Especial maratón. 1/4. Por qué no me
gustan los números impares.Después de hablar con Zhisu, Kexing y Huaisang, salí de esa carpa.
— Ya está bien, A-Cheng — hablé cuando lo vi — Ya le quitaron los clavos, ya está mejor — le sonreí.
Después de eso, me dirigí a mi carpa, y suspiré.
Después de un año, me animaré a verme al espejo. Por lo que me paré frente a ese gran espejo y quite mis túnica superiores, mirando al suelo.
Respiré hondo y mire al frente, viendo las cicatrices y mordidas, las mordías ya no eran tan visibles, pero las cicatrices...
Tendré que hablar con Wen Qing... Pensé.
— ¿Quién te hizo esto? — la voz grave, mostrando el enojo de Xichen, me hizo saltar en mi lugar.
— Xichen — mi voz tembló y me cubrí con mis túnicas, volteando a verlo.
Sus ojos color ámbar, se volvieron dorados, brillaban. Su lado lambda salió a la luz, podía ver copos de nieve en el aire y hacia más frío.
— ¿Quién fue? — repitió Xichen, caminando hacia mi.
Pude ver un camino de hielo por donde pisaba Xichen, temblé de frío.
— Esto... yo... — mordí mi labio — Te lo iba a contar... pero tenía miedo... —.
— ¿Miedo? — frunció el ceño — ¿Miedo de que? —.
Un nudo apareció en mi garganta, pase saliva para tratar de deshacerlo.
— De... — carraspeé — De tu reacción... —.
Había algo que a los Dseta los caracterizaba, según lo que dice Wen Qing. Los Dseta, se vuelven sumisos y temerosos ante un Lambda, y más, si son sus destinados. O algo así dijo...
Xichen dejó salir su aroma, tratando de tranquilizarse. Yo, caí al suelo de rodillas, sentía una lagrimas salir de mis ojos.
Se suponía que yo le diría... yo no quería que viera las cicatrices y mordidas de esta forma... Pensé Debí poner un talismán...
Escuche a Xichen respirar hondo — ¿Y bien... mi linda AnAn...? — preguntó suave, arrodillándose frente a mi.
— ¿Te enojarás conmigo? — pregunté, insegura.
— No, AnAn — los copos desaparecieron y el, por fin sonrió — Solo me enojare con los que te hicieron esto... —.
Me mordí el labio y recordé.
— ¿Y si Xichen llega a ver mis cicatrices? — pregunté.
— Tendrás que calmarte en ese momento, He'ian... — respondió A-Yao — Xichen es tu prometido y tu destinado... él entenderá... — me tranquilizó el.
ESTÁS LEYENDO
RENACIENDO COMO UN JIANG.
FantasySolo pondré, esta es la historia de como yo, Alister, una chica de lo más normal, murió y renació en un mundo totalmente diferente. Ya se, ya se. Algo cliché, pero esta es un historia donde todo es como yo quise que pasara en la novela original, te...