El amor suele ser egoísta.

121 30 3
                                    


[ Capítulo 16 ]




- ¡Señorita! ¡Mi señorita!

Una chica baja y bonita con un par de cuernos y ojos negros corría por el palacio real de la familia Zhao hacia la habitación de la princesa Zhao Liying. Levantaba el faldón de su túnica para ir más a prisa y entró sin recato al cuarto de baño.

- ¿Qué quieres? ¿Por qué gritas tanto, no ves que estoy ocupada? - estaba dentro de una bañera con flores de loto y agua caliente, su largo cabello también bajo el agua y los ojos cerrados, claramente fruncidos por haber sido interrumpida en su meditación.

- El Emperador está esperando por usted en la entrada.

- ¿Shufu? - abrió los ojos y volteó para mirar a la chica, la cual bajó la cabeza con un sonrojo.

- Sí, mi señorita.

- ¿Es algo importante? - la chica iba a hablar, pero Liying interrumpió - No, si vino aquí personalmente antes de que me presentara ante él, debe serlo.- se puso de pie y el agua chapoteó, dejando su figura desnuda y hermosa a completa vista. La mujer demonio se sonrojó más y se volteó. Al no sentir nada, la castaña se dio la vuelta - ¿Qué te pasa? ¿Por qué no me traes mi túnica?

- Umm, sí, de inmediato - caminó hasta el colgador y tomó una túnica blanca interior, acercándosela, pero sin abrir los ojos.

Liying no prestó atención y se la colocó, saliendo de la bañera y yendo rauda hasta la habitación para terminar de arreglarse. Colocó dos túnicas más luego de secarse un poco, tomando su cabello en un moño alto y poniendo solo un adorno de jade para completar y estar presentable para su tío. Luego fue hasta el salón principal seguida por la muchacha que cargaba su espada como le había dicho antes de salir.

- Shufu - saludó con una reverencia cuando entró al salón y vio a su tío esperando mientras veía un cuadro pintado a mano. Al escucharla se volteó y sonrió suavemente.

- A-Ying.

- Shufu, esta sobrina suya está feliz de verlo - sonrió también.

- No tenias que apresurarte tanto - se acercó y acarició su cabello - Aún está húmedo, deberías secarlo.

Ella rió - Shufu, los demonios no nos enfermamos casi nunca, estaré bien. Más que eso, ¿Hay algo malo? ¿A qué debo su visita?

- Nada muy malo, de momento. Hubo otra pequeña brecha en la matriz divisora entre nuestros mundos, me gustaría que fueras y la arreglaras otra vez.

Los ojos de Liying brillaron con felicidad contenida que no pasó desapercibida para su tío - Iré. De hecho, puedo irme ahora mismo.

YanLuo rió - ¿No estás muy emocionada de ver a ese primo tuyo otra vez?

- Ah... - ella se sonrojó un poco y mordió el interior de sus mejillas - No es que quiera verlo, solo... estoy aburrida y no tengo nada que hacer de momento aquí, así que...

Liying no podía decirle a su tío que en realidad, la razón por la que tenia ganas de volver está vez al mundo humano, no era por Yibo si no por cierta chica tonta y bonita. 

Él la miró y le dio un golpecito en la nariz - Si quieres irte ahora, puedes hacerlo. Entre antes se vuelva a reparar es mejor.

- Iré a hacer un morral - se dio la vuelta para correr a su cuarto.

- A-Ying.

- ¿Mm? - se detuvo y volvió a mirar a su tío que nuevamente miraba el cuadro en la pared con sus manos tras su espalda.

¿Qué tal si reescribimos las estrellas?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora