𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝐗𝐗 "𝚕𝚊 𝚌𝚘𝚗𝚏𝚎𝚜𝚒𝚘𝚗 𝚍𝚎 𝙻𝚘𝚣𝚊𝚗𝚘".

2K 228 69
                                    

La mañana del día siguiente despertó primero a Ochoa. Suspiró para después inhalar el cabello de su omega. A pesar de que le encantaba su olor a caramelo, le encantó más la idea de que ahora este ya oliera a él. Lo había marcado con su olor.

Al ambos despertar decidieron tomar una ducha. A Messi le dolía ligeramente la cadera por la noche anterior, pero le habría valido completamente la pena.

Por cierto, había olvidado decirtelo... Lozano regresó conmigo también -Ochoa sonrió feliz al recordar la madrugada.-

Pinche Hirving, ¿por qué nunca revisas tu celular? -Ochoa corría rápidamente ya fuera del avión por el aeropuerto. Lozano pasó a su lado y lo empujó.

Cállate. Yo qué iba a saber que me mandaría mensaje. -Se quejó el omega de baja estatura.-.

Una vez fuera del hotel, tomaron un taxi que los llevaría hasta el hotel donde pasaría el maravilloso encuentro. Mientras los tórtolos se reencontraran, Lozano estaba rentando una habitación en el hotel nuevamente.

¿En serio? -respondió Messi sorprendido por el relato. Hirving era un excelente amigo.

Ochoa asintió. -Es que le gusta el chisme al wey... además, no tiene a qué regresar a México, quería quedarse más aquí en Qatar. Bueno, él y yo somos excelentes amigos... es como mi hermano.

Messi sonrió al ver lo bien que se expresaba su alfa de otro omega. Green flag. Aunque le dijo wey, ignoró esa parte.

Te creo que es un buen amigo. Me alegra que tengas a alguien como él. -Messi habló sinceramente. Ya no sentía celos por el omega mexicano, incluso le había tomado cierto cariño por haber cuidado a su alfa. Además de que era muy chistoso.


Hasta que te dignas a aparecer pinche Francisco Guillermo -Ochoa y Messi bajaron de la habitación para lograr encontrarse con Lozano.

Yo también te quiero Hirving -Ochoa dijo sarcásticamente. Hirving rodó sus ojos.

Ajá sí. ¡Hola Messi!, perdóname por no haber visto tu mensaje ayer más temprano, pero me hace muy feliz que vuelvan a estar juntos, a pesar de que Ochoa sea un pendejo, tú eres muy bueno. -La voz en Lozano que cambió la hablar con Messi le fastidió a Ochoa. ¿A él sí lo trata bien?, pensó.

¿Por qué estás tan enojado conmigo?, tú fuiste el que decidió regresar de chismoso. -Ahora los 3 se hallaban disfrutando de una caminata por el hotel para recorder los jardines donde se habrían encontrado los enamorados.

Porque... -Lozano se detuvo.- No, por nada. -Siguió caminando, entonces Messi entendió.

Pará... tenés algo, estás enamorado -esta confesión acertada, por cierto, hizo que Hirving de atragantara con el postre de Qatar que obligó a Ochoa a comprarle fuera del hotel. Este golpeó la espalda de su amigo omega para evitar que se ahogara.

... que dices... -recuperó el aire el más bajo.- Pff... eso... -pero la sonrisa falsa que había hecho se deshizo. Sorpresivamente golpeó el hombro de su amigo alfa quién se quejó agarrando dónde Lozano lo había golpeado. Messi evitó soltar una carcajada.

Qué te pasa Hirving, deja de pegarme -pero apenas sería el comienzo el regaño que le daría Lozano.

Cállate Francisco Guillermo, por tu culpa no pude estar con... ¡agh!, no mames... te odio -el omega estaba hecho una furia al recordar lo que sucedió en el avión el día antes.

● 𝐓𝐎𝐃𝐎 𝐏𝐎𝐑 𝐓𝐈 ● [𝙼𝚎𝚌𝚑𝚘𝚊 𝙾𝚖𝚎𝚐𝚊𝚟𝚎𝚛𝚜𝚎].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora