A Lonely Heart Song © (Love & Music #3)

38. Inquietud

(4/5)

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Shine— Take That

Sonrió recostando la mejilla en su mano, estar de vuelta en la casa de los Porter sin temer ser botado de una patada, se sentía bien. Además era como un pequeño respiro luego de días en los que prácticamente corrían de un lado a otro tratando de cumplir con el itinerario de la gira. Rick no iba a mentir, a veces todo ese movimiento, estar rodeado de tantas personas previo a salir al escenario, lo llenaba de ansiedad, de inquietud. En esos momentos necesitaba alejarse, tomar un respiro y darse palabras de ánimo para recordar que podía con ello.

Un estallido de risa llamó su atención, en una mesa más allá, Wesly había dicho algo que hizo reir a las personas sentadas a su alrededor. De por si Wes era el alma de la fiesta, pero cuando también tenía a Lim al lado y a Finnick, su cuñado, era mil veces más animado. El rubio sacudió la cabeza dándole un trago a su vaso de jugo natural de frutas. La madre de Wes fue lo bastante considerada como para agregar al menú bebidas que no fueran alcoholicas o gaseosas. Ya que no era buena idea mezclarlas con su medicación.

—¿Te estás escondiendo, kothenok? — Alzó la cabeza solo para toparse con Evgeny. El ruso se dejó caer a su lado en el último escalón del porche. Esa tarde iba en vaqueros y una camiseta negra que se moldeaba bien a su fuerte cuerpo. No es que tuviera la intención de darle un repaso, pero estaba ahí.

—No me escodo. ¿y qué significa esa palabra?

—No voy a decirte.

—¿Es un insulto?

—Nyet— el ruso soltó una risa entre dientes—. Si se me ocurriera insultarte, lo más seguro es que correrías a decirle a Jude.

—Por supuesto que no haría eso— sacudió la cabeza pero siguió sonriendo—. Sabes, ahora que mencionas a Jude, me gustaría saber desde hace cuanto lo conoces.

—Algunos años — el hombre se llevó la cerveza a la boca y luego hizo una mueca de asco—. La cerveza americana es una mierda. Todo su licor en realidad.

—Oye, tampoco está tan mal.

—Tú solo espera, Kothenok. Un día te daré a probar un poco de vodka ruso, el más puro. Ya me dirás después si aun crees que los licores de tu país "no están tan mal"— Soltó una carcajada. Alguna vez había escuchado por ahí que no deberías discutir con un ruso sobre alcohol. Y al parecer era verdad.

—Gracias, pero paso. El vodka y yo no volveremos a ser compatibles, tal vez nunca— Evgeny le dio una mirada curiosa. En verdad era guapo, incluso con el aire frío e intimidante que lo rodeaba. Y por extraño que pareciera, Rick sentía que podía confiar en él, se había dado cuenta de ello en los días que llevaba de conocerlo. Por eso no le sorprendió tanto cuando su boca se abrió por si sola—. Tuve una mala experiencia con una botella de vodka y pastillas para dormir — no creía que fuera necesario dar más explicación que esa. No sé equivocó, el entendimiento cruzó por las facciones del ruso.

—¿Ves? estúpido alcohol americano— volvió a reirse. Luego se quedaron un rato en silencio solo viendo a las personas charlar. Evgeny se removió un poco dando otro trago a su cerveza antes de hablar—. ¿Derek tuvo que ver con ese accidente?

—En parte. Mi vida era un desastre en otros aspectos. Él solo fue el catalizador, la última gota para derramar el vaso.

—¿Y cómo encaja Jude en todo eso?