Yo te protegeré

20

En esa misma noche Mario había notado a Hyun-soo un poco alterado entonces lo llevó a su departamento para que pudiera estar tranquilo.

Ahora estaba recostados en la cama de su habitación mientras que se abrazaban ya que si podía notar que estaba tenso.

Ha sido un largo día--.dijo Mario mientras le acariciaba el cabello.

Aún me siento mal por la señora An--.dijo Hyun-soo mientras se aferraba un poco más.

Yo también me siento mal pero éramos conscientes de que el virus llegaría a afectar a más de nosotros--.dijo Mario.

Ella no se lo merece--.dijo Hyun-soo.

Yo pienso lo mismo...ya suficiente castigo tubo al soportar a un verdadero monstruo que tenía como marido--.dijo Mario.

Hyun-soo solo asintió mientras que se acomodaba al pecho de el y de verdad estaba sintiendo demasiadas cosas que hacían que estuviera un poco perdido.

Mario--.lo llamó.

¿Que pasa?--.le preguntó.

¿Podrías darme un beso?--.le pidió.

No tienes que preguntar para obtenerlo--.dijo el mientras le daba uno.

Normalmente los besos de ambos siempre eran lentos y suaves pero hubo un momento en que el beso tomo velocidad y se ponían un poco húmedos, por lo cual se empezaba a poner intenso, ambos se separaron.

Mario se le quedó viendo un momento y en eso puso a Hyun-soo encima suyo.

Mientras que este volvió a besarlo para luego sostenerse con fuerza en el pero todo se puso intenso cuando empezaron a moverse, y pues hubo fricción en el miembro de ambos y Hyun-soo no pudo evitar gemir.

Hyun-soo... perdón si te incomode--.decia Mario que se separó para luego sentarse y recargarse en la pared.

N-No me incomodaste...es solo que me tomó por sorpresa--.dijo el.

Si se te hace que es demasiado, lo entenderé...no te preocupes, te dare espacio--dijo Mario que estaba a punto de moverse pero fue detenido.

No...No te vayas...de hecho me siento listo--.dijo Hyun-soo poniendose ansioso.

No quiero que te sientas presionado--.decia Mario preocupado.

De verdad quiero hacerlo Mario--.dijo Hyun-soo mientras que rodeaba sus brazos en el cuello del extranjero.

Mario solo puso sus manos alrededor de su cintura y de ahí lo beso con intensidad ya que estaba volviéndose impaciente con esto.

Ahora mismo el beso se torno más rápido y más húmedo, Mario estaba apretando un poco los costados del cintura de Hyun-soo, esto se hacía más fuerte.

Mario había bajado al cuello mientras escuchaba la respiración agitada de su pareja y también en como el ahora estaba sujetando con fuerza sus brazos.

Ahí es donde ambos habían quedado desnudos del torso y también como Mario había comenzado a besar el pecho de Hyun-soo.

Ah--.gimió.

El extranjero lo recostó en la cama mientras que seguía besándolo, de verdad se estaba volviendo loco al estar cerca de la suave piel de su pareja y al mismo tiempo estar escuchando los gemidos.

Volvió al cuello pero su mano iba directo al miembro de Hyun-soo para luego empezar a masturbarlo y de ahí volver a besarlo.

Ah...Mario--.gemía el al separarse.

Mario le comenzó a quitar el pantalón y el boxer para luego hacer lo mismo tambien y que ambos quedarán desnudos.

Mario...por favor--.suplicaba Hyun-soo de manera desesperada.

Mario solo acató lo pedido pero ahora en vez de usar la mano, esta vez comenzó a usar su boca para poder atender su miembro.

¡Ah!--. Hyun-soo soltaba un gemido más fuerte por ello.

El extranjero solo sentía como era tomado del cabello y escuchaba su nombre mediante las súplicas de su pareja de que no parara.

M-Mario...Voy a--.apenas Hyun-soo podía hablar ya que era tocado por algunas áreas sensibles.

Mario continuaba con más velocidad, al tal grados de no poder evitar gruñir y haciendo que tocara más puntos sensibles de las cuales provocaba que Hyun-soo temblara por el placer.

Momentos después Hyun-soo no pudo evitar correrse en la boca de Mario haciendo que soltara un pequeño grito mientras se sostenía de la sabana.

Ambos estaban con la respiración agitada pero aún no había terminado, entonces se había acercado a besar su mejilla un momento para que Hyun-soo se calmara un poco.

Mario lamió tres dedos hasta que quedaran bien humectados para luego poner el primero en la entrada de Hyun-soo.

¡Hmp!--.se quejo ante la incomodidad.

Entonces comenzó hacer una pequeña penetración hasta que se acostumbrara, para luego que al ver qué no se quejaba puso el segundo dedo y hacer movimientos de tijera haciendo que se arqueara por ello.

Mario volteo hacia a Hyun-soo y veía que tenía los ojos cerrados y se estaba mordiendo el labio pero no al tal grado de sangrar pero vio que hacía la cabeza hacia atrás al momento de que puso el tercer dedo y después besarlo un momento.

¿Estás listo?--.le preguntó mientras se posicionaba.

Estoy un poco nervioso--.decia desviando la mirada.

No quiero presionarte, si no te sientes seguro lo podemos dejar así--.dijo Mario.

¡No! ¡Si quiero hacerlo!--.decia ansioso ahora.

Tranquilo...Lo haré y no te preocupes voy a ser gentil...lo que menos quiero es lastimarte--.dijo Mario.

Hyun-soo solo asintió mientras se estaba sosteniendo de la almohada un poco. Entonces el extranjero abrió sus piernas mientras estaba sosteniendo sus muslos con cuidado para luego comenzar a penetrar lentamente.

Hyun-soo comenzó a gemir con fuerza al sentir el miembro en su interior, era una sensación muy fuerte pero muy placentera que le hacía sentir un fuerte calor por todo el cuerpo.

Mario se deleitaba ante las reacciones de Hyun-soo, esto era un placer bastante intenso del cual nunca había experimentado y le encantaba sentirlo junto con la persona que amaba.

¡Ah!--.dio un grito Hyun-soo.

¿Es ahi?--.le preguntó.

Hyun-soo solo asintió mientras tenía la respiración agitada, entonces Mario penetró con un poco más de fuerza y a la misma vez que aumentaba la velocidad haciendo que los gemidos de ambos aumentaran.

El extranjero fue a besarlo mientras seguía y el calor se intensificó más, entonces continuaron hasta que ambos se liberaron.

Se separaron para luego que de sus bocas saliera un fino hilo de saliva haciendo que Hyun-soo se sonrojara.

Fue...Fue el mejor momento que he tenido en mi vida--.decia Mario tratando de regular su respiración.

Yo igual pienso lo mismo--.dijo Hyun-soo.

Mario salió de Hyun-soo para después ambos se acomodaran en la cama mientras se cubrían con una sábana para después dormir.