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 No quedaba un solo cabello suyo con algún tinte de cabello, el castaño le caía bien, mucho más de lo que pudo imaginar. Estaba atónito, por un momento pensó en que tal vez seguía dormido, pero todo se veía tan real.

La sorpresa no le permitió responder tiempo haciendo que el castaño se impacientara.

—¿Jungkook?—preguntó y el aludido reaccionó.

—¡Oh! Lo siento, solo estoy un poco sorprendido. No imaginé que algún día volvería a verte.—confesó, golpeándose mentalmente por la estupidez que acababa de decir, pero Jimin rio al notar su arrepentimiento.

—Entiendo a qué te refieres, no tienes que mostrar esa cara de asustado.—bromeó caminando por todo el lugar dándose un pequeño tour.—Es acogedor, me gusta. No huele a aceite de carro y tú no te ensucias demasiado.

—Definitivamente, hay ventajas en dedicarme a otro tipo de oficio.—comentó dirigiéndose al mostrador.

—Sé que mi visita es totalmente inesperada, pero será corta, lo prometo.

Jungkook sintió una molestia en el estómago al escuchar que el castaño se iría pronto. Por un momento, por su cabeza pasaron algunos pensamientos de posesividad, pero los reprimió en lo más profundo de su ser.

Atinó a asentir y Jimin tomó esto como una invitación a continuar con lo que quería decir.

—No es mi intención recordarte cosas que sucedieron hace mucho y que probablemente ya dejaste en el pasado. Solo quiero estar listo para continuar con mi vida sin cargas.—Jungkook estaba completamente intrigado.—La última vez que nos vimos, dejaste esto.—dijo, sacando un sobre de su bolso.—Yo no recibí dinero de nadie y nada de lo que hice contigo tuvo un precio. Sé que hice mal en callar, pero estando en la situación en la que me encontraba, pensé que sería lo mejor alejarte de mí.

—Jin también corroboró lo que dijiste, sé que todo fue invento de su madre.

Las manos de Jimin comenzaron a temblar.

—Quiero que entiendas que no solo tomé esa decisión para evitar que te mantuvieras a mi alrededor, aun cuando yo no podía brindarte ni siquiera exclusividad, sino también porque hiciste algo por mí que fue demasiado lejos.

Siempre se preguntó si Jimin tenía idea de lo que hizo, su duda sería resuelta.

—Mataste a Gunwoo y lo supe porque fuiste muy evidente para mí. En un inicio no tuve idea de quien fue la víctima hasta que Taehyung me habló sobre su desaparición y una foto que fue enviada a su madre mostrando la tortura por la que pasó.—Su voz sonaba mesurada, calmada, pero con seriedad.—No te quiero mentir, yo pasé por alto esa mancha de sangre que encontré en ti y cuando cambiaste de ropa, tomé todas las prendas que te sacaste y las lavé todas las veces posibles. Sabía que hiciste algo que jamás te hubieras atrevido a hacer de no haberme conocido y no pude alzar la voz y pedirte que no lo hagas, aun cuando al contarte lo que me pasó, tus ojos me decían que eras capaz de hacer muchas cosas. Todo esto me hizo llevar una carga en la espalda porque fui yo quien no puso un freno a tu impulsividad, en cambio, me sentí protegido y me aferré más a ti.—La piel se le erizó al sentir la mano del contrario sobre su hombro.—Aunque no puedes culparme, de haber conocido tantos hombres que lo tenían todo y solo querían comprar mi tiempo por horas, tú siendo alguien sin riquezas arriesgaste tu libertad por mí y perdí la cabeza, pero comencé a temerte también porque no sabía de qué serías capaz con el tiempo y estaba seguro de que yo nunca podría detenerte porque simplemente no iba a querer hacerlo.

—Jimin, lo siento. Sé lo que hice y no tienes que culparte por eso, si tengo que pagar por mi error...

—¡No! No he venido por eso, no sé si Yoongi te lo dijo, pero ya hay alguien pagando por ese crimen y lo merece, él y Gunwoo merecen lo que les pasó.—declaró.—Ahora soy libre. En realidad soy libre hace más de un año gracias a la maestra, ella lo dejó explícito dentro de su testamento y me enteré estando internado en un hospital.—Los ojos del menor salieron de sus órbitas y el castaño se apresuró a continuar.—Solo me enfermé, es una larga historia que no vale la pena mencionar, pero he venido porque ese dinero estuvo durante todo ese tiempo esperando ser devuelto. Le pedí a Yoongi que te lo enviara, pero no quiso hacerlo, aunque al venir aquí pude comprobar que te encuentras bien y me siento feliz, también quiero que sepas que no sigo en ese lugar y que estoy haciendo cosas que me gustan. No sabía todo lo que podía hacer con una identificación.—rio acercándose a Jungkook, colocando la palma de su mano en su mejilla.—Quiero agradecerte por todo lo que me diste porque mi felicidad inició contigo y eso no va a cambiar, yo estoy bien y seguramente sabes que Taehyung está casado con tu amigo. Así que, ellos me cuidan bastante. 

Que tu cama sea mi hogarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora