Pálpitos de un corazón herido [+18]

Capítulo 26

Cambio de planes.

Rebecka

Es increíble como los planes que hacemos a futuro pueden cambiar en un abrir y cerrar de ojos, te puedes enamorar de quien menos lo esperas, te alejas de personas con las que creíste qué estarías toda tu vida. De repente pasan cosas que deforman tu destino.

De pronto el monstruo que tanto te atormenta desde niña aparece y se lleva a tu hermana, la historia se repite, con la diferencia de que ahora no estás sola y jamás lo estarás.

Todo cambia tan rápido como cuando la doctora te informa que llevas una vida en tu interior, que aún después de todo lo que viviste hay un pequeño ser que te dirá toda su vida mamá, un bebito que proviene del amor más lindo y sano que has experimentado.

—Les daré un poco de privacidad — nos dice la doctora y sale cerrando la puerta a su espalda.

Sigo en silencio, estoy procesando todo. Thiago se sienta a los pies de la camilla y me toma las manos, está igual de conmocionado que yo.

—Muñeca te amo, ¿Lo sabes cierto? — asiento — haremos lo que tú quieras hacer.

Niego y bajo la mirada.

—No solamente me compete a mí está decisión Thiago.

—Pero es tú cuerpo…

—Pero será nuestro hijo el que sufrirá las consecuencias de cualquiera que sea la decisión, ¿Qué quieres hacer tú?

—Quiero tenerlo — me suelta sin dudar — desde que te vi por primera vez supe que yo quería estar contigo, que quería una familia y un futuro a tú lado. Se que no es el mejor momento pero esto para mi es de las mejores cosas que me han pasado, aun así tú eres quien tiene la última palabra y si no estas lista yo te apoyo, tendremos más tiempo.

Lo pienso un momento en mi posición y por la situación en la que me encuentro lo más sensato y fácil sería interrumpir el embarazo, pero no sé siente correcto al menos no para mí, no se trata de ideales porque soy fiel defensora del derecho a elegir.

Se de lo que soy capaz y el ser madre no me queda chico, ya soy madre de dos jóvenes impresionantes y ahora no estaré sola, ahora tengo a un hombre que me ama y que protegerá a este bebé tanto como yo.

—Yo quiero esto Thiago, quiero al bebé.

Sonríe grandemente y me besa eufórico toda la cara haciéndome reír.

—Seremos papás — dice contra mis labios — joder ¡Seremos papás!

Sonrió y dejo que me besé y entonces vuelve a ingresar la doctora y nos ve con una sonrisa.

—Veo que ya pudieron procesarlo, ¿Cómo procedemos?

—Queremos seguir con el embarazo — le digo y asiente sonriendo.

—Muy bien, por lo visto todo está correcto, a pesar del trauma que sufriste no afectó en nada a él embrión, pero igualmente te mandaré vitaminas y trata de guardar reposó — anota — también recomiendo que empieces a tomar terapia si es que no lo haces ya, este tipo de traumas como el que sufriste suelen ser bastante duros psicológicamente y será aún más con todos los cambios hormonales que el embarazo te causará.

Thiago me ve preocupado y desde ya sé que no será nada sencillo, pero ahora no soy la niña de antes y se que puedo con esto.

—Me gustaría que tomes tu salud mental igual o con más importancia  que la física, para evitarnos depresión postparto y ese tipo de trastornos — sonríe cálidamente y asiento — los veo entonces en tres semanas para poder revisar bien como va todo y que puedan escuchar el corazón de su bebé.