● 𝐓𝐎𝐃𝐎 𝐏𝐎𝐑 𝐓𝐈 ● [𝙼𝚎𝚌𝚑𝚘𝚊 𝙾𝚖𝚎𝚐𝚊𝚟𝚎𝚛𝚜𝚎].

𝑪𝑨𝑷𝑰𝑻𝑼𝑳𝑶 𝑿𝑳 "𝚛𝚎𝚜𝚞𝚕𝚝𝚊𝚍𝚘𝚜".

Scaloni...¿recuerdas que me dijiste que podía estar con Guille pero que no me embarazara?, es que... una cosa llevó a otra, y esa otra a otra y bueno... verás. Estoy embarazado -Lio sonrió con miedo al decirlo.

Hmm... no me convence mi amor-Ochoa acariciaba su barbilla.

Ambos estaban practicando cómo darle la noticia al director técnico del omega argentino en caso de que estuviera preñado. Lio suspiró acariciando su cabello con algo de desesperación. Era de noche, al día siguiente tendrían que ir por los resultados de ese test. El tiempo parecía ser eterno.

Bueno, dejemos de pensar en eso, mi dulce Lio, ¿quieres descansar?-Ochoa cuestionó aquello ya que veía que su omega estaba bostezando bastante. Eran las 11 de la noche.

Sí, solo que, me va a costar algo de trabajo poder dormir, me siento muy preocupado.-Messi se sentó sobre la cama. Pero nuevas náuseas lo atacaron antes de que pudiera pensarlo.

Ochoa lo acompañó hasta el baño para que vomitara por segunda vez en ese día.

Tranquilo, mi amor, estoy aquí -Ochoa acariciaba la espalda de Lio. Pronto este cesó su acción y con ella su mal estar.

Volvió a incorporarse con algo de dificultad, pero indiscutiblemente recibió ayuda de su alfa. Lio volvió a lavar su boca después de eso.

Yo voy a estar aquí al pendiente por si te sientes mal otra vez, recuerda que si sientes náuseas o pataditas me puedes decir-Lio rodó sus ojos riendo al escuchar lo que su alfa le había dicho. De alguna manera sus bromas comenzaban a hacerlo reir y lo hacían sentir tranquilo por pensar que no se quedaría solo.

Entonces ambos salieron del baño. Lio caminaba con normalidad, pero Ochoa estaba detrás de él cuidando cada paso que este hacía, hasta que se recostó sobre la cama.

Messi se recostó de lado. Abrazó con fuerza la sábana de la cama. Habían sucedido muchas cosas en esa cama, había dormido por primera vez con su alfa, el amor de su vida, en ella había llorado cuando sintió que lo perdía, pero también había cedido a su deseos carnales con él, y ahora estaba en ella dispuesto a dormir como de costumbre en esta, solo con la única diferencia de que al día siguiente sabría si su carrera se habría terminado, pero su vida en familia comenzaría... no quiso pensar más en eso, en cuanto sintió unos brazos con olor a café recién hecho que lo rodearon con amor y calidez por la espalda. Cerró sus ojos.

¿Me podés decir que me amas?-Lio susurró con sus ojos cerrados. Ochoa sonrió sobre el cuello de su omega. Dejó un beso en este antes de susurrar en su oído.

Te amo, Lio.- Ochoa tomó la mano de Messi para entrelazar sus dedos.-Te amo con toda mi vida, te amo con la misma intensidad con la que el sol brilla diariamente, te amo con todas las fuerzas que tengo.-Ochoa cerró sus ojos, realmente podía sentir cada palabra que le dedicaba a su omega.

Lio sonrió. Si estaba con Guillermo, todo estaría bien.

Creo... que ya- la hinchazón del nudo del alfa terminó. Con delicadeza salió de su omega. Tomó la mano del mismo hasta que lo guió a la cama donde ambos se sentaron.

Lozano se rodeo completamente con una sábana. Cruzó sus piernas. Edson hizo lo mismo, solo dejando al descubierto su pecho. Se sentó en la misma posición frente a Hirving.

Yo, anudé en ti...-Edson rompió el silencio entre ambos. Hirving estaba serio viéndolo. Por un momento creyó que este estaba molesto.

Me gustó mucho -susurró con timidez pero con una sonrisa el omega, al mismo tiempo en el que agachaba su mirada.

Edson suspiró aliviado.

¿No te molesta?-Hirving negó ante esa pregunta. Ambos sabían que el "riesgo" de embarazo después de eso era del casi 100%.

Quiero esperar lo que tenga que suceder. Si llego a quedar embarazado... me va a gustar llevar tus cachorros-Lozano sonrió. Entonces recordó lo que Messi le había contado.

