Prólogo. Heather

7 0 0
                                    

Es hora de confesarme a mí misma más que a cualquier otro ser humano que, de algún modo, yo misma había obstaculizado las posibilidades de tener una relación normal y saludable, debido a que la forma en la que fui construida y los hombres por los que fui consumida, no fue la normal... Y ahora todo me persigue, recordándome cuál va a ser mi final y que no puedo escapar de él.

—¡ABRID LA PUERTA! —Mis manos duelen y los nudillos están a carne viva—. Abrid la puerta... Vamos, Wyde, abre la puerta, por favor, hazlo por mí —sollozo—. Abrid la puerta... Cassian, me prometiste que ibas a cuidar de mí... Y yo solo quiero salvar mi vida... Juro por Dios que si no abrís la puerta, voy a odiaros para siempre.

Las ventanas están cerradas con tablones y clavos imposibles de sacar.

Tropiezo en el pavimento y una piedra afilada se clava en la planta de mi pie. Mis pantalones están tan embarrados que están tiesos, y manchas de sangre seca descansan en mi cuello, igual que mis uñas, que yacen rotas y ensangrentadas.

Mi vista se nubla, un hueco negro en mi cabeza recordándome que no existe nada.

—Heather —su voz traspasa la madera—. Estoy aquí.

—¡NO PUEDO CREER LO QUE ME ESTÁIS HACIENDO! ¡CREÍA QUE ME AMABAS! ¡OS ODIO!

Dulce Caída [TERMINADO] (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora