● 𝐓𝐎𝐃𝐎 𝐏𝐎𝐑 𝐓𝐈 ● [𝙼𝚎𝚌𝚑𝚘𝚊 𝙾𝚖𝚎𝚐𝚊𝚟𝚎𝚛𝚜𝚎].

𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝑿𝑿𝐈 "𝚊𝚢𝚞𝚍𝚊 𝚎𝚗 𝚌𝚊𝚖𝚒𝚗𝚘".

Ochoa alcanzó a los dos omegas para decir dos simples palabras.

Ya vengo -y salió corriendo de regreso al hotel con bastante rapidez. Ambos lo miraron confundidos pero siguieron caminando y hablando.

Ochoa corrió hasta recorrer al otro lado del hotel, ahora, por dónde estaban las tiendas de regalos de este.

Sacó su celular y se dedicó a hacer una llamada. Llamó a su amigo Edson.

Mientras tanto, Hirving estaba tranquilamente hablando con el omega de su amigo, como si se conocieran de años. No se imaginaba lo que le sucedería gracias a Ochoa.

¡Hey!, Edson, amigo mío, ¿qué tal?- una vez atendido el celular en Mexico Guillermo sonrió.

Hola Memo, bien... ¿qué quieres?, estoy ocupado-Edson por su parte se hallaba conduciendo hacia su casa.

Nada importante en realidad... -Ochoa no sabía qué pretexto ponerle a su compañero, pero debía tener uno muy bueno para que empezaran a hablar de Hirving. Afortunadamente no tuvo que hacer nada porque sonrió victorioso agitando sus brazos al oír lo que acontinuación diría el alfa mexicano.

Oye y... ¿cómo está Hirving?, es que me dijo que se quedaría contigo, más te vale que lo estés cuidando bien, cabrón.

Ahí estaba, la gloriosa oportunidad. Ochoa dejó de sonreír e hizo una mueca simulando tristeza. Suspiró antes de decir.

No amigo, está mal... -aguantó la risa que quería soltar por la emoción, parecía un niño haciendo una broma.

Inmediatamente al oír eso, Edson se orilló en un espacio para poder hablar.

¿Qué le pasó?-su voz se oía preocupada. Ochoa siguió difamando a su colega omega quien en realidad de hallaba feliz mirando las flores con Messi.

Pues... yo regresé con Lio, ahora es mi omega pero... no sé, yo vi a Lozano muy triste sabes... él es muy alegre -demasiado, pensó Ochoa - pero lo veo apagado... además bueno, yo me voy a quedar en la habitación de Lio, y rentamos una que bueno... pobre de Hirving, es un omega usando una habitación sola... -Ochoa mordió su labio para canalizar su emoción. Logró su cometido.

No mames Guillermo, ¿cómo se te ocurre dejarlo sólo?... ¿siguen en el mismo hotel?...

Ochoa alejó su celular haciendo un "baile de victoria" raro, moviendo sus brazos y su piernas, en silencio. Aclaró su garganta y regresó a la llamada con el alfa preocupado por el omega.

Si, es el mismo, misma habitación... sabes una cosa, hoy noté más fuerte su olor a chocolate blanco... -hizo una pausa, sabía que era el favorito del alfa.- Creo que pronto llegará su celo... -y cubrió su boca aguantando reírse.

... -escuchó como el alfa al otro lado del teléfono aclaraba su garganta-... ¿está bien si llego mañana?, digo... no quisiera que Hirv... bueno, quiero ver los partidos, además me quedé con ganas de probar más platillos de ahí.

Ahuevo, eres un chingón Guillermo -pensó Ochoa e inmediatamente respondió con una sonrisa.

Me parece perfecto hay... postres deliciosos con chocolate blanco, ¿es tu favorito, no?, bueno, yo pasaré por ti mañana en cuanto llegues. Gracias por cuid..., digo, gracias por regresar a probar platillos de Qatar. Bueno, maneja con Cuidado Edsoncito, adiós.

Y ambos colgaron la llamada.

Ochoa suspiró victorioso. -Esto va por ti, Hirving.- Entonces salió a buscarlo a él y a su omega. Prepararía una sorpresa para Lozano.