Prometo que no te dejaré sólo.-Edson extendió sus brazos para que su omega se acomodara en ellos. Eso hizo.

Ya en los brazos de su alfa...

¡Por cierto!, hablando de eso... fui a ver a Messi-Lozano jugaba haciendo círculos en el pecho de Edson.-A mi ya sabes que no me gusta contar cosas ni ser chismoso... pero Messi me dijo que se hizo una prueba de embarazo porque tiene nauseas y cree que Memo lo dejó preñado.-Hirving contó aquella información sagrada con mucha fluidez y rapidez.

Edson se sorprendió. -Que... sorpresa, espero que resulte lo mejor para ambos, ¿no?-el alfa ni siquiera sabía qué decir.

Mjm... pero ya estoy cansado, ¿nos dormimos?, ya quiero regresar a México, en realidad no sé porque seguimos aquí, pudimos haber regresado desde hace mucho.-Hirving arrugó su nariz como de costumbre lo hacía.

Edson asintió riendo- pero entonces nos estaríamos perdiendo esto...el karaoke, el parque acuático... la avispa, ¡ouch!-se quejó ya que Hirving lo había golpeado con suavidad cuando mencionó esa parte traumática del caótico viaje.

Tienes razón. Bueno, ya no cuentes lo de la avispa que me da miedo... mejor vamos a dormir. Mañana esperemos a ver qué sucede...-y entonces ambos se recostaron sobre la cama para quedar frente a frente. Hirving acarició el rostro de su alfa con una sonrisa.

No voy a dejarte solo. Nunca. -Edson susurró antes de besar con suavidad los labios de su omega.

No quiero que lo hagas -respondió este antes de abrazarlo con fuerza y con amor.

Ochoa limpiaba sus sudadas manos en su pantalón. Messi estaba quieto y sin moverse sentado en aquella silla donde estuvo el día anterior explicándole al doctor sus sospechas.

Pronto este entró con un sobre en sus manos.

Aquí tiene.-Lio tomó con desespero aquel sobre. Su respiración se aceleró. De eso dependía todo su futuro, pero también el de Guillermo.

Ábrelo mi amor. -Ochoa miró con preocupación a Messi quién, una vez con el papel que diría los resultados en sus manos, se había detenido antes de abrirlo.

Lio suspiró. Era ahora o no sería nunca.

Abrió aquella hoja; la desdobló con miedo, entonces leyó el resultado...

negativo.

Messi sintió que volvió a la vida, a respirar, que su corazón volvió a latir; no estaba embarazado.

Ochoa releyó la hoja 3 veces, suspiró colocando la mano en su pecho, su tranquilidad regresó al leer que no le había arruinado el mundial a su omega.

Pero entonces, no entiendo, ¿por qué estaba vomitando tanto?-Lio guardó la hoja con los resultados. Tanto él como su alfa miraron al doctor.

Lo más probable es que usted tenga una infección en el estómago, ¿ha sentido temperatura?-Lio asintió a la pregunta del doctor.

Sí, me he sentido caliente -pero al escuchar eso, Ochoa hizo un ruido queriéndose reír. Lio lo miró inmediatamente, entonces Ochoa hizo una mueca para aguantar su risa.

Bueno, lo más probable es que haya comido o bebido algo que le hizo daño, le voy a recetar medicamentos que lo van a ayudar con las náuseas y con la temperatura. En 3 días máximo estará mejor.-El doctor empezó a hacer su trabajo ofreciendo una receta al omega.

Guille, amor no habrá más amor entre nosotros hasta que termine el mundial, si sabés a lo que me refiero-Lio caminaba junto a Ochoa, ambos tomados de la mano.

Entiendo, mi amor. Prometo que ya no voy a tocarte hasta que ganes-pero Guillermo rió al escuchar que Lio decía: "sí me podés tocar pero no termines dentro de mí".

Su omega era increíble.

Bueno, pero quiero que sepas que si el resultado hubiera sido "positivo", me hubiera quedado contigo. Quiero que de eso no te quede ninguna duda. -Ochoa miró de reojo a su omega que ya estaba sonriendo con calidez.

Lo sé. Creo que ya me estaba gustando la idea de estar embarazado de ti. Ahora quiero estarlo-Messi hizo un puchero con genuina melancolía. Su omega interior le demandaba estar preñado de su alfa.

Las cosas cambiarán en cuanto termines ganando la copa, mi dulce Lio. Te lo prometo -Ochoa besó el dorso de la mano de Messi con una sonrisa.

Tenía una gran idea.