"Y si estoy viva por qué me siento tan muerta"
Mis dedos se manchan de sangre en cuanto tomo la rosa entre mis manos. Analis tiene los ojos muy abiertos y siento desde aquí lo nerviosa que está.
—Como sea una broma de tu hermana la voy a matar.
—Mejor llamamos a la policía.
No hago caso a sus palabras, me acerco y la puerta estaba abierta, esto cada vez me gusta menos. Entro y no veo nada debido a la oscuridad, mi amiga está sujeta a mi antebrazo.
El suelo bajo mis zapatos está resbaloso, toco la pared hasta dar con el interruptor y lo enciendo iluminando todo el salón.
Analis suelta un chillido y yo bajo la cabeza para encontrarme el cuerpo de mi padre sin vida. Las paredes están manchadas de sangre, todo es un caos y yo estoy intentando respirar mientras mi visión se nubla.
—Estoy llamando a la policía, ambulancia y bomberos —suelta Analis entrando en un ataque de pánico.
Me lanzó escaleras arribas, la puerta de mi habitación está abierta y sobre mi cama el edredón está cubierto de sangre, tiro de él provocando que la cabeza de Analía caiga al suelo y su cuerpo sin vida quede sobre mi cama.
Esta debería ser yo.
Yo, tendría que estar muerta.
Sentí a Analis corriendo y salí al pasillo.
—No entres, por favor —las lágrimas se deslizan por mis mejillas.
—¿Es mi hermana verdad? Dime la verdad, como está ella.
—Quedate aquí por favor.
Mamá.
Abro la otra puerta y ella también está muerta, tiene el estómago abierto y está sentada con su libro en la mano.
Pierdo todas mis fuerzas y caigo arrodillada al piso gritando. Mis pulmones se quedan sin aire y no hago más que llorar. A lo lejos se escucha la sirena de las patrullas.
Todo es un caos.
Me remuevo incómoda, estoy sudada, quiero abrir los ojos, lo intento, pero no puedo.
—¡Roma! —siento como me mueven. Unas uñas se clavan en mis hombros— ¡Abre los ojos, es un sueño! Estoy aquí contigo. Todo está bien.
Me siento en la cama. Estoy agitada y llorando.
Analis me observa en silencio.
—Volviste a soñar con aquella noche —le hago un lado y se sienta a abrazarme— Tranquila ya pasó.
Hace dos años que encontré una rosa blanca manchada de sangre en la puerta de mi casa y todas las noches tengo el mismo sueño, mis padres y mi amiga muerta.
Lo peor es que todos me dicen que esté tranquila, pero soy la única sobreviviente de un asesino en serie que sigue rondando por los alrededores, porque aún no han dado con él y en las noticias solo está atacando pueblos vecinos.
Cómo si algo lo mantuviera aquí.
Y yo creo que soy su asunto pendiente. Ese algo soy yo.
—Voy a darme una ducha —susurro y recojo mi cabello.
—Vale.
Al no tener ningún familiar cercano me quedé viviendo con la familia de Analis que me han tratado como una hija más a pesar de que por mi culpa Analia está muerta.
ESTÁS LEYENDO
Acaba Conmigo ✓
Mystery / ThrillerAl pueblo llegaría un asesino, uno que se acercaba cada vez más, como una sombra que se cierne sobre la luz. Poco se sabía de él, excepto que dejaba un rastro macabro: rosas blancas manchadas con la sangre de sus víctimas. Si alguna vez te encuentra...