Mi Lugar Seguro 🔞

Epílogo

                             Carla

                    Dos años después

Salí de mi habitación tras terminar de grabar un video de maquillaje para YouTube. Sí, hace un tiempo había decidido hacer videos, ya que mis seguidores en Instagram por alguna razón les gustaba saber que hacía en mi día a día, que productos utilizaba para maquillarme, donde compraba mi ropa, que perfumes prefería. Empecé solo subiendo fotos y de pronto los seguidores subieron y querían saber más de mi.

Ahora tenía trescientos mil seguidores en Instagram y cien mil suscriptores en YouTube. Había descubierto que de hecho si me gustaba hacer vídeos maquillandome, contarle a mis seguidores que productos prefería o eran mejores y hacer blogs sobre mi día, que al parecer a mis seguidores les encantaba porque era de los vídeos con más vistas. Incluso había empezado a monetizar en YouTube y algunas marcas me pagaban para que mencionara sus productos en mis videos.

Encontré a Madison desparramada en el sofá engullendo comida poco saludable mientras veía una serie, algunas cosas no cambiaban nunca.

—Pensé que saldrías con Justin.
—Madison ahora era novia del primo de mi novio. Justin y ella hacían una pareja genial y yo los amaba juntos, Madison había cambiado mucho, ahora le gustaba salir, compartía más tiempo fuera con nosotros y hasta había ido a algunas fiestas, aunque seguían sin gustarle demasiado.

—Si saldremos, solo que más tarde ¿tu que harás hoy? —me preguntó mientras metía la mano en una bolsa de cheetos.

—No haré nada, no estoy de humor.
—ella dejó de mirar el televisor para mirarme a mi.

—¿Que está mal? Y no digas que nada porque te conozco.

—Creo que ya Jason se cansó de mi.
—solté sin más.

—¿Por qué piensas eso? ¿Sigue estando raro?

Jason llevaba semanas muy raro conmigo, parecía lejano y yo comenzaba a pensar que ya no me quería, no encontraba otra razón para que estuviera tan distante conmigo.

—Si, sigue estando raro y actúa como si me escondiera algo, tengo miedo, no es que no pueda vivir sin él ni nada por el estilo, pero lo amo y me dolería mucho saber que me ha dejado de amar.

Madison se acerca y me envuelve en un abrazo.

—No te apresures, no creo que te haya dejado de amar, tal vez le preocupa algo ¿por qué no le preguntas que le pasa?

—Por qué me muero de miedo de que me diga que ya no me ama.

—Pues irás y le dirás lo que sientes y estoy segura que todo se aclarará, pero vas a dejar de especular, especular hace mal.

—De acuerdo, tienes razón, le diré que venga hoy y hablaré con él.

—Esa es mi chica, verás que seguro no es nada malo.

—Eso espero.

Tomé mi móvil y le envié un mensaje preguntándole si nos podíamos ver hoy, a lo que él solo respondió con un simple «si» últimamente respondía con monosílabos cada que le hablaba. Y yo empezaba a enojarme.

Sabía que él estaba en casa de su madre, la visitaba a menudo. Después de que ella saliera de la clínica de rehabilitación, Jason había estado para ella acompañándola a ir a sus citas con la terapeuta y acompañándola a superar sus bajones. Superar una adicción no era cosa fácil, cada día era importante. Pero ella ya estaba libre del alcohol. Después que saliera de la clínica ella y yo habíamos cosechado una bonita relación. De hecho eramos algo parecidas, mi suegra era una rubia hermosa que no aparentaba para nada su edad, le gustaba ir de compras como a mi y tenía buenos gustos como yo, amaba ir de compras con ella. También mamá y ella se llevaban muy bien, incluso ambas han viajado para visitar a la otra.