Por Qué Me Toco Ser A Mi Su Mate???

capitulo 9

¿Cómo está Tyler? Le pregunte, extrañaba a ese lobo, siempre fue lindo, tierno, paciente conmigo, desde que tenía uso de razón recuerdo jugar con el, aún siento una niña o una adolescente siempre estaba conmigo.

La voz de William me saca de mi burbuja.
William -Tyler está bien, pero se ha vuelto un lobo bastante amargado.

Yo - por que no me ha visto, ¿Crees que pueda verlo?.-

William -¿Para que quieres ver a ese lobo gruñón? Creo que los niños nos tienen miedo por su culpa.-

Yo -¿¡QUE!? Me estás mintiendo Tyler es el lobo más tierno, adorable, suavecito y consentidor que existe, si se ha vuelto amargado es por tu culpa y por qué no me ha visto-.

William me veía con una tierna sonrisa -probablemente tengas razón se volvió amargado cuando te fuiste. Y realmente sentimos todo lo que paso espero puedas perdonarnos pronto, ¿Pero explícame como es que te consentía?.-

Me dedique la siguiente media hora contándole algunas cosas que hacíamos Tyler y yo como picnics, leer en el margen del río, nadar, cuándo hacia mucho frio me dejaba acostarme encima de el entre sus patas pegada a su panza y como era que cuando lo veía me llevaba chocolates, galletas o algún detalle.

William me veía con una mirada tierna -¿Lo quieres mucho verdad?-

Yo -fue lo único que tuve todo ese tiempo.

William -Esta bien, lo podrás ver pero no hoy, este día solo es mío por favor- me decía mientras tomaba mi mano por encima de la mesa y me daba un apretón.

Yo -Está bien solo quería saber de el. No te pongas celoso de Tyler eres tu mismo.- le decía mientras negaba con la cabeza.
Platicamos de muchas cosas, era mi fácil estar con él, me sentía bien en su compañía.

Pasaban de las 10pm cuando salimos del café y William me dijo -¿Quieres caminar?-
Claro le dije, cruzamos la calle hacia la plaza que era el punto central de la manada, ahí se hacía la fiestas, ceremonias, juntas, etc. Había cambiado desde que me fuí, se veía más linda, le dije se ve un poco diferente, me dijo -si cambiamos las farolas, pusimos bancas y flores-.

Yo- ¡wow todo un alfa!-. Mientras caminábamos la gente que pasaba le hacía reverencias.

Yo- sabes Will nunca he entendido por que hacer reverencias al alfa y la luna, no me molestaba hacerlas a tus papás pero a ti no creo que podría, siempre serás tu-.

William -Son por respeto pero tu no tienes ni tendrás que hacerlo nunca hermosa, pero tendrás que acostumbrarte a que la gente las haga cuando pases-.

Me decía con una linda sonrisa mientras ponía un mechón de mi cabello atrás de mi oreja y acariciaba mi cuello con la punta de sus dedos y un escalofrío bajaba por mi espalda.

Me quedé muda después de eso por que hasta ese instante me di cuenta que si lo perdonaba, le daba una oportunidad, aunque tardará  mil años ese sería mi puesto... Yo seria la luna de la manada y no creia estar preparada para eso.

Él acunaba mi cara con sus grandes manos, se acercaba a mi cara mientras me decía en un susurro - tranquila hermosa será cuando tú quieras, aún queda mucho tiempo, pero yo sé que estás preparada, naciste para esto-.

Mientras lentamente rozaba sus labios con los míos. Yo entre en pánico estábamos en el centro de la plaza todos nos veían, y la estúpida de yo lo único q pude hacer al reaccionar fue corre y gritar -¡El que llegue de último paga las hamburguesas!

¿Porqué me había dicho eso? Acaso creía que una cita y ya me casaría con él, sería luna de la manada del día a la noche. Si lo sé él ya tiene 30 años pero yo apenas 20 quiero terminar mi carrera y viajar otro poco. ¿Cómo se lo diría? ¿Y si lo tomaba mal? Y se enojaba ¿Que haría?, Pero aquí estaba yo y mi idiotez corriendo hacía restaurante de hamburguesas escuchando como corría detrás de mi, sabía que me podía alcanzar sin ningún problema. Mientras lo escuchaba reír