Yo te protegeré

7

Ji-su y Jae-Heon ya se encontraban en la entrada mientras que Hyun-soo y Mario apenas estaban recogiendo sus  cosas.

Les dejé la mitad de lo que conseguí--.dijo Mario.

Eres muy amable--.dijo la señora.

El señor Han nos dio asilo, así que pensé que era justo--.dijo el mientras acomodaba su machete a su cintura.

Gracias muchacho--.dijo Du-sik.

¿Te falta mucho?--.le preguntó Ji-su a Mario.

Ya estoy listo--.dijo el.

¿Seguro que van a estar bien?--.les  preguntó Du-sik.

No podemos seguir viviendo a costa de usted y hay que hacer algo--.dijo Ji-su.

Gracias por la comida--.dijo Mario.

Y por esto--.dijo Jae-Heon que tomaba un escudo improvisado.

Bueno el me dió una mano--.dijo Du-sik señalando a Mario.

Este estaba ayudando a Hyun-soo a preparar todo para luego ir con ellos pero en eso fueron detenidos por los niños.

Hyun-soo...Mario, volverán ¿Cierto?--.decia Yeong-su con voz temblorosa.

Ambos se quedaron viendo un momento pero al final terminaron asintiendo.

Será mejor que nos vayamos--.dijo Hyun-soo.

Los cuatro salieron de la casa del señor Han para luego ir hacia la primera planta.

El camino era tranquilo hasta el momento pero a la misma vez silencioso porque nadie había pronunciado ninguna palabra.

¡Esperen!--.dijo Ji-su.

Ahí vieron en el suelo el cuerpo de un hombre de la cual los pusieron alerta. En ello Mario se agachó a el para revisarlo.

Está tibio, acaba de fallecer hace poco--.dijo el.

Es la primera vez que me siento bien al ver un cadaver--.dijo Jae-Heon.

Al menos falleció siendo humano--.dijo Hyun-soo.

Descanse en Paz--.dijo Jae-Heon.

Ji-su se agachó a el para luego comenzar a revisarlo y sacar un paquete de galletas para luego lanzarselas a Mario.

Puedes lanzarlas si no las quieres--.dijo ella.

Que mala eres--.dijo Hyun-soo.

Lo soy y haria cualquier cosa para sobrevivir--.dijo Ji-su.

Mario le lanzo las galletas a Ji-su para luego ella las atrapara.

No seremos tus cómplices--.dijo Hyun-soo serio.

Hacen un buen equipo--.dijo Jae-Heon.

Siguieron avanzando pero cuando Mario y Hyun-soo iban a avanzar fueron tumbados por algo haciendo que salieran volando del barandal pero afortunadamente Mario se sostener de uno mientras pudo sostener a Hyun-soo.

Agarrate fuerte, trataré de subirte--.decia el mientras trataba de ayudar Hyun-soo.

Mario con toda su fuerza trata de que Hyun-soo pueda sostenerse y en eso llega Ji-su y Jae-Heon pero al momento en que trataban de subirlos pues Mario comenzó a resbalarse y en ello ambos cayeron.

Cayeron desde nueve pisos para luego ambos se estrellaran contra el suelo y Eun-Yun que se encontraba ahí, al verlos grito de horror por la escena.

El lugar parecía ser muy tranquilo y sobretodo es que el lugar se parecía al campo en dónde vivían sus abuelos.

Ahí se dió cuenta que se encontraba descalzo y de ahí miro a su alrededor hasta toparse con una figura de la cual estaba sentada cerca de la orilla de un río  entonces se acercó a ella.

Hola, ¿No te importa si me siento aquí?--.le preguntó amablemente.

De ahí se llevó la sorpresa de que era el mismo solo que el tenía los ojos completamente negros y además tenía una mirada que reflejaba miedo y tristeza.

N-No...No tengo problema--.respondio tímidamente.

Mario solo se sentó a lado de el mientras que se quedó mirando el río un momento, ya que su otro yo estaba nervioso al parecer.

¿Te gusta venir aquí?--.le preguntó suavemente.

El sonido del río me relaja y el aroma de la hierba también--.respondio un poco más tranquilo.

Es un lugar pacífico, hasta dan ganas de dormir una siesta debajo de un arbol--.comento Mario dando una sonrisa.

Es algo que me gusta hacer--.dijo el otro un poco sonrojado.

¿Porque estás asustado?--.le preguntó.

T-Tengo miedo de volverme en algo que solo provoca daño, que solo tenga deseos de matar--.dijo el nervioso.

Yo no pienso que te volverás así--.le dijo Mario.

¿Cómo es que estás tan seguro?--.decia un poco sorprendido.

Desde que me infecte ya me habrías convertido en algo terrorífico pero ambos tenemos una fuerte fuerza de voluntad...si trabajamos juntos podremos sobrevivir ante esto--.dijo Mario.

¿No me odias?--.dijo el.

¿Por qué debería odiarte?--.pregunto extrañado.

Porque yo soy el causante de que te pasen estas cosas--.dijo el apagado.

Nadie se esperaba esto y de verdad me pareces alguien que necesita ayuda... entonces no tengo razones para odiarte--.dijo Mario mientras le daba caricias en su cabeza.

Su otro yo solo pudo soltar algunas lágrimas pero eran de sangre y estaba temblando un poco, por ello Mario se acercó a el para luego abrazarlo y podía sentir como el se aferraba. 

En ese momento una fuerte luz blanca invadió por todo el lugar para luego ambos se cubrieran entre sí.

Un momento después comenzó a abrir los ojos y parpadeaba para acostumbrarse a la luz de los focos.

Oye, ¿Estás bien?--.se escuchó una voz que conocía.

¿E-Eun-Yun?--.decia mientras se incorporaba un poco.

Toma--.dijo ella mientras le entregaba un pañuelo.

Mario no entendía hasta que ella le señalo la cara justo en la zona de los ojos, pues comenzó a frotarse y vio que tenía restos de sangre por ello daba entender de que su otro yo ya se encuentra vinculandose.

¿Que paso cuando estuve inconsciente?--.pregunto el.

Pero cuando ella iba a responder pues apareció Eun-Hyuk pero se encontraba serio.

Veo que despertaste, tardaste más tiempo que el otro--.dijo el.

¿Dónde está Hyun-soo?--.pregunto Mario.

Ven conmigo--.dijo Eun-Hyuk.

En eso fue guiado a una especie de sala para que luego que entrara pues Eun-Hyuk cerro la puerta.

¡Mario!--.dijo Hyun-soo para luego ir abrazarlo.

El solo correspondió mientras que le daba algunas palmadas en su espalda ya que sentía en como se aferraba. Ya preguntara después acerca de lo que sucedió.