mansión piramidal. ¿Cómo era posible que esto estuviera ocurriendo de nuevo, sabiendo que Bill ya no se encontraba más? Por suerte la vez pasada se había limitado todo a Gravity Falls.

Mientras Wendy está a punto de contestar la pregunta de Mabel, Dipper se fija que varios portales verdes se empiezan a abrir por todo el mall. Asustado comienza a caminar para atrás esperando a ver que salían de estos. Entonces se da cuenta que de ellos salen unos zombis que empiezan a caminar por todo el comercial. No eran los mismos que él había invocado la vez pasada, pues estos se miraban totalmente diferentes. Rápidamente, corre de vuelta al escondite para avisarles a los demás.

Raromagedón 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora