"Te imaginé tocándome y ahora me siento una mierda porque lo disfruté como nada en esta vida"
—¿Duro o suave?
—Puedes empezar suave y terminar duro —muerdo mi labio—. O duro y terminar suave, no me quejo. Acaba conmigo —dije en voz baja y mordí mi labio.
—¿Te molesta si pido que te arrodilles nuevamente? —pasó las manos por su oscuro cabello.
—Para no ser Dios, te gusta que te recen bastante —bromeo y paso salvia cuando me encuentro con el brillo de sus ojos.
—No quiero que me reces precisamente.
—¿Qué quieres exactamente? —ronronee mientras me arrodillaba en el suelo y recogía mi cabello en una coleta.
—¿De veras tengo que decirlo? —se humedeció los labios con ayuda de su lengua.
—Tienes que decirlo —aseguré sonriente.
—Es que me gusta eso... y más me gusta cuando eres tú quien me hace eso —murmuró como niño pequeño y me reí de su nerviosismo.
—En otras palabras, quieres mi boca en tu polla y que...
—¡Roma! —me gritan—. ¿Qué carajos haces? Por favor, menuda película porno tienes montada aquí. Solo te falta el calvo.
Abro los ojos de golpe y me encuentro a Analis horrorizada. Casi me atraganto, cuando me doy cuenta de que tengo un plátano llegando a mi garganta y mi cabeza perdida en el limbo.
—Me preocupa tu salud mental —se burla y mis mejillas se encienden—. ¿Qué haces con la pobre banana?
Dejo el plátano en la encimera y la miro con vergüenza.
—¿En qué carajos estaba pensando? —bramo—. Solamente estaba comiendo y recordé que...
—Eres una pequeña pervertida —se lanza sobre mí y me hace cosquillas—. Yo quiero un flashback así de erótico.
—Empieza por B, termina con Black y yo follando.
—¡No me lo puedo creer! —corre hasta donde estoy y me abraza con fuerzas—. Ya era hora. ¿Dime cómo te fue? Hablemos de centímetros, digo. Sentimientos. ¡Oh por Dios! Es como si me la hubiesen metido a mí, pero no él, por supuesto.
—Respira por favor.
Pongo los ojos en blanco, aunque su entusiasmo me contagia y termino sonriendo.
—Te daré todos los detalles —le guiño un ojo y me tira un beso en respuesta—, pero respira, si.
—¿Te parece si vamos a la cafetería? —me propone.
—Si, definitivamente necesito un café.
Subo en busca de mi teléfono y me encuentro con algunos mensajes sin leer, junto a una llamada perdida. Me siento en la cama y abro el primer mensaje.
Roma, siento que últimamente nuestras conversaciones van decayendo.
Tengo que confesar que te extrañaba.
Aprieto mis labios y sigo con el otro mensaje.
¿Qué debo hacer para tener tu atención? ¿Te apetece flores blancas con un poco de sangre? Estoy dispuesto a darte todo.
Le respondo directamente.
Irte a la mierda, eso deberías hacer.
Reviso la llamada y es de Jay, sinceramente no he hablado con él. Estoy evitándole porque la verdad ya no quiero nada con él y le debo una explicación.
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Acaba Conmigo ✓
Mystery / ThrillerAl pueblo llegaría un asesino, uno que se acercaba cada vez más, como una sombra que se cierne sobre la luz. Poco se sabía de él, excepto que dejaba un rastro macabro: rosas blancas manchadas con la sangre de sus víctimas. Si alguna vez te encuentra...