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Thomas y Minho no tardan en alcanzar al resto, voy la primera y por lo tanto les guío.

Subo unas escaleras mecánicas y giro a la derecha, sigo recto por un lateral de la segunda planta, pero justo cuando estoy a punto de girar la esquina una de esas cosas sale corriendo hacia mí.

-Oh joder- susurro levantando el machete.
-¡Nala no!- grita Newt cuando ve que corro hacia el infectado.

No sé de dónde saco el valor para enfrentarlo y clavarle el machete en el cuello, pero cuando lo hago toda su sangre oscura me salpica.

Saco el arma y me doy la vuelta con la cara empapada.
-¡Agachaos!- grito cuando veo el primer infectado tras ellos.

Con más confianza de la que esperaba lanzo el machete y se lo clavo en el pecho al infectado, que cae al suelo al instante por la inercia del golpe.

-Joder roja- dice fritanga sorprendido.
-¡Vamos vamos vamos!- exclama Thomas cuando la horda se avecina.

Subimos otras escaleras y llegamos a la tercera planta. Estamos corriendo por un pasillo cuando, de repente, un infectado rompe un cristal y cae sobre Newt.
-¡Newt!- me paro en seco y doy la vuelta.

-¡Socorro!- pide forcejeando con él.
Llego hasta ellos y me tiro sobre el infectado, ambos rodamos por la pasarela y caemos por la barandilla.

Yo me quedo colgando de ella y él de mí.
-¡Ayudadme!- grito cuando siento la mano del infectado en mi tobillo -¡Ayudadme!-Thomas y Newt cogen mis brazos y me suben, Minho golpea al infectado y este cae hasta la planta principal.
-Vamos vamos vamos- repite Thomas agarrando mi mano para que me ponga a correr de nuevo.

Llegamos a un pasillo estrecho con los infectados pisándonos los talones. El túnel se acaba en una puerta cerrada.

-¡No hay salida!- informa Minho.
Thomas, Minho y Newt comienzan a embestir la puerta, pero esta no se abre.
-Los mantendré alejados- dice Alan cargando la pistola y alzándola para empezar a disparar.

Todos golpean la puerta por segundos que parecen años, pero la cerradura no cede hasta que fritanga coge carrerilla y se estampa contra ella abriéndola de golpe.
-¡Ya está abierta!- grita Minho.

Todos pasan al otro lado excepto Alan y yo.
Agarro su camiseta y le obligo a cruzarla antes que yo, caigo sobre él y al instante Minho y Thomas cierran la puerta.

Tengo la respiración entrecortada y el pulso acelerado, veo borroso y tengo los oídos taponados. Lentamente pongo las manos a ambos lados de su rostro y cuando intento incorporarme los brazos me tiemblan y ceden haciendo que caiga de nuevo en el pecho de Alan.

-¡Vamos roja!- fritanga agarra mi torso y me levanta. Me carga sobre su hombro y aún desubicada veo cómo Aris y Newt levantan a Alan mientras Minho y Thomas mantienen la puerta cerrada.

Llegamos a unos escombros bajo la luz de la luna y nos estrujamos todos para mantenernos escondidos en ellos hasta el día siguiente.

Abro los ojos cuando escucho a Thomas gritarle a un pájaro.
-¿Ya se han ido?- pregunta Newt.
-Sí, creo que estamos a salvo, por ahora- contesta mirando sobre los escombros -Deberíamos seguir, coged vuestras cosas- agarra su mochila y se la coloca.

Me incorporo lentamente, me crujo la espalda, el cuello, los nudillos y suelto un gemido de alivio cuando acabo.

Me agacho para coger el pañuelo y cuando lo hago veo que Alan me mira.
-¿Estás bien?- le pregunto preocupada.
-Sí- se levanta -es que yo...- se queda callado mientras me observa.

-¿Qué?- le animo.
-Nada- agarra la pistola y se la guarda.
Pasa de largo y yo me quedo mirado su espalda extrañada.

-Está pensativo, no te preocupes- asegura fritanga comprensivo poniéndose a mi lado.
-Espero no haber hecho nada que le molestara- caminamos tras el resto.
-No creo que sea eso- nos quedamos un buen rato en silencio hasta que decide romperlo -Oye sé que dijiste que no querías hablar del tema- comienza -pero quiero que sepas que si en algún momento decides hacerlo- se calla de golpe y yo dejo de escucharle.

Abro los ojos sorprendida mientras contemplo en silencio la ciudad derruida, los escombros, los edificios caídos y los que aún se mantiene en pie a pesar de las malas condiciones, los coches oxidados y los puentes caídos.

Rápidamente nos volvemos a poner en marcha y seguimos con el camino.
-¿Qué ha pasado aquí?- pregunta Alan.
-No lo sé, pero parece que no hay nadie desde hace mucho tiempo- responde Newt.
-Espero que el resto del mundo no esté igual- añade Aris.

-Alto alto esperad- interviene Thomas -¿Oís eso?- todos nos callamos y el sonido de las hélices se hace más fuerte -¡Esconderos, todos a cubierto, esconderos!- nos agachamos bajo unos escombros y observamos la nave que vuela sobre nosotros.

Trago saliva y cuando bajo la mirada mis ojos se cruzan con los de Thomas.
-No dejarán de buscarnos- susurro asustada.

Atravesamos la ciudad y llegamos al desierto, subimos montañas infinitas de arena y las bajamos para subir otras de nuevo, el calor abrasa mi piel y la escasez de agua seca mis labios.
El tiempo pasa y solo puedo dar vueltas en mi cabeza, una tormenta de arena llega y aún cubriéndonos con los pañuelos, nuestro paso se relentiza. Paramos para refugiarnos en la sombra de una estructura derruida.

Thomas observa el camino desde una montaña a unos metros de nosotros, Teresa se levanta y le acompaña, yo sacudo la arena de mis pantalones y también me incorporo.
-Fritanga- le llamo.

Alza la cabeza y el resto hace lo mismo.
-¿Podemos hablar?- pregunto firme pero nerviosa.
-Sí claro- termina de vaciar su zapato se lo pone y me acompaña hasta una roca no muy lejos del resto.

Fritanga es la persona menos seria que conozco, pero cuando de veras hace falta un consejo o simplemente unos oídos que te escuchen siempre está ahí.

-¿Va todo bien Roja?- rompe el silencio.
-Sí- respiro hondo y pienso mis palabras -Quiero contarte algo- le miro fijamente -pero no quiero que se lo cuentes a nadie- aclaro -Antes- se me humedecen los ojos, pero contengo las lágrimas -antes de que entrarais en la habitación- trago saliva -cuando Casey empezó a tocarme- los recuerdos vienen y se me hace un nudo en la garganta.

-No tengas prisa roja- dice fritanga con ese tono alegre que mantiene aún en las peores situaciones -Si no quieres contármelo no lo hagas, y si quieres hacerlo, tómate tu tiempo- sonríe y aunque sé que no es una sonrisa de felicidad la agradezco.

-Cuando Casey empezó a tocarme- me froto las manos para disimular el temblor de ellas -dijo algo- fritanga las envuelve con las suyas y asiente para darme confianza -cuando tocó mi pecho dijo que lo echaba de menos- su ceño se frunce extrañado y al instante sus ojos se abren sorprendidos.

-Creo que fue mi pareja- una lágrima se me escapa y rápidamente la seco para observar la reacción de fritanga.

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Buenoo! La bomba que acabo de tirar, aclaro que esto son suposiciones de Nala y puede que no sean verdad o puede que sí, el caso es que os dejo con la intriga.
Nos vemos :)

<3

Roja (The Maze Runner)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora