Capitulo 30

272 19 0
                                    

Bela:

Doy la última calada de cigarrillo y me concentro en mi siguiente jugada, sabía que esto lo iba a ganar yo, tenía que ser de esa forma.

Por que si no lo era.....todos morirían.

–Debería de estar en un yate en el caribe y no aquí asechando como dos criminales–riñe Alaska.

–Vete entonces.

–No quiero, necesito sangre.

–Entonces cállate y concéntrate, Xavier está entrando al lugar.

–Puedo ver a Alex y Ronan desde esta posición.

–Ya lo se, por eso busque este lugar–suspiré ante lo obvio.

–Supongo que no saben que estás aquí.

–Creo que pasó mucho tiempo desde que me dejé gobernar por un hombre, y no comenzaré hacerlo ahora.

—Perdona que te lo diga Bela, pero si hay un hombre cero controlador es Alex–se quejó–el sabe que tienes secretos y aun así te ama y está contigo.

¿Me ama?.

–Déjate de idioteces Alaska, Alexander no me ama.

–Quiere que vivas con el, si eso no es parte de una prueba de amor no se que es.

–Hay parejas que viven juntas no veo el problema.

–Es que no solo irás tu, aquí también entra Lukas y yo al paquete y sabes lo que significa eso.

–Alaska...

–Que tendrás que contarle la verdad tarde o temprano.

–Quise hacerlo ayer–confieso–pero Ronan lo arruinó.

–Ha pasado un día, creo que aún tienes tiempo de decirle cuando todo esto termine.

–Eres la que siempre critica que soy muchas veces sensible, no entiendo este cambio de aptitud.

–Alex da buena vibra, créeme que si hubiese sido Ronan no lo acepto jamás.

–Por suerte tuya no me gustó Ronan, es demasiado prepotente para mi, terminaríamos matándonos a las semana.

–Y que sepas que para mi Alex está más bueno.

–Hey señorita cálmese–su sonrisa inocente saca a flote a la mía y me saca la lengua.

Era cierto, Ronan era hermoso a rabiar, pero Alexander era diferente, era un poco más alto y su cuerpo no estaba tan fornido como el de Ronan, pero su rostro era más dulce a la vista y eso me calentaba. El era más como uno de esos hombres que encuentras en la calle y miras dos veces para cerciorarte si te miro, pero te das cuenta que no fue así.

Lo que me gusta es lo que no todas pueden tener, y a Alexander no todas pueden tenerlo. En cambio a Ronan ya sabemos como es de picaflor; Pero aún con esos pensamientos, seguía teniendo el
miedo de decirle la verdad a Alexander y abrirme con el, por que aunque quiero decírselo aún no se me olvida como mi hermana mato al papá de Elena, a su mejor amigo y un sin número de personas más.

No quiero reconocerlo pero estoy enamorada de Alexander, lo amo como a uno de los míos y tengo terror que se fuera de mi vida cuando me había costado tanto entregarme a él.

–Esto se está tardando demasiado.

–Cálmate_•–pasan unos segundos y Xavier al fin llega con sus hombres y comienza hablaron con uno de los cabecillas de este complot. Nadie se mueve, no era el momento para la acción, necesitábamos acabar con cualquier posible amenaza.

Entre el amor y el deber #3. [+21]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora