Capítulo 21.

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Y estaba oscuro.
Abrí mis ojos y lo único que logré divisar fue el ventanal de mi pieza que quedaba al frente de mi cama,y afuera de él solo estaba la evidencia de una tarde de lluvia; gotas de agua estaban pegadas en el vidrio y resaltaban por la luz que llegaba desde el alumbrado público de la calle...no había ruido,ni compañía al otro lado de mi cama. No había nada. Lentamente me enderecé y apoyé mi cabeza en el respaldo de la cama,miré a mi costado y ya ni la silueta de otro cuerpo estaba marcada en el cobertor...realmente era como si hubiese estado sola todo este rato. Mi teléfono estaba al borde de la cama,así que lo tomé y miré la pantalla "20:10pm" indicaba; mierda,me había dormido toda la tarde.

Bajé las escaleras,pero debido al abrumador silencio sabía que no había alguien en casa...alguien además de mi. Me serví un café,y al darle un sorbo comencé a reaccionar...Luke se había ido y ni siquiera me había despertado...ni siquiera había dicho "hasta luego" ,pero ¿por qué?. Tomé mi teléfono, y al revisar los mensajes no encontré ninguno de Luke,solo miles de Abbie que lógicamente no quería contestar ahora. Bloqueé la pantalla,y subí molesta a mi habitación. Me metí en mi cama,y aún frustrada (estúpidamente) me tapé apagué la luz y me acosté a dormir; no tenía sueño,pero no veía algo más entretenido para hacer qua eso,así que eso hice.

-
Era domingo en la noche y no había ningún mensaje que me interesara leer,es decir,ninguno era de Luke. Había estado todo el día en pijama y en mi pieza,porque si era sincera no tenía ganas de nada; para el almuerzo- y como para variar estaba sola- me había preparado un poco de ensalada y me había sentado en mi cama a ver alguna serie de la televisión. Luego,Abbie llamó e insistió alrededor de diez minutos para ir al centro comercial,pero nunca logró su cometido...yo me quedé dentro de las cuatro paredes porque no tenía ánimo de hacer algo.
Sí, mi actitud era para variar algo exagerada y sin fundamentos,pero, el día anterior Luke se había ido de casa sin despedirse,no avisó si había llegado bien a casa o por lo menos una señal de vida no había dado, y al otro día tampoco había hecho acto de presencia, así que yo no insistiría, y me encerraría. Bien Vic.
Me recosté con los audífonos puestos y dejé que Coldplay me llevara a algún lugar lejano, quería dejarme llevar como antes cuando escuchaba algo de música o alguna letra me daba sentido,pero hoy en particular,ningún idioma era comprendido por mi. -Vic-llamaron y abrí los ojos. Mamá estaba de pie junto a la puerta de mi habitación. Fruncí el seño,me enderece y quité uno de los audífonos de mi oído-¿si?- quise saber realmente extrañada. Ella sonrió a labios sellados y entró. Caminó tímida como pocas veces hacia mi cama,y al ver que yo no me movía, se sentó en el borde- Hoy con tu padre estuvimos pensando un poco la situación, y creemos que te debemos una disculpa...-levanté una ceja producto de mi sorpresa- ...¿en serio?- ella asintió- queríamos ver si te parece ir a cenar mañana por la noche con nosotros,ya sabes,como en los viejos tiempos.-sonrió de lado y me fue inevitable no sentirme feliz. Asentí- claro,será genial mamá.- se levantó y acarició mi nuca por unos segundos- espero sepas que de verdad lo lamentamos,amor- asentí- tranquila,yo entiendo.- ella caminó tranquila a la puerta y antes de salir volteó a verme- ten dulces sueños- me dio de esas sonrisas que extrañaba ver en ella,y salió cerrando la puerta. Sonreí,por fin.

