El deseo de amar para siempre [TERMINADA ✔️]

CAPÍTULO 30 → FARAH

La escena resultó incluso graciosa.

Isaac ya había salido de mi cuarto, se había encerrado en el suyo a hacer cosas de Isaac, aunque por lo básico que era, seguro que se había metido a escuchar música.

Antes de encerrarse en su búnquer llamado habitación, le dio un par de collejas a su hermano, y este reía por no llorar. Yo estaba ahí, de espectadora, aguantando las ganas de reírme.

Pero por fin estaba sola, sin estúpidos atractivos que incordien ni hermanos simpáticos que encierran en cuartos... sin nadie. Por fin podía escribir a solas.

El ordenador seguía desbloqueado, aunque con la pantalla más oscura, avisando que en unos segundos se activaría el modo ahorro de energía. Rápidamente, pasé mi dedo por la pantalla, mi portátil era táctil, así que no necesitaba un ratón. La pantalla volvió a encenderse, coloqué mis auriculares — ya conectados — en mis orejas y reproducí música. La canción Mockingbird de Eminem sonaba a través de mis auriculares.

Por fin iba a abrir el documento con mi libro en proceso dentro, cuando llamaron a la puerta.

¿Quién era? Isaac no podía ser, sabiendo que una vez que se encerraba, no salía. ¿Aina? No, ella me llamaría, no la gustaba molestar. ¿Adrien? Él era un hombre ocupado con llamadas y trabajo todo el día, en caso de que necesitara algo, hubiera mandado a Aina a decírmelo.

— ¡Pasa! — Dije, a través de la puerta.

Abrieron la puerta, y allí estaba nada más y nada menos que Lynch, el hermano menor — de mi edad — de Isaac.

— Hola — saludé en una risita nerviosa —, ¿necesitas algo?

— Sí, conocerte — dijo, encogiéndose de hombros y cerrando la puerta, entrando en mi cuarto —, me has caído genial, aunque no hemos ni hablado.

Ah, un ser sociable...

— Tampoco tengo mucha cosa interesante — mentí —, soy demasiado básica cómo para mantener una conversación de cinco minutos hablando de mí.

— Nah, seguro que eres una chica muy interesante — hizo un gesto con la mano ─, tu nombre era Farah, ¿verdad?

─ Sí ─ reconocí ─, bueno, ¿qué quieres saber?

─ No sé, pues lo que se le pregunta a una persona que acabas de conocer ─ se encogió de hombros ─, ¿dónde vivías antes? ¿Qué estudias? ¿A qué te quieres dedicar? ¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre? ¿Cuáles son tus grupos musicales favoritos? ¿Cómo es tu personalidad? ─ Enumeró.

─ Bueno, antes vivía en Luxemburgo... ─ me daba algo de cosa decir qué estudiaba y a qué me dedicaba, pero... tenía que intentarlo, quizá si empezaba a contestar las preguntas con sinceridad y naturalidad, podría superar ese miedo al rechazo cuando lo supieran —... estudio Filología y quiero ser escritora. ─ Quedó asombrado, al parecer le llamó la atención ─. En mi tiempo libre me gusta escribir, escuchar música, leer, dibujar... nada fuera del otro mundo. Mis grupos favoritos de música son Eminem, Taylor Swift, AC/DC, The Weeknd, Coldplay y Chase Atlantic, no tengo un preferido entre ellos ─ entrábamos en tierra peligrosa, era hora de describir mi aburrida personalidad ─. Mi personalidad... es muy... diferente. Soy esa clase de persona que le gusta estar aislada del mundo junto a su música y su portátil, no soy buena haciendo amigos, soy algo tímida, socializar no es mi aficción favorita... no sé, soy básica y aburrida.

─ A mí me pareces una chica fascinante, tienes una memoria increíble ─ era imposible negarlo; el chico era adorable y muy simpático, daban ganas de seguir hablando con él ─. Entonces, ¿escribes?