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Capitulo Especial (XXXV) UN BREVE VISTAZO AL FUTURO

Este capítulo es un extra de este fic post trama. Es un pequeño regalo navideño para los lectores. Es un breve vistazo al futuro

Shen Yuan nunca tuvo muchas relaciones en su vida pasada, solo obtuvo dos besos de una chica mientras estaba en su época de esplendorosa juventud. Así que lidiar con esta trama de sentimientos y honestidad ha sido un proceso muy… revelador.

El amor requiere tiempo, esfuerzo y mucha, mucha comunicación.

Es por eso que se siente satisfecho  al descubrir aquellas cosas que son pequeñas en su vida pero sumamente importantes: son evidencia que ambos están avanzando.

Por ejemplo, Luo Binghe finalmente, finalmente ya no se inquieta cuando Shen Qingqiu se queda dormido ni debe desvelarse la mayor parte de la noche para comprobar si Shen Qingiu está respirando.  Así mismo, Shen Yuan ya no está comprobando todo el tiempo las venas espirituales de Luo Binghe y aminora su ansiedad cada vez que ve a su esposo desenvainar a Xi Mo.

Pero quizás la acción más importante es que ambos están aprendiendo a no estar juntos todo el tiempo. Después de todo, la dependencia absoluta no es algo saludable.

Realmente esto salió de manera inesperada, en una de esas noches en las que la pesadumbre de ambos suele llegar hasta sus camas, hablando entre susurros y abrazados. Porque a pesar del amor, de la lealtad y el apego también necesitan recordarse mutuamente que ambos son personas que pueden realizar sus propios méritos sin necesidad del otro. 

Así que hay un acuerdo: un día, un día sin la presencia del otro. 

Y con certeza Shen Qingqiu puede decir que esto está funcionando de maravilla, aunque   cada vez que tiene oportunidad mira de lejos a Binghe solo por curiosidad. 

Así que hoy, sin hacer ningún sonido se recarga en la puerta, solamente se queda ahí, contemplando al hombre que está sentado, estrujando el pincel con su pulgar, arruinándolo por completo.

Esa acción siempre la ha hecho Luo Binghe incluso desde su época como discípulo. Shen Yuan recuerda que a veces los informes de cacerías nocturnas y los avances de cultivo de los discípulos menores  tenían una caligrafía hermosa pero con bordes extraños por el maltrato del pincel, esa era la señal para saber que Luo Binghe había escrito eso y que estaba muy hastiado del papeleo.

Es una extraña manía, no importa cuantas veces Shen Yuan le advierta, él sigue haciendo lo mismo. 

Hay ocasiones donde el tedio llega a tal grado de obligar a Luo Binghe a tirar el pincel sin cuidado alguno cuando ve a Shizun, dejando todos sus pendientes a la deriva mientras toma las manos de Shen Qingqiu. A menudo sería Shen Yuan quien tendría que andar buscando debajo quién sabe dónde para encontrar, recoger y limpiar el pincel antes de ponerlo en un lugar seguro. 

De todas las cosas que Luo Binghe hace, quizás esta sea la más curiosa.

Shen Qingqiu recarga más su peso, observando trabajar a Luo Binghe. Hay un encanto que no puede disipar cada vez que lo ve así, en completa concentración: el rostro solemne con ese ligero ceño fruncido mientras lee diez líneas con un simple vistazo. Él deja de hostigar al pobre pincel con su pulgar para escribir instrucciones concisas y completas con absoluta seriedad. 

Shen Qingqiu retiene el suspiro. Cuando finalmente decide separarse de la pared y quizás ir a los jardines imperiales para leer un poco, escucha el suspiro de Luo Binghe.

Ah, su lotito negro está hastiado. 

Tal vez podrían desplazar su "día no juntos" otro día para animar a Binghe.

Cuando está a punto de entrar a la habitación se detiene al ver a Luo Binghe soltando el pincel y colocando dos dedos en su sien. No pasa más de dos segundos cuando una sonrisa se extiende por todo su rostro.