"Uno puede dar lo que no tiene.
Por ejemplo; una persona puede
dar felicidad y no ser feliz, puede
dar miedo y no estar aterrada y
puede dar sabiduría y no tenerla.
Todo es tan misterioso
en este mundo..."- Jorge Luis Borges -
Y como me llamo Samantha Rizzo cumplo con mi palabra.
Estoy aquí en el ascensor subiendo al área de oncología.
Estoy nerviosa.
No soy buena en esto de socializar y estar rodeada de gente.
Por lo menos tengo mi celular y dinero para comprarme un chocolate cuando encuentre una máquina expendedora.
En el transcurso de unos segundos las puertas se abren dándome paso al amplio pasillo blanco.
Doy unos pasos encontrandome con el puesto de secretaria vacío, donde tendría que estar por lo menos una enfermedad.
Puede que haiga pasado una emergencia.
Pero eso me quita mi única manera de llegar a la área de diversión de los niños.
Ya llegué muy lejos, no me voy a devolver.
Decido seguir por mi cuenta.
Me adentró en uno de los pasillos que están llenos de puertas, seguramente son las habitaciones de los pacientes.
Camino por unos minutos buscando carteles y leyendo los que encuentro por las paredes para orientarme.
Cuando me adentró más en el pasillo puedo escuchar unos gritos.
Me detengo enfrente de la puerta de la habitación de donde provienen los gritos.
Pienso que seria lo mejor seguir adelante y no meterme en cosas que no son de mi importancia pero por otra parte la curiosidad me carcome.
La curiosidad gana, así que me acerco más a la puerta para poder escuchar.
Reviso el pasillo, no hay nadie que me encuentre averiguando.
- ¡Es como si no te importará! ¡Lo te lo tomas enserio! - grita un voz femenina.
- ¡Emili entiende lo de una vez por todas no eres mi madre! ¡Estoy muy grande para que me des órdenes y me vengas a prohibir cosas! - escucho gritar la voz de Ethan.
- ¿Ethan?, ¿Aquí en oncología? - pienso.
A mi mente se me viene la imagen de la primera vez que lo vi, pálido con muchas ojeras, bajo de peso.
Mi mente viaja a la vez que lo vi cuando tuve la pelea con la máquina expendedora, en el momento que la tos la fea lo atacó de repente.
Ethan está enfermo, ese pensamiento me pone toda la piel de gallina.
Yo era consiente de que estaba enfermo porque era obvio estando hospitalizado, pero nunca me pasó por la mente que era por algo tan grave.
Los gritos me sacan de mis pensamientos.
- ¡Si eres muy mayor demuestra lo, deja de comportarte como un niño! ¡Toma tus responsabilidades! ¡Si no querés ser tratado como un niño pues... deja de comportarte como uno! ¡Es como si no fueras consciente de lo grave que esa la situación y me cansé, me cansé de estar detrás de ti y tu cómo si nada, como si nada te importará! - grita y en un momento su voz se quiebra.
- ¡¿Que no se lo grave que es?! ¡Emili es mi puta vida que está en juego, soy muy consciente de la enfermedad que me ataca, contra que la lucho día a día, no eres tú la que sufre todos los terribles síntomas, todo el sufrimiento que eso pasa! ¡Si estás cansada, pues vete, nadie te tiene aquí obligada! ¡Yo pensaba que estás aquí por voluntad! ¡Pero veo que no es así! ¡VETE! - grita.
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🦋 𝓤𝓷𝓪 𝓝𝓾𝓮𝓿𝓪 𝓞𝓹𝓸𝓻𝓽𝓾𝓷𝓲𝓭𝓪𝓭 🦋 [#PGP2024]
Novela Juvenil🦋 Samantha harta de vivir en el pozo de oscuridad llamado vida, se rinde y cae en las garras de lo que dicen las voces en su cabeza intenta suicidarse, fallando en el intento conoce a Ethan un chico que lucha contra el cáncer y le demostrará a ella...