There Is A Light - Evan Peters (TERMINADA)

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Narra melissa

Estaba de nuevo en el trabajo, y habia quedado con andy de ir al parque después de que saliera, no había salido con ella, no niego que estuve muy enojada, pero es mi amiga y no merece que la trate así.

Ya estaba un poco aburrida de esperar que evan regrese al camper para arreglarlo, asi que sali de ahi para observar como hacian su trabajo todos.

Quizas si no amara tanto lo que hago, habría sido una actriz, pero claro no seria tan buena como evan.

Y evan...no formaba aún mis palabras para poder hablar con el bien, por que desde ese dia que por cierto ya habia pasado una semana, y ha sido eterna, no hemos hablado casi nada, solo nos damos los buenos días.

Y max sigue insistente por una respuesta, la cual seguira esperando.

Como sea, me quedé un rato viendo como seguidas veces evan se comenzaba a reir por algo que decía mal o se equivocaba.

Tiene una hermosa sonrisa.

Cuando terminó de hacer esa escena se acercó a mi.
Tal vez el daría el primer paso en hablarme para arreglar las cosas.

- Hola - dijo este sonriendome de forma noble.

- Hola - le contesté un tanto nerviosa. A este punto probablemente evan ya se había olvidado de lo ocurrido.

- Escuchaste que nos darán vacaciones? Dos semanas, podrás ir a ver a tus padres. - explicó evan

No estaba enterada, pero me alegraba aquello, podia llevarme conmigo a andy y abandonarla ahi.

- No habia escuchado nada al respecto. Pero gracias por decirme. - dije abrazandolo.

Realmente necesitaba un abrazo de el, y era el momento correcto.

- Melisaa, yo...

Evan estuvo apunto de hablar pero lo interrumpí

- no hables. - dije aún abrazándolo - se que nos comenzamos a sentir incomodos y a alejarnos, no hagamos eso. Por favor. - dije esta vez ya quedando frente a el.

- Te lo prometo - dijo con una sonrisa debil.

Si por mi fuera lo besaría, pero sería un poco extraño ya que no hemos tenido ningún acercamiento durante días.

- Y vendrá de nuevo max por ti? - preguntó evan caminando junto a mi al camper.

Entonces si notó que el venia a buscarme para irnos juntos al hotel.

- No, le pedí que no viniera. - ambos nos largamos a reír

Ya necesitaba reirme con evan, los chistes de max eran buenos, pero se volvían repetitivos.

- Si no te molesta...compraré unas donas, dos capuccinos y nos sentamos en el banco que esta al lado de la entrada al hotel. - propuso este de manera agradable.

Ese panorama me encantaba, pero mas me encantaba el saber que quien me lo había propuesto era el chico del cual me interesaba. Y no de max...

- Bueno, aceptó. Espero traigas tu chaleco por que allá afuera esta haciendo demasiado frío.

- traje como tres...dos qué traigo puestos, y el otro por si acaso.

Evan y yo nos sonreimos al mismo tiempo, y comenzamos a caminar en busca del lugar donde venden las donas.

Que por cierto, eran mis favoritas, a este punto evan ya lo ha de saber.

Evan pago, y a pesar de que yo insistiera, el sin problemas lo hizo.
Llegamos hasta el banco y nos sentamos.

Estar aqui es como una nube de recuerdos...aqui nos besamos, y aqui mismo nos dejamos de hablar. A pesar de no haber pasado mucho tiempo yo lo creía eterno.

Evan me contaba todo lo que ha hecho desde que yo le deje de hablar, por que incluso hasta lo recalco "Melissa, tu me dejaste de hablar". Pero nunca tocamos el tema del beso.

En poco rato vimos como andy llegaba al hotel y para nuestra mala suerte igual max.
Seguro se encontraron por ahi y vinieron juntos.

Sé acercaron a donde nos encontrábamos creando un silencio incómodo.

- Melissa! Evan! Qué gusto que esten aqui, estabamos hablando, que sería buena idea que los cuatro vayamos a cenar en estos dias, como si fueramos dos parejas. - habló andy.

Yo comence a reirme por lo idiota que sonaba aquella propuesta.

- Pero evan y yo no somos novios, y ustedes tampoco... de hecho nadie de aqui lo es. - aclare.

- No...se refiere a, tu conmigo - explicó max. - y ella con evan.

Yo me quedé sin decir absolutamente nada, volteé a ver a evan quien tampoco articulaba ni una sola palabra.

- Vamos! Será divertido - insistió andy.

- Tengo mucho trabajo - mintio evan, se le notaba. Incluso yo tampoco quiero ir.

- Se acercan las vacaciones y pretendemos trabajar duro, tal vez lleguemos muy tarde - menti.

- entonces pasaremos por ambos, o no max? - andy le dio un codazo a max, quien en cuestión de segundos acepto.

Parecía que andy aprovechaba cada momento para intentar algo con evan, y se notaba a metros.

Es mi amiga, pero creo que ella se ha dado cuenta de lo poco que siento por evan.

- Habría que pensar en un dia - dijo evan sin ninguna esperanza.

- Por supuesto. Entonces nos mandamos mensajes, ya tienes mi numero? - preguntó andy observando a evan, quien negó rotundamente. - que melissa te lo pase, debo hacer algunas cosas. Adiós.

No sabía si odiarla o...odiarla.

Qué pretende?

Evan y yo no somos nada, pero creo que se nota que me gusta cuando le hablo de el a andy. Es como si le diera igual lo que yo opinó y tratara de hacer que el camino de evan este libre para ella lanzarse.

Aún que no debo de pensar asi, tal vez son "amigos?".

- Melissa...- max se quedo frente a nosotros esperando que evan se fuera, este me miro de reojo.

- Por supuesto. - dijo evan levantándose. - Tengo...algo que hacer. - evan no dijo nada mas y entro sl hotel dejandome ahí afuera, con la dona en mi mano y tratando de decirle que no se fuera, pero max se sento junto a mi.

- Ahora que? - pregunté un poco fastidiada.

- Haz pensado lo que te dije? Escucha melissa, yo voy enserio contigo, ademas creo que eres la unica que me entiende. - max volvio a insistir.

- Max de verdad lo siento, pero no puedo ser tu novia. Mira...creo que no somos compatibles en ningún aspecto, a ti te gusta el naranja y a mi el azul...no encajamos. - dije ya irritada. - Aceptare la salida de amigos, pero es solo eso. Amigos.

Me levanté del banco y camine en dirección al hotel, supuse que evan ya estaba en su departamento. Asi que decidida lo fui a buscar.

Narra evan

Entre al departamento un tanto enojado, no por el hecho de que andy la amiga de melissa nos interrumpiera, sino que a max no le importó correrme de donde yo había llegado primero, ¿cual era su urgencia?.

Ahora me sentía un tanto mal por que la deje sola, capaz ella no quería quedarse con el.

Debia ir a darle una mano al igual que ella lo hacia conmigo.
Yo la necesitaba y todo este tiempo la extrañé.

Tome la tarjeta del departamento y abri la puerta encontrandome con melissa detras de esta con un puño alzado, dandome a entender que iba a tocar la puerta.

- Melissa? ¿Qué haces aquí? - pregunté confundido.

Era mas que obvio que quería terminarse las donas, por que traía la charola con estás dentro.

- Las donas no se terminan solas. - ella sonrió levemente.
Hice que pasara y realmente me sentía bien el saber que ella también me iba a buscar.

Quizas no voy tan mal con ella como pensé.