El despertador sonó. Abrí mis ojos y maldecí el día, mi cama era más cómoda de lo que podía tolerae,y dejarla me resultaba una tortura. Entré en la ducha,y luego de unos (varios) minutos,ya estaba lista. En la cocina ya no había nadie,por lo que el único ruido era el de la televisión con el noticiario sintonizado; tomé mi café,unas tostadas y subí a cepillar mis dientes.
Diez minutos después, salí de casa producto de la bocina de Abbie; la vi mientras yo caminaba hasta su auto y le Sonreí... Mierda,el camino a la escuela sería un interrogatorio.
-¿y entonces?- fue lo primero que dijo al yo cerrar la puerta y colocarme el cinturón- Hola,yo estoy bien gracias,¿qué hay de ti?- me burlé. Ella rodó los ojos y encendió el auto- No molestes,Vic. Estuve todo el fin de semana pegada a mi teléfono esperando que contaras por lo menos un detalle de todo,y no hiciste nada de eso...dame algo de crédito, no vine a tu casa a interrogarte.-sonreí y pasé una mano por mi pelo; el momento había llegado- No pasó nada,vale,sí. Fue el hombre más dulce existente, Abie. Se preocupó mucho por mi.- Como un abuelo hace con su nieta- comentó derepente. La miré extrañada- no me mires así, pero es cierto,me cuentas esto como algo tan cursi...¿pasó algo o no? Necesito saberlo- solté una carcajada- y sí, nos besamos. De hecho cuando entramos a su casa me acorraló contra la puerta y me besó, me besó de una forma tan...-me sonrojé al recordar- excitante...- Abie se detuvo de golpe y comenzó a gritar. Tapé mis oídos mientras reía- Mierds Abie,nos pudiste haber matado!- ella me miró sonriendo como si su boca se fuera a partir por la mitad- ¡Esto es genial! Necesito que sigas,¿hubo sexo?-¿QUÉ? ¡claro que no!-dije sonrojada al máximo sintiendo cómo mi cara latía producto del calor- Ay bueno-rio- no era necesarip ser una granada,eh.-reí y golpeé su hombro- Solo fue todo demasiado irreal- vi como sonreía de lado a pesar de estar concentrada en el camino-aunque...- me detuve. Entramos en los estacionamientos de la escuela-¿aunque?-preguntó al detenerse. La miré y recordé toda mi rabia y desentendimiento- el sábado fue a casa,y estuvimos la tarde juntos,pero,nos recostamos y me quedé dormida... Al despertar él ya no estaba,y no hubo ningún menssje de él...nada,ni siquiera un "llegué bien" o algo,ni esa noche ni ayer...mucho menos hoy en la mañana.- Abie asintió- quizás tuvo cosas que hacer...no lo sé-elevo sus hombros- pero,eso ya no importará porque lo verás hoy-me sonrió cálidamente... Yo quería estar tranquila,pero como insegura se nace sabía que algo malo podría pasar,y me desanimaba antes de tiempo.
Comenzamos a caminar con nuestros bolsos a través del gran estacionamiento de la escuela; el día amenazaba con lluvia y el viento hacia que se helara cada centímetro de mi cuerpo. Entramos a la escuela,y sin hablar mucho caminamos hasta los casilleros...Luke no estaba por ningún lado. Saqué mi libro,y volteé para esperar a Abie. Ella me sonrió, cerró su casillero y caminó hasta a mi- Me toca historia-dijo sabiendo que mi caso era literatura-¿ te veo en el receso?- asentí. El timbre sonó, y ambad caminamos en dirección opuesta.
Entré en el salón y me dispuse a caminar hacia lo que se había transformado mi puesto y el de Luke en el ramo,es decir,los dos pupitres casi al final pegados al ventanal. Llegué hasta allá, acomodé mis libros y me senté a esperar algo ansiosa a que él entrara. El panorama afuera era un poco más atractivo,por lo que me dispuse a mirar cómo los árboles de hojas café y naranjas se movían suavemente por la corriente de viento y como de a poco las hojas se acumulaban en los pies del tronco...Todo lucía muy calmo,y me agradaba poder observar eso.
Mi atención se desvió cuando la voz del maestro llamó la atención dando los buenos días. Miré a la entrada del salón y finalmente un sonriente Luke entró por la puerta; sonreí de lado al notar que las mariposas en mi estómago habían comenzado a brotar,y estúpidamente corrí un mechón de pelo y lo coloqué detrás de mi oreja a la espera de que él se sentara junto a mi como ya era costumbre,sin embargo ni su sonrisa,no su caminata ni su mirada eran dirigidas a mi. Se sentó en los pupitres al medio del salón con una chica y un chico....Mi sonrisa se desvaneció de a poco,y la duda me invadió ahora un poco más y con un poco más de evidencia...¿qué pasaba ahora?.

Beside YouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora