Capítulo 31: No te amo y jamás te amaré.

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El capítulo es cortito, mi hijo quería ver una serie y me apuró 😂 mañana espero subir otro, si comentan mucho, claro🖤🤍

El capítulo es cortito, mi hijo quería ver una serie y me apuró 😂 mañana espero subir otro, si comentan mucho, claro🖤🤍

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Mariana

Dos días después trabajaba con Johan en el despacho de Nicolás, a quien había visto muy poco.

Llegaba muy de madrugada a la cama y se despertaba mucho antes que yo, una clara señal de que no quería arreglar las cosas entre nosotros, ni que decir de hablar sobre el tema de la mujer, el cual decidí dejar estar. Me importaba, pero no iba a obsesionarme con eso cuando había cosas más importantes de las que debía hacerme cargo.

Mientras estaba peleando con Nicolás, tratando de obtener respuestas, Elías y Yuly seguían libres y muy bien parados en México. No podía perder el enfoque y mi objetivo, la justicia para mi padre fue mi prioridad y no iba a cambiar ahora por un hombre. Mi vida sentimental estaba muy por debajo de mis prioridades y quizá por ello nunca vi lo mal que se encontraban las cosas con Julián, dejé de prestarle atención a ese nosotros y probablemente sucedería lo mismo con Nicolás, aunque eso no era algo que quería, pero no haría nada al respecto.

Ya no estaba para esos trotes, algo así decía mi abuela.

—Tú eres un hacker, ¿no? ¿Cómo esos que salen en las películas? —Inquirí hacia Johan, quien alzó el rostro hacia mí, mirándome burlón con esos enormes ojos negros.

Una de mis manos estaba apoyada en la silla de cuero detrás de su espalda curvada levemente hacia atrás, la otra descansaba encima del escritorio, mi cercanía era algo que no le molestaba y a la que no le presté mucha atención, no cuando mis ojos abarcaban la información que tenía en los cuatro monitores frente a mí.

—¿En serio, Mariana? ¿Cómo el de las películas? —Murmuró divertido. Había comenzado a llevarme bien con él, era un chico inteligente y bastante alivianado, la única persona con la que crucé palabra desde la escena en la cocina.

—Sabes de lo que hablo, solo dime sí o no.

—¿Qué estás planeando? —Averiguó interesado.

—¿Crees que puedas intervenir la señal del noticiero y transmitir un mensaje de mi parte? —Sus expresivos ojos se mostraron emocionados ante mi idea— Quiero decirles unas cuantas cosas a Elías y Yuly, y claro, a todo aquel que esté sintonizando el canal.

—¿Estás segura? —Encogí mis hombros, divertida con lo que visualizaba en mi mente.

—Sí. Sé que ya no puedo hacer nada al respecto por la vía legal, subir el video a internet era una opción, pero subirlo al noticiero después de darles un mensaje a esos bastardos, me suena mejor.

—Así sabrán que fuiste directamente tú quien los está exhibiendo.

—Exacto —acepté, sintiendo de nuevo esa adrenalina que perdí cuando llegué a Colombia.

Gris oscuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora