Mundos iguales

69. Niño

El resto del día lo pase en Alexandria cuidando el muro, por la tarde llegó Scott con las cartas de Hilltop y el Reino.

Los salvadores no tienen ninguna escapatoria, pero no todo son buenas noticias.

Carol escribió que los embuscaron y todos los soldados del Reino están muerto, solo Jerry, Ezekiel y ella lograron salir. Hasta Shiva murió protegiendo a Ezekiel de caminantes.

Maggie escribió que Jesús tomó de rehenes a todo un grupo de Salvadores, de las bases de Simón, aún no sabe que hacer con ellos.

Daryl poco después, dijo que Rick se fue por su cuenta para negociar con los carroñeros.

No me agrada mucho la idea, pero ya no contamos con la gente del Reino así que necesitamos más gente.

Esta noche llevarán a cabo la última fase del plan, veremos a Negan morir.

Estoy en el puesto de vigilancia, me he sentido algo mal y he vomitado en dos ocasiones.

Miró hacia atrás al escuchar la risa de Jude, la veo jugando con Carl.

Ya me decía en donde demonios se había metido el niño, hacia rato que no lo veía.

Coloco mi mano en mis ojos, mierda, me siento mal.

Scott: Deberías ir a descansar —voltee a verlo —. Al menos deberías dejar que te revisen.

Cass: Estoy bien, ya sé me pasará.

Scott: ¿Estas segura? —asiento con la cabeza.

Carl: ¡Oye, Cass! —voltee a verlo.

Sonrió, él y Jude me saludan. Levanto la mano en forma de saludo.

Scott: La primera vez los vi y como los cuidaba crei qué eras su madre —reí —. Es verdad.

Cass: Su madre era buena persona y mi amiga, cometió errores pero… nunca dudaré de su amor a sus hijos —acomodó el arma —. Hice una promesa de siempre cuidarlos, son especiales y el futuro.

Hice una mueca al sentir náuseas, Scott coloca su mano en mi hombro.

Cass: Creo que te tomaré la palabra de descansar —le entrego el rifle.

Scott: Si necesitas algo llamame —asentí mientras bajo las escaleras.

¿Qué carajos es lo que tengo?

Finjo estar bien cuando Jude viene corriendo hacia acá, me abraza de la pierna.

Carl viene detras de ella, me agachó y cargo a Jude.

Carl: Te vez pálida, ¿estás bien? —asiento.

Cass: Siempre he sido pálida, niño —caminamos hacia la casa —. ¿Donde estuviste hace rato? No te encontraba por ningún lado.

Carl: Estaba haciendo algunas cosas —asiento con la cabeza —. Y al desocuparme quería pasar el día con Judith.

Cass: De acuerdo —miro a Judith —. ¿Te divertiste, destructora?

Ella sonrie y ríe, eso es un si.

…

Terminamos de guardar las cosas para irnos hacia el Santuario.

Tengo que admitir que si siento nervios de impaciencia por que esto ya termine.

Daryl: ¿Estas bien para poder ir?

Cass: Si, solo… —fui interrumpida por golpes en la puerta de la comunidad, todos midamos a ella.

¿Qué demonios?