Palacio del norte.

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[ Capítulo 63 ]





Había una brisa húmeda cuando Xiao Zhan comenzó a recuperar la conciencia después de pasar haciendo el amor entre una cama de flores y el cuerpo caliente de un demonio que lo abusó con su violenta pasión hasta que lo hizo desmayar.

Aunque recordaba lo mucho que se habían dejado llevar, no sentía ningún tipo de incomodidad, de hecho, se sentía limpio y vestido, acurrucado sobre algo blando y había una capa caliente de ropa sobre su cuerpo. También, sentía la respiración calmada y caliente de la gran bestia en donde estaba apoyado y no necesitó pensarlo mucho para darse cuenta que en algún momento, Yibo lo había limpiado, vestido y se había convertido nuevamente en un dragón para que durmiera cómodo totalmente apoyado en él.

Cuando abrió los ojos y pudo fijarse más en su entorno, se dio cuenta de que descansaba justo sobre la escama inversa en el cuello de Yibo, el lugar más sensible y blando de aquel cuerpo cubierto de duras escamas negras. Se sentó y sintió el peso de una XueHuang recostada entre sus brazos y el de XueYu aun encogido y metido en su pecho, probablemente se metieron ahí cuando descansaba. Solo cuando se sentó del todo, bostezó y acomodó a XueHuang sobre sus piernas, Yibo movió su cabeza y lo miró con esos enormes ojos oscuros.

"Buen día, Zhan-Ge."

- Buen día, Yibo - sonrió y alzó sus manos para acariciar su hocico, casi escuchando ronronear a ese mimado dragón entre sus palmas - ¿Descansaste bien?

"Mn, muy bien, ¿qué tal tú?"

- Bien, aunque no recuerdo cuando me quedé dormido - se sonrojó con el recuerdo muy vivo de todo lo que habían hecho la noche anterior.

Yibo rió y el dragón se difuminó en una niebla negra verdacea, dejando solo a un hombre guapo que lo abrazó de inmediato y lo siguió recargando en su cuerpo.

- Mi culpa.

- Por supuesto - le dio un pequeño golpe mientras se dejaba abrazar y escuchaba esa risa extraña de su Yibo, el cual tomó su mentón y le dio un pequeño beso.

- ¿Hambre?

- Mucha. ¿Aún nos queda algo de lo que trajimos con nosotros?

- Síp, alcanza para hoy, pero deberemos estar en el palacio del norte antes de la cena. Ya envié una mariposa para avisar de nuestra visita.

- ¿Aún está muy lejos?

- Sí, pero en mi forma de dragón solo nos tomará un medio día llegar.

- ¿Y está bien? ¿No es un gasto de energía demoniaca para ti? ¿No es cansador?

- Para nada, es mi forma más poderosa de todos modos y mientras estemos en el reino demoniaco hay energía compatible a donde quiera que vaya.

- ¿Puedes usar esta forma en otros reinos?

- Puedo, pero no por mucho tiempo, sobre todo en el mundo humano, por las barreras, mi poder es más limitado.

- Imagino eso pasa con todo demonio que va ahí. 

- Los pocos que podemos ir, sí.

- ¿No será duro para ti permanecer tantos años conmigo ahí si tus poderes sufren un desgaste?

- No en mi caso, porque iré como un demonio pactante de nuevo, al tener esta condición mis poderes de guerrero solo se limitan no se pierden.

- Entiendo, eso me alivia.

¿Qué tal si reescribimos las estrellas?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora