PRÓLOGO

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─Odio a este hombre ─gruñe Uxue, arrugando varios papeles─. Te juro que cuando tenga la oportunidad le voy a tirar una silla a la...

─Uxue, concéntrate ─mascullo─. Hemos perdido mucho tiempo para el trabajo y tenemos que exponerlo mañana.

─Dios mío, qué ganas tengo de que sea mañana ─exclama en un susurro.

Yo enarco una ceja.

─¿De qué hablas? ¿Te has vuelto loca? ¿Dónde está mi mejor amiga y quién eres tú? ─bromeo.

─No, no es por el proyecto ─se ríe─. Es por el intercambio.

─¿Intercambio? ¿Qué intercambio?

Abrió mucho los ojos y la boca.

─¡¿No te has enterado, Farah?! ¡Todo el mundo está hablando de eso! ─exagera─. Es un viaje a Ámsterdam.

Me intereso y le pido con un gesto que continúe.

─¿De verdad no habías oído nada?

─No, sinceramente. Por si se te ha olvidado, me junto con cuatro personas contadas ─gruño.

Esboza media sonrisa.

─A ver ─se pasa una mano por el pelo cortado por los hombros y se acomoda mejor sobre mi cama─. Todos los años se organiza un viaje que se podría denominar "intercambio", pero no será para estudiar en otro estado y esas cosas. Este año han decidido hacerlo de un modo diferente. Será como un año sabático. Para desconectar, convivir con otras personas, y creo que también es una indirecta para que nos independicemos ─bromea─. Será en Ámsterdam. Siempre he querido ir allí. Es fácil, si quieres apuntarte, te irías con una familia neerlandesa ─me explica─. La verdad, pienso que es muy efectivo ir, porque allí se vive bastante bien y puedes conocer sitios y gente increíble. Las inscripciones se abren mañana por la tarde, a las once. Y yo estaré ahí la primera. Un mes después de que se abran, será el viaje.

La idea suena interesante, no voy a negarlo, y a mi yo de quince años le hubiera fascinado la idea de ir a Ámsterdam. Siempre había querido ir y no paraba de hablar de ello. Y también suena muy bien eso de conocer sitios nuevos.

Cuando estaba en primero de secundaria fui de intercambio a Francia por una semana, pero la idea de ir en mi primer curso de universidad, que llevamos apenas dos semanas de clases, suena fantástico. Y más si no voy a tener clases.

Me metí en la carrera de Filología con una meta en la cabeza: cumplir mi sueño.

Desde pequeña me ha gustado escribir, y me pasaba los días encerrada en mis historias, creando mundos y personajes. Y un día, cuando tenía trece años, me lancé a publicar mi primera novela romántica en un foro social de internet. Tardé mucho en ganar reconocimiento, a pesar de que no mostraba mi identidad al completo, pero poco a poco fueron llegando las lecturas y fui ganando premios que organizaba la aplicación. A día de hoy, tengo medio millón de visualizaciones en mis libros, todos publicados en esa aplicación, que reciben apoyo cada día, y aun así sigo pensando que no son lo suficientemente buenos.

Pero son míos, y nadie más va a poder escribir como yo lo hago.

Porque esa es la magia de la escritura.

Que cada persona escribe de un modo, y este nunca podrá ser igualado.

─Se lo comentaré a mi hermano cuando vuelva ─me encojo de hombros─. Aunque no sé si...

─Farah, yendo podrías cumplir tu sueño. Lo sabes, ¿verdad? En Ámsterdam hay editoriales enormes que reciben manuscritos en cualquier idioma, y el rango de lectores es muy alto.

Me quedo mirándola en silencio.

─No sé, Uxue... Siento que no voy a ser suficiente para ellos, y... Mis historias no son tan buenas, ¿sabes?

─Sí que son buenas. Por algo tienen medio millón de visitas. Escucha, soy la única persona de tu círculo que ha leído tus historias, y te prometo que son increíbles. Te lo prometo.

Sonrío.

─Lo pensaré, ¿vale? Podríamos ir juntas, si quieres ─me aparto de la cara un mechón anaranjado y lo pongo detrás de mi oreja─. Buscaré información.

─Puedes pedirla en las oficinas de información de la universidad. Yo te diré dónde están ─me acaricia el hombro─. Solo están por la mañana, así que ¿podrías acercarte por mí? Yo mañana no voy a estar, tengo que cuidar de la hija repelente de mi vecina ─arruga la nariz y me río.

─Claro, me acercaré.

─Gracias ─dice─. Y prométeme que lo pensarás.

─Te lo prometo.

El deseo de amar para siempre [TERMINADA ✔️]